Internacional - Economía

El banco central de Colombia se prepara para un año difícil

2013-02-13

De acuerdo a Uribe, el peso permanece demasiado elevado, y sería mejor ver una...

Por DARCY CROWE, WSJ

BOGOTÁ—El banco central de Colombia se prepara para un año difícil que someterá a prueba su capacidad para revertir la desaceleración de la economía al tiempo que combate la apreciación del peso, uno de los desafíos más disruptivos que han enfrentado las autoridades monetarias locales.

José Darío Uribe, titular de la entidad, dijo que se están viendo altos niveles de incertidumbre en relación a la naturaleza de los varios impactos a los precios y la producción. Añadió que el desafío del banco central es presentar el diagnóstico correcto y mantener las tasas de interés en un nivel que sea apropiado para mantener la meta de inflación.

Actualmente, el banco central de Colombia está embarcado en un ciclo de rebaja de tasas para generar un mayor crecimiento económico. Pero su principal desafío podría no estar directamente relacionado con el crecimiento económico y la inflación, sino que con la apreciación del peso.

La moneda colombiana se fortaleció alrededor de 9% el año pasado, una tendencia que varios economistas atribuyen al aumento de las inversiones extranjeras directas en los sectores petrolero y minero del país. Los exportadores, en tanto, ven que sus productos se vuelven menos competitivos en el extranjero y han acelerado sus llamados al gobierno y al banco central para que aumenten sus esfuerzos contra la fortaleza del peso.

Recientemente, de acuerdo a Uribe, el banco central ha optado por una intervención más enérgica. La entidad ahora compra unos US$750 millones mensuales, lo que se compara con los US$500 millones mensuales a fines del año pasado. Ello ha detenido los avances del peso, pero todavía no ha generado un retroceso completo.

De acuerdo a Uribe, el peso permanece demasiado elevado, y sería mejor ver una depreciación. Agregó que las inversiones extranjeras directas, que el año pasado alcanzaron casi US$15.000 millones, caerían levemente en 2013.

Los estudios del mismo banco central muestran que el peso podría estar sobrevaluado en torno a 8%, algo que según Uribe muestra que hay una real posibilidad de que el tipo de cambio no esté en línea con el valor real del peso.

Dada la fortaleza del peso y su impacto sobre los exportadores, el banco central y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos están evitando el uso de controles de capital que podrían limitar los ingresos de dólares. El banco central, que podría imponer controles a las empresas locales que asumen deuda en el extranjero, no está considerando actualmente esa opción, señaló Uribe.

Afirmó que el banco central no ve una situación en la que los beneficios asociados con el uso de controles de capital superen los costos.

Uribe no parece compartir los análisis que señalan que Colombia está cerca de lo que los economistas catalogan como "enfermedad holandesa", un padecimiento económico asociado con la erosión del sector manufacturero debido a un aumento de las exportaciones de bienes básicos.

Esta es una economía que ha pasado por una fuerte apreciación cambiaria, pero al menos hasta hace poco no hay evidencia de que esa apreciación haya generado una desindustrialización, señaló Uribe.

También han surgido varias señales de advertencia, incluso del Fondo Monetario Internacional, de que la economía colombiana se está volviendo demasiado dependiente de sus sectores petrolero y minero. Sin embargo, Uribe desestimó estas advertencias y afirmó que estos sectores han sido importantes para la economía, pero su rol probablemente ha sido exagerado.



ROW

Notas Relacionadas

No hay notas relacionadas ...



Utilidades Para Usted de El Periódico de México