Internacional - Política
Alcalde de Florencia, Renzi, se prepara para sacudir centroizquierda italiana
Por James Mackenzie
ROMA (Reuters) - El Partido Democrático (PD) de Italia, con orientación de centroizquierda, elegiría como líder al carismático alcalde de Florencia, Matteo Renzi, un político que representa tanto la posibilidad de una renovación como una amenaza para la ya debilitada coalición del primer ministro Enrico Letta.
Renzi, de 38 años, es el gran favorito para ganar la elección primaria del domingo que elegirá a un nuevo secretario para liderar el partido más grande del Gobierno de Letta.
Sin embargo, la sospecha de que tiene ideas de izquierda anticuadas, una manifiesta ambición y sus bruscas destituciones de algunos de sus colegas partidarios ha hecho que Renzi se gane tanto enemigos como amigos.
Se supone que ninguno de sus rivales, Pippo Civati, de 38 años, y el ex comunista Gianni Cuperlo, de 52 años, tiene serias probabilidades de ganar la elección primaria, que es abierta para cualquier votante registrado y no solo para miembros del partido.
Adepto a las apariciones televisivas y a veces comparado con el británico Tony Blair, Renzi sumó complicaciones al enfrentar a su colega del PD Letta, amenazando el delicado equilibrio de su coalición con fuertes demandas para que el partido ponga su sello con más firmeza en el Gobierno.
Renzi no se unirá al Gobierno, pero como líder partidario es el favorito a encabezar la lista del PD con vistas a la próxima elección como candidato a primer ministro.
Sin ser específico, Renzi presionó a Letta para que sea más agresivo en la modificación de la normativa del empleo para crear más puestos de trabajo, la reforma del estancado sistema político italiano y el trabajo para que Europa funcione mejor.
"Es ahora o nunca", dijo Renzi esta semana en una de sus interminables apariciones televisivas antes de las primarias. "O el PD aprovecha este momento o será arrasado".
Las encuestas dan a Renzi un índice de aprobación más alto que a cualquier otro político, a excepción del presidente Giorgio Napolitano, que está por encima del combate partidario. Pero Renzi sabe que la suerte puede cambiar rápidamente y que su momento clave puede no darse de nuevo.
El miércoles retiró su promesa explícita de apoyo para un voto de confianza solicitado por Letta para confirmar su mayoría tras la salida de Forza Italia, el partido del ex primer ministro Silvio Berlusconi.
Sin embargo, sus aliados rechazan la idea de que pueda ser tentado, tal vez por su ambición personal, a obstaculizar el accionar del Gobierno para desencadenar nuevas elecciones que podrían instalarlo como primer ministro.
Según una encuesta del instituto Tecne publicada esta semana, entre 1,4 y 2,1 millones de personas votarían en las primarias. El respaldo para Renzi se estima entre el 52 y el 56 por ciento, 20 puntos por sobre su rival más cercano, Cuperlo.
EEM
