Internacional - Política

Universidad Trump se aprovechó de inversionistas novatos

2016-06-08

Pero correos electrónicos internos revisados por The Associated Press muestran que personal...

Por MICHAEL BIESECKER y PAUL J. WEBER

WASHINGTON (AP) — Cuando las autoridades de Texas investigaron a la Universidad Trump por fraude hace seis años, los abogados de Donald Trump usaron los mismos argumentos de defensa que el precandidato presidencial republicano ha dicho estos días: que los ahora desaparecidos talleres sobre bienes raíces fueron de primera categoría y que los estudiantes estuvieron sumamente satisfechos.

Pero correos electrónicos internos revisados por The Associated Press muestran que personal del entonces fiscal general del estado Gregg Abbott no creyeron el cuento de Trump. Abbott es ahora gobernador republicano de Texas y apoya abiertamente a Trump.

"Los consumidores con quienes hemos hablado han manifestado enorme insatisfacción con el curso y materiales de la Universidad Trump", escribió en un correo electrónico en junio de 2010 Rick Berlin, un asistente del fiscal general en la División de Protección al Consumidor del estado. "Ellos creen que fueron atraídos al seminario con falsas promesas y el nombre de Trump, y que fueron estafados".

Los correos electrónicos gubernamentales, obtenidos a través de una solicitud de registros públicos del comité de acción política democrática American Bridge y proporcionados a la AP, subrayan que los reguladores de Texas pensaban que la Universidad Trump era una estafa que utilizaba el señuelo de obtención fácil de dinero para arrebatar a estudiantes ingenuos de hasta 35,000 dólares en colegiaturas y tutorías.

En su intercambio de junio de 2010 con un abogado representante de Trump, Berlin escribió que las promesas realizadas a novatos inmobiliarios en la campaña comercial de la compañía eran "virtualmente imposibles de lograr". La Universidad Trump además estaba operando en Texas sin una licencia comercial requerida, un deliro menor bajo la ley estatal, señaló.

"En efecto, la Universidad Trump promete enseñar a estos novatos todo lo que necesitan saber para ser un exitoso corredor de bienes raíces residenciales, en tres días", escribió Berlin, agregando que en Texas se requiere 900 horas de instrucción en salón de clases y dos años de experiencia en ventas para convertirse en un corredor de bienes raíces con licencia.

"La capacitación extensa es requerida por una buena razón: para proteger al público", escribió Berlin.

En un comunicado de prensa emitido el martes, Trump defendió los seminarios que llevan su nombre diciendo que proporcionan "una considerable y valiosa educación" y presentó miles de encuestas de una página en las cuales quienes tomaron las clases elogian la experiencia.

Solicitudes realizadas el martes para entrevistar a Berlin fueron rechazadas por la oficina del fiscal general de Texas Ken Paxton, un republicano.

Un mes antes del intercambio con los abogados de Trump en 2010, Berlin había escrito un memo detallado a sus jefes en el que pedía autorización para entablar una demanda contra Trump y sus socios comerciales en la que se solicitaría una compensación superior a los 5,4 millones de dólares en sanciones y la restitución a las víctimas. Señaló a detalle al menos nueve leyes estatales que la Universidad Trump habría violado, incluyendo el cometer "actos falsos o engañosos".

En su lugar, a Berlin se le ordenó desistir. Su superior en ese momento, el exsubdirector de Protección al Consumidor, John Owens, le dijo a AP la semana pasada que el caso fue desechado por "cuestiones políticas".

Abbott rechaza que la política haya tenido que ver. Su portavoz, Matt Hirsch, dijo que el caso fue desechado cuando la compañía de Trump acordó de manera informal dejar de hacer negocios en Texas. Poco después, la Universidad Trump cesó sus operaciones a nivel nacional.

Tres años después, la campaña de Abbott para gobernador pidió y obtuvo donaciones políticas por 35,000 dólares por parte de Trump.

"El gobernador Abbott nunca se ha reunido con Donald Trump, y en la única conversación telefónica que el gobernador tuvo con él —luego de que ingresó a la contienda como gobernador y tres años después de que se forzó la salida de la Universidad Trump de Texas— discutieron los esfuerzos para derrotar a Wendy Davis", comentó Hirsch al referirse a la rival demócrata de Abbott en las elecciones de 2014.



JMRS