Internacional - Finanzas

Lo primero por hacer después del "brexit": llamar a los abogados

2016-06-29

El cambio exigirá revaluar todo tipo de normas y regulaciones, desde las de propiedad...

Vipal Monga y Tatyana Shumski, The Wall Street Journal

La decisión del Reino Unido de abandonar la Unión Europea implica una gran incertidumbre para banqueros e inversionistas pero es una panacea para abogados, contadores y empresas de consultoría, quienes se perfilan como los grandes ganadores del sorpresivo resultado del referendo del jueves pasado en Gran Bretaña, ya que éste requerirá una exhaustiva revisión de tratados, contratos y reglamentos.

El viernes, los teléfonos de la oficina de Davis Polk & Wardwell LLP en Londres no paraban de sonar. Los clientes de la firma con operaciones en la región querían entender las potenciales consecuencias del resultado del referendo del jueves, dijo Thomas Reid, socio gerente de la firma con sede en Nueva York.

“Nos hemos dado cuenta que hay un montón de clientes que quieren entender qué podría cambiar”, dijo Reid.

Desenredar la compleja madeja de la relación entre el Reino Unido y los otros 27 países de la UE será un ejercicio sin precedentes.

El cambio exigirá revaluar todo tipo de normas y regulaciones, desde las de propiedad intelectual y marcas comerciales hasta las regulaciones de la competencia, la protección de datos y las relaciones laborales.

Luego vendrá la reelaboración línea por línea del marco regulatorio para el sector financiero. Las leyes bancarias aplicadas directamente desde Bruselas podrían caducar, lo que requerirá que el parlamento británico debata y redacte nuevas leyes. Las actuales regulaciones financieras del Reino Unido pueden llegar a ser modificadas para eliminar su dependencia de los grupos de control bancario o bursátil de la UE.

La revisión podría llegar a ser tan grande como la que siguió a la aprobación de la Ley Sarbanes-Oxley de 2002, dijo Fiona Czerniawska, co-fundadora de Fuente Global Research. Dicha ley modificó la normativa entonces vigente en materia de contabilidad, gestión empresarial e información financiera y generó decenas de miles de millones de dólares en honorarios de consultoría y cumplimiento.

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Photo: Frank Augstein/Associated Press

Los bancos y las empresas pueden llegar a retorcerse ante la idea de tener que revivir ese enorme dolor de cabeza. Pero para abogados, contadores y consultores, es una promesa de empleo por mucho tiempo.

“A corto plazo, las empresas de servicios profesionales van a ganar una gran cantidad de dinero a través de esto”, dijo Czerniawska.

El Reino Unido ya es el mercado más grande y de mayor crecimiento de Europa en consultoría de servicios, con un alza de 8%, a US$14,000 millones, en 2015, según Source Global Research.

La firma de contabilidad Ernst & Young Global Ltd. cuenta con 14,500 empleados en Gran Bretaña y espera tener que recurrir a otros más de su fuerza laboral global de 250,000 personas para ayudar a hacer frente al impacto.

Las prácticas fiscales se verán también afectadas. El Reino Unido tendrá más oportunidades de usar los impuestos para ayudar a industrias y regiones particulares, dijo Kevin Nicholson, director de impuestos en PwC.

Bufetes de abogados como Clifford Chance LLP, K&L Gates LLP y Dechert LLP han establecido líneas telefónicas de asesoría de 24 horas atendidas por profesionales especializados en distintas áreas para ayudar a sus clientes a entender las implicaciones de los resultados de la votación del jueves. El viernes a la mañana, los correos electrónicos de los clientes inundaban las bandejas de entrada y los seminarios en línea sobre diversos temas que fueron organizados rápidamente por los departamentos de marketing de las firmas.

Dechert tiene un equipo de 30 abogados para atender consultas de clientes sobre regulación, comercio, gobierno y mercados de capitales y fusiones y cuenta con oficinas principales en el Reino Unido, Bélgica, Francia, Alemania y EU

“Es una tarea monumental”, dijo Andrew Hood, director sénior de Dechert, y el ex asesor jurídico de primer ministro David Cameron, quien ya anunció que renunciará al cargo.

La mayoría de la demanda de servicios podría llegar cuando el Reino Unido se siente a renegociar los acuerdos comerciales con la UE y sus agencias, así como una serie de acuerdos comerciales bilaterales focalizados en determinados sectores y países.

Dicho trabajo obligará a los profesionales a dedicar tediosas horas de trabajo a ponderar cientos de reglas relacionadas con todo tipo de asuntos, desde la migración de las abejas productoras de miel a la fabricación de queso y el ancho de los neumáticos para vehículos. El gobierno del Reino Unido no ha llevado a cabo sus propias negociaciones comerciales en décadas. Esto significa que va a necesitar la ayuda de empresas privadas, dijo Clif Burns, abogado especializado en comercio internacional con Bryan Cave LLP.

“No hay duda de que nos estarán contratando más”, dijo Burns. La firma cuenta con 42 abogados en su oficina de Londres.



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