Agropecuaria

Ministro belga insiste en tema de los huevos contaminados

2017-08-09

El escándalo de los huevos contaminados supondrá unas pérdidas de al menos 10...


Bruselas, 9 ago (PL) El ministro belga de agricultura, Denis Ducarme, afirmó hoy que las autoridades holandesas detectaron el insecticida fipronil en huevos en noviembre de 2016, antes de que se destapara el escándalo.

Insistió que ello ocurrió nueve meses del problema surgido por la contaminación en ese alimento.

Dijo que cuando un país como Holanda, uno de los mayores exportadores de huevos del mundo, no transmite este tipo de información, plantea un verdadero problema.

Ducarme expresó estas opiniones este miércoles en una comparecencia ante las comisiones de Sanidad y Agricultura del parlamento belga.

Decenas de millones de huevos fueron retirados de la venta desde la semana pasada en varios países europeos por la extensión de esta crisis que se inició en los Países Bajos.

Ducarme presentó a los miembros de las comisiones el informe sobre el circuito de contaminación entregado el martes por la Agencia Belga para la Seguridad de la Cadena Alimentaria (Afsca).

El informe fue encargado por el gobierno belga, que desea disipar la confusión en torno al origen de la contaminación.

Bélgica fue, el 20 de julio, el primer país de la UE en notificar a la Comisión Europea a través del sistema de alerta implantado para casos de riesgo para la salud de los consumidores por dicha partida de huevos con el insecticida.

La mayor cadena de supermercados alemana Aldi, anunció el 4 de agosto la retirada de sus establecimientos de huevos procedentes de Holanda por contener tóxicos.

Voceros de esa compañía certificaron este viernes que la decisión apareció como reacción al descubrimiento de que esos productos contenían insecticida tóxico fipronil.

Aldi justificó su decisión en su deseo de ofrecer claridad y transparencia a sus clientes.

El escándalo de los huevos contaminados supondrá unas pérdidas de al menos 10 millones de euros para los granjeros holandeses del sector avícola, informó un vocero de la Federación Holandesa de Agricultura y Horticultura (LTO).

Las granjas holandesas afectadas eran clientes de una empresa holandesa que trató las naves con el líquido contra los piojos de las gallinas Dega-16.

Esta sustancia, basada en aceites etéreos, fue mezclada con el insecticida fipronil, que está prohibido para el uso en alimentos.



yoselin