Internacional - Política

La trama rusa atrapa a otro aliado de Donald Trump

2017-11-03

La sombra de la investigación federal de la trama rusa -por la presunta coordinación...

CAROLINA MARTÍN ADALID | El Mundo


La sombra de la investigación federal de la trama rusa -por la presunta coordinación entre el gobierno ruso y el equipo de campaña de Donald Trump para interferir en las elecciones- es casa vez más alargada.

El foco recayó ayer en uno de los copresidentes de la campaña presidencial y candidato a ser el "jefe científico' del Departamento de Agricultura (USDA), Sam Clovis, que retiró su candidatura para el puesto de subsecretario de investigación, educación y economía al que había sido nominado por Trump.

En una carta remitida al presidente ayer, 1 de noviembre, Clovis anunciaba que se retiraba: "El clima político dentro de Washington hace imposible que yo reciba una consideración equilibrada y justa para esa posición". La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, confirmó la renuncia y dijo "respetar la decisión" de Clovis.

La elección de este asesor de la Casa Blanca para el Departamento de Agricultura como 'jefe científico' del USDA había sido cuestionada por varios senadores que no le veían como un buen candidato dada su falta de experiencia y conocimientos científicos. Pero la gota que parece haber terminado de hacer inviable su elección tiene que ver con el 'Rusiagate'

Su abandono se produce después de que saliera a la luz que Clovis había sido interrogado por la oficina del fiscal especial Robert Mueller y que había testificado ante el jurado del 'Rusiagate' hace una semana. El ex asesor de campaña de Trump era además el encargado de supervisar al ex asesor de política exterior, George Papadopoulos, que a principios de semana se declaró culpable de haber metido a la agencia sobre sus contactos con personas de nacionalidad rusa o próximas a miembros del Kremlin.

De haber seguido adelante con la nominación, no hay duda de que los senadores del Comité que supervisan su nombramiento habrían preguntado a Clovis por su relación con Papadopoulos, que desde su detención por el FBI el pasado mes de julio está colaborando activamente con la investigación de Mueller. El presidente Trump se refirió al ex asesor como un "voluntario de bajo nivel" y mentiroso.

El diario 'The Washington Post' informó hace unos meses que Papadopoulos había remitido un email a varios miembros del equipo de campaña, entre ellos Clovis, con el asunto 'encuentro con líderes rusos, incluido Putin. En su respuesta, el entonces copresidente planteó la necesidad de consultar con los aliados de la OTAN antes de hacer ningún plan.

Los ataques, un "deporte"

En su carta de renuncia, Clovis explicó al presidente que no quiere "ser una distracción o una influencia negativa" para el trabajo de la Administración "cuando hay tanto por hacer por los estadounidenses". También criticó "los ataques sin sentido" contra el presidente y su equipo, que parece se han convertido en un deporte que "va a más cada día".

Lo cierto es que las distracciones que tienen como protagonistas a algunos miembros del equipo de Trump durante las elecciones presidenciales están presentes casi a diario. Los abogados del ex jefe de campaña Paul Manafort, que fue imputado el lunes por la Fiscalía de 12 delitos (relacionados con sus negocios en Ucrania por lavado de dinero, falsear cuentas y actuar como agente extranjero sin registrarse), presentaron en el juzgado un documento contra el confinamiento domiciliario decretado por el juez, alegando que no existe riesgo de fuga.

"Dada la cobertura mediática sobre el Sr. Manafort y esta investigación es justo decir que es una de las personas más reconocibles en el planeta. Pregunta: ¿dónde podría tal individuo esconderse?", señalaba la defensa en una nota a pie de página. En el escrito, los abogados sostienen que los 10 millones de dólares de fianza "serán más que suficiente" para asegurar que su defendido no se personará en el juzgado. También piden que se tenga en cuenta los lazos familiares en EU y que sus bienes se encuentran en el país.

Su socio Richard Gates fue acusado de los mismos delitos que Manafort y está bajo arresto domiciliario -con vigilancia electrónica-. En su caso el juez impuso una fianza de cinco millones de dólares. En su primera vista, los dos se declararon no culpables de los delitos que les acusa la Fiscalía.


 



regina

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