Internacional - Política

Los países musulmanes desafían a Trump

2017-12-13

En la cumbre extraordinaria de la Organización de la Cooperación Islámica...

Por Cristoforo Spinella

(ANSA) - ESTAMBUL, 13 DIC - "Reconocemos a Jerusalén Este como capital de Palestina", es la respuesta del mundo musulmán a Donald Trump desde Turquía.
    
En la cumbre extraordinaria de la Organización de la Cooperación Islámica (OIC), los 57 Estados miembro lanzaron un desafío a la Casa Blanca y pidieron al mundo hacer lo mismo.
    
Y si de la Unión Europea, el jueves, en el consejo europeo, se espera una toma de distancia del presidente estadounidense, es la misma Casa Blanca la encargada en responder la "contraofensiva" islámica.
    
Trump "sigue comprometido en la paz, en un plan que beneficie a israelíes y palestinos", afirmó.
    
Más dura fue la respuesta de Israel con el premier Benyamin Netanyahu que destacó que "no me dejo impresionar" de las palabras y los tonos de los palestinos.
    
Pero frente a los líderes de los cuatro continentes en Estambul, el anfitrión Recep Tayyip Erdogan abrió y cerró los coloquios calificando a Israel como "Estado terrorista" que "mata niños", mientras en una mega pantalla se veía la foto de un adolescente palestino vendado y llevado por numerosos militares israelíes.
    
También Trump fue acusado de tener una "mentalidad sionista".
    
Junto al líder turco, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, fustigó a la Casa Blanca por querer "regalar" a Netanyahu la "capital eterna" de Palestina y dijo basta a la mediación de Estados Unidos en el proceso de paz.
    
"No es más neutral", le hizo eco Erdogan, que advierte en la próxima Asamblea General de la ONU la próxima arena de la batalla por Jerusalén.
    
Por su parte, Bruselas también tomó distancia de Trump. Luego de la frialdad con Netanyahu, la cumbre de la UE prepara una declaración en la cual se disociará del salto dado por Washington. En Estambul el frente anti-Trump vivió una jornada de gloria, pero los efectos en terreno de esta "cumbre histórica" -como la definió Erdogan- están pendientes de verificarse.
    
Para el presidente turco, que desde la convocatoria se ubicó en el centro de la escena, hoy se hizo sentir la voz de 1600 millones de musulmanes. "Debemos reconocer el Estado de Palestina con las fronteras de 1967, liberándonos de la idea de que sea un obstáculo a la paz", exhortó el mandatario turco, y afirmó que "al menos 196 países de la ONU son firmemente contrarios" a la decisión de la Casa Blanca.
    
"Jerusalén es nuestra línea roja", reiteró.
   
El documento final, de 23 puntos, condena la declaración "peligrosa", "ilegal" e "ilegítima" de Trump, reafirmando el apoyo a la "solución de los dos Estados".
    
Pero también en esta ocasión, los países islámicos llegaron en una forma dispersa. En Estambul estaban los máximos representantes de Irán y Jordania, mientras Egipto, Marruecos, y sobre todo los Emiratos Arabes Unidos y Arabia Saudita, se limitaron a una delegación ministerial.
    
La voz del Rey Salman, que bendijo "el derecho del pueblo palestino de establecer su Estado independiente con Jerusalén Este como capital", solo se escuchó desde Riad.
    
Una distancia que Hassan Rohani no renunció a destacar.
    
Trump se "atrevió" porque alentado por la voluntad de algunos países de la región de establecer relaciones con Israel, acusó el líder de Teherán, quien auguró "la unidad islámica" contra "el peligro del régimen sionista".
    
Las sospechas se refuerzan sobre la invitación al príncipe hereditario saudita, Mohammed bin Salman, a mediar en la crisis.
    
La declaración de Estambul terminará en la mesa de las diplomacias de todo el mundo.
    
La UE ratifica el apoyo a una solución de dos Estados, y se dice en contra de cualquier decisión que pueda comprometer el cumplimiento de este objetivo.
    
"La cuestión de Jerusalén capital debe ser debatida en el ámbito de la negociación sobre dos Estados", para el ministro de Exterior italiano, Angelino Alfano, que invita a los actores involucrados "a la moderación".
    
Una frenada parcial se produjo en Moscú. "Estamos al corriente de la posición del líder turco y no corresponde a la nuestra", preciso el vocero del presidente Vladimir Putin, disociando al Kremlin de los tonos poco diplomáticos de Erdogan.
    
Sin embargo, solo 48 horas antes había informado al presidente ruso de sus planes, logrando a cambio un sustancial rechazo de la decisión forzada de Trump.


 



regina