Nacional - Seguridad y Justicia

López Obrador enfrenta reclamos por derechos humanos

2018-08-12

Andrés López Obrador, enfrenta una fuerte presión de organizaciones de defensa...

Por Marcos Romero

(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 11 AGO - El futuro presidente de México, Andrés López Obrador, enfrenta una fuerte presión de organizaciones de defensa de los derechos humanos para dar un viraje radical a la política anticrimen y poner fin a los abusos que la estrategia trajo consigo.
    
En diversos foros y por distintas vías, el hombre que tomará las riendas del país el próximo 1 de diciembre, enfrenta reclamos de todo tipo, sobre todo de familiares de las víctimas, para poner fin a los abusos que derivan de más de 11 años de guerra contra el crimen con apoyo de las Fuerzas Armadas.
    
Ayer, Amnistía Internacional señaló que el cambio que México necesita "requiere que el presidente electo y su equipo coloquen la agenda de derechos humanos como prioridad en las decisiones gubernamentales".
    
El organismo, con sede en Londres, presentó una serie de observaciones y preocupaciones sobre la situación de los derechos humanos que se registra en México y formuló diversas recomendaciones para contribuir en los planes y acciones del gobierno que encabezará el politólogo de 64 años.
    
"México y el mundo están a la expectativa de que este nuevo gobierno asuma el reto de acabar con la profunda crisis de derechos que vive el país", señaló la entidad humanitaria, al apremiarlo para revisar "aquellas políticas públicas y leyes que hoy representan una amenaza para los derechos de todas las personas".
    
"A pesar de algunos avances legislativos e institucionales puntuales en los últimos años, subsisten serios obstáculos en relación con cuestiones como el acceso a la justicia, las desapariciones forzadas, los derechos de los pueblos indígenas, la violencia contra periodistas y personas defensoras de derechos humanos", señaló.
    
También se refirió a la persistencia de problemas como "la violencia de género contra mujeres, niñas y personas", a los "abusos sufridos por personas migrantes y refugiadas, la fallida estrategia de seguridad pública, y el uso generalizado de la tortura y otros malos tratos, entre otras". Otros activistas y entidades que defienden las garantías individuales han formulado similares exigencias a López Obrador, quien prometió en su campaña darle la importancia que merece a los derechos humanos.
    
El ganador de los comicios de hace más de un mes propuso organizar 18 foros de pacificación en todo el país para diseñar su política contra el crimen, que comenzaron la semana pasada.
    
El activista y poeta Javier Sicilia pidió al futuro gobierno "no convertir el proceso" de pacificación de México en un "show mediático" y "empezar a trabajar con los mecanismos que ya están construidos para alcanzar la verdad y la justicia".
    
Los foros comenzaron en la norteña Ciudad Juárez, frontera con Estados Unidos y se ha prometido que se invitará a organismos internacionales, defensores de derechos humanos, líderes religiosos y víctimas.
    
Uno de los aspectos que suscita un rechazo en las propuestas de López Obrador en materia de derechos humanos es una "amnistía" a los delincuentes, sobre todo a quienes han sido reclutados de manera forzosa o atraídos por buenas recompensas para actuar como "halcones" (vigilantes) o sicarios por las mafias.
    
"Olvido no, perdón sí", dijo el futuro mandatario en Ciudad Juárez, cuando familiares de desaparecidos le gritaban: "ahora, ahora, se hace indispensable, presentación con vida y castigo a los culpables".
    
Desde que el entonces presidente Felipe Calderón lanzada la cuestionada estrategia anticrimen, han muerto 214,000 personas y sólo el año pasado, considerado el más violento de las últimas décadas, se registraron 31.174 homicidios intencionales.
    
Otro aspecto que López Obrador plantea para poner fin a esta espiral de sangre y muerte y por lo tanto de abusos, que han arrojado más de 30,000 desaparecidos, una parte de ellos forzosos, es decir, cometidos por fuerzas de seguridad del estado, es la legalización de la marihuana y la amapola.
    
La ronda de conversaciones que se extenderán hasta noviembre, buscan "escuchar a todos los ciudadanos, especialistas, dirigentes sociales y elaborar entre todos el plan que garantice la paz, la tranquilidad en nuestro país", dijo López Obrador el lunes pasado al inaugurar los foros de pacificación.



JMRS
Utilidades Para Usted de El Periódico de México