Internacional - Economía
Estados Unidos y China cierran contactos sobre guerra arancelaria
Por JOE McDONALD
BEIJING (AP) — Estados Unidos y China cerraron el miércoles tres días de conversaciones para poner fin a una costosa guerra arancelaria en una atmosfera optimista luego de que el presidente Donald Trump dijo que estaban “yendo muy bien”.
Pese a que por el momento no se han revelado aspectos concretos, pero las bolsas asiáticas subieron luego de que las conversaciones, que iban a durar dos días, se ampliaran a tres. El principal índice de Hong Kong cerró con un alza del 2,1% y Tokio ganó un 1,1%.
Lu Kang, vocero del Ministerio de Exteriores chino, anunció el final de los contactos pero no ofreció más detalles antes del comunicado oficial que se publicará más tarde en el día.
El diálogo fue el primer contacto cara a cara entre las dos partes desde que el 1 de diciembre Trump y su homólogo chino, Xi Jinping, acordaron suspender las acciones punitivas contra sus respectivas importaciones durante 90 días para negociar una solución al enfrentamiento provocado por las quejas de Washington de que Beijing roba o presiona a las empresas que quieren entrar en su mercado para que entreguen su tecnología.
″¡Las conversaciones con China están yendo muy bien!”, escribió Trump en Twitter el martes por la noche.
Washington está presionando a Beijing para que realice cambios como dar marcha atrás en los planes gubernamentales para crear empresas líderes en robótica y otros campos. Europa, Japón y otros socios comerciales se hicieron eco de las quejas de Estados Unidos de que esto viola las obligaciones de libre mercado de China.
Funcionarios chinos sugirieron que Beijing podría alterar sus planes industriales pero rechazaron la presión para abandonar una estrategia que los líderes comunistas ven como una vía hacia la prosperidad y a una mayor influencia global.
Ninguno de los dos bandos ha mostrado indicios de cambios en su postura. Los economistas dicen que 90 días es un plazo muy corto para resolver los asuntos que han marcado las relaciones entre las dos mayores economías del mundo durante años.
“Incluso aunque se alcance un acuerdo, es posible que los halcones comerciales de la Casa Blanca y Trump no firmen”, señaló Vishnu Varathan en un reporte del Banco Mizuho.
China ha intentado reducir la presión para cambios más amplios ofreciendo concesiones comerciales como la compra de más soja, gas natural y otros productos. Esto supondría un alivio para zonas rurales que respaldaron a Trump en las presidenciales de 2016, que fueron el blanco de los aranceles de Beijing.
Sin embargo, el funcionario designado por Trump para encabezar su delegación en las negociaciones, el Representante Comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, se ha centrado en presionar a Beijing para que retire o cambie las normas que según Washington bloquean el acceso al mercado o ayudan de forma deshonesta a las empresas chinas.
Jamileth
Notas Relacionadas
- Biden anuncia que triplicará los aranceles al acero de China para ganarse el voto obrero
- La tensión comercial entre China y la Unión Europea puede causar una guerra comercial, alerta la Cámara Europea
- ¿Por qué empresas alemanas se trasladan de China a Japón?
- China afirma que la politización del comercio es inmoral e insostenible
- Embajador de China en Washington advierte sobre represalias si Estados Unidos restringe más la tecnología