Internacional - Población

Luego de la catastrofe, "el pueblo va a estar más feo, va a haber más violencia"

2019-01-22

Después de dos horas en que la gasolina brotó del tubo como si fuera un...

 

Sputnik | La explosión de un ducto de Pemex que dejó 85 personas fallecidas, 66 heridos y al menos 58 personas desaparecidas sucedió ante la mirada de las Fuerzas Armadas y policiales, que no contuvieron a la gente. Sputnik estuvo allí y te lo cuenta.

La explosión de una toma clandestina de combustible en un ducto de la empresa petrolera mexicana ha causado 85 muertos hasta el momento, según las cifras dadas a 36 horas del suceso por el secretario de Salud, Jorge Alcocer. Otras 66 personas continúan hospitalizadas. 

El sitio donde sucedió todo está en medio de dos caminos que corren hacia el centro del pueblo Tlahuelilpan, a menos de 15 minutos. Es en el Valle del Mezquital, en el corazón de una zona que distribuye combustible para el Bajío, en el centro de Mexico, a 15 kilómetros de la refinería de Tula, de donde partía el ducto.

El paisaje de la devastación comienza tras un campo sembrado de alfalfa, la actividad económica central en este pueblo rural del estado de Hidalgo. La tierra negra y el olor penetrante son el marco en el que trabajan los peritos.

La hora de los hechos fue explicitada por el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, del Partido Revolucionario Institucional (PRI). A las 16:50 del 19 de enero se recibió el aviso de Pemex de "una perforación ilegal en un ducto, al cual nuestras Fuerzas Armadas acudieron inmediatamente. Después de las 17 horas se posicionaron en el lugar para atender el llamado de Pemex", explicó el gobernador en una conferencia de prensa.

"Nuestras autoridades intentaron persuadir a la ciudadanía que estaba congregada, y era mucha, de que se retirara del lugar, intentando acordonarlo. Por la presión del ducto este empieza a soltar hidrocarburo en grandes proporciones y se habla de cientos de ciudadanos que se acercan. Las Fuerzas Armadas intentaron persuadirlos de que corrían peligro pero la gran mayoría no escuchó este llamado", dijo el gobernador.

Después de dos horas en que la gasolina brotó del tubo como si fuera un géiser, levantando un chorro de diez metros de alto y empapando a todas las personas que se acercaron, explotó.

En el pueblo, todo era conmoción. Sputnik recogió el relato de un comerciante que pidió anonimato:

"La mayoría se enteró en las redes sociales o por mensajes de WhatsApp que podían tomar la gasolina que quisieran, y pues, imagínese. Ninguno de nuestros familiares estaba allí, gracias a Dios, pero cuando explotó todos buscaban a los suyos en el lugar".

El comerciante comentó que una fuerte presencia militar llegó desde octubre del año pasado (otra fuente anónima indicó que son 2,800 los soldados destinados a esta zona) pero cree que la situación va a empeorar:

"Yo creo que con esto va a estar más feo el pueblo, va a haber más violencia", sostuvo en un diálogo con Sputnik.

Cuerpos calcinados son inspeccionados por peritos tras la explosión de un ducto de gasolina de Pemex

El cuestionamiento sobre la actuación del Ejército durante la fuga de combustible es una de las aristas de este suceso, dada la coyuntura en que las Fuerzas Armadas asumirán el control de la vida pública en México por medio de la Guardia Nacional.

Al ser consultado sobre la responsabilidad institucional que le cabe al Ejército por no haber detenido la situación que originó la masacre, el presidente Andrés Manuel López Obrador refrendó la actuación del mando militar.

"Yo estoy por la postura que asumió el Ejército. Nosotros no podemos enfrentar estos actos con medidas coercitivas, no podemos reprimir, detener significa en un momento dado desatar alguna represión", afirmó. 

Las familias y la búsqueda

Luis Lomelí, subsecretario de gobernación de Hidalgo, indicó a Sputnik que fueron 25 los soldados enviados al sitio ante la alarma de Pemex y que "no pudieron contener a 500 personas".

Dado el estado carbonizado de los cuerpos, se deberán reconocer mediante exámenes de ADN. Los demás fueron trasladados en camionetas de funerarias privadas a sus instalaciones en Tepeji del Río, donde los peritos estatales practicarán los exámenes periciales que corresponden.

Los funcionarios indicaron a los familiares de las víctimas que para la identificación de los suyos debían hacer una denuncian penal ante el Ministerio Público de Mixquiahuala de Juárez (el siguiente pueblo, a 12 kilómetros al norte) donde se les tomaron muestras de sangre para cotejar con el ADN de los cuerpos fallecidos.

Afuera de las oficinas del Ministerio Público de Mixquiahuala, sobre la calle Independencia, tres mujeres (Blanca, Tania y Sandra) esperan a las familias con una olla de mole y tortillas para prepararles y ofrecerles enchiladas. Vinieron a traer comida a las familias afectadas.

Tania, una de las vecinas solidarias, dijo a Sputnik que nunca habían vivido una explosión así de fuerte, pero que ella se acercó a apoyar porque "sabemos lo que la gente pasa, la pérdida. Comprendemos el dolor de no saber de su familiar, que ellos no tienen la cabeza para pensar en alimentarse y pues, eso les hace daño. Necesitamos ayudarlos, aunque sea poquito. No es mucho ni es la gran cosa, pero es algo".

El fiscal de la República, Alejandro Gertz Manero, informó que la identificación de los restos calcinados corre por cuenta de la justicia estatal a cargo del procurador Raúl Arroyo.

La hipótesis preliminar que presentó el fiscal fue que "el ducto estaba cargado con gasolina de muy alto octanaje, que generó gases de gran letalidad y por tal razón, cuando las personas empiezan a acercarse y moverse de manera multitudinaria en esa zona, la ropa de contenido sintético tiene posibilidad de generar reacciones eléctricas. Eso es un principio de investigación de lo que pudo haber generado la explosión".

López Obrador no ha anunciado cuándo visitará la zona afectada, aunque garantizó que a las familias de las víctimas se les brindará "total apoyo". 



regina
Utilidades Para Usted de El Periódico de México