Migración
Unos 50,000 migrantes serían devueltos por Estados Unidos
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO.- Los acuerdos para conjurar la aplicación de aranceles a las exportaciones aztecas a Estados Unidos obligarían a recibir de vuelta a unos 50,000 migrantes en México, lo que hace temer una crisis humanitaria en la frontera común.
El "salomónico" arreglo entre los dos países desató una controversia política, así como una oleada de críticas de todos los sectores, pero particularmente generó fracturas en el equipo de gobierno del presidente Andrés López Obrador.
El responsable para los Derechos Humanos del ministerio de Gobernación Alejandro Encinas puso números al pacto alcanzado bilateralmente el pasado viernes al cabo de una semana de intensas negociaciones. El canciller Marcelo Ebrard y el vicepresidente de Estados Unidos Mike Pence encabezaron las respectivas delegaciones entre el miércoles y el viernes pasado.
Según los términos de este arreglo, los centroamericanos que sean devueltos a México para esperar una resolución judicial a sus peticiones de asilo aumentarían cinco veces respecto a los más de 10,000 de la actualidad, de acuerdo con Encinas.
La cifra representa un tercio de los 150,000 migrantes que cruzaron por la frontera sur de México hacia Estados Unidos.
El historiador mexicano Héctor Aguilar Camín señaló que estas cifras configuran una "pinza temible" que implica la "contención física en la frontera sur y campamentos de refugiados o devueltos en la frontera norte, todo dentro de territorio mexicano".
"Imposible saber la cantidad de violencia y sufrimiento que la pinza provocará. No tenemos antecedentes. No lo hemos visto nunca", advirtió.
La decisión de López Obrador de confiar al canciller Marcelo Ebrard, a quien muchos observan como su "delfín", el rol protagónico las negociaciones con la administración Trump desató recelos y cuestionamientos por relegar al ministerio de Gobernación y la autoridad migratoria que depende de la cartera.
Las divisiones se hicieron patentes durante una sesión de la Comisión Permanente del Congreso, que delibera en períodos de receso del parlamento, celebrado ayer, en la cual líderes del oficialismo intercambiaron críticas.
Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Cámara de Diputados, acusó a Ebrard de "invadir facultades de Gobernación en el tema migratorio" y de violar las leyes internas para satisfacer una demanda de Estados Unidos. "Gobernación ha sido privada ilegalmente de sus funciones", afirmó Muñoz Ledo, un veterano político aliado de López Obrador.
Muñoz Ledo cuestionó duramente los acuerdos con Washington para sellar la frontera sur con la Guardia Nacional, luego que México aceptó enviar 6,000 miembros de este cuerpo integrado sobre todo por militares para tender una barrera al arribo en avalancha de personas indocumentadas.
"Para mí el problema más grave que enfrentamos es la pérdida de soberanía: nos quieren convertir en un país enjaulado, si queda la condición de Tercer País Seguro. Los que entren aquí ya no pueden salir. Es la parálisis. Ayer salieron los agentes de la Guardia Nacional a poner nuestro muro", señaló.
Daniella Burgi, del Latin America Working Group, pronosticó "una crisis humanitaria". Hasta ahora, se sabe que del 29 de enero al 5 de junio, Estados Unidos envió a México a 10.393 centroamericanos solicitantes de asilo, dentro del programa "Quédate en México", que se expandirá hasta acercarse a un modelo de "Tercer País Seguro" si fracasa el actual sistema.
Desde todos los ángulos del espectro político y social brotaron críticas ante los compromisos adquiridos con Trump para frenar los aranceles, que debían entrar en vigencia el pasado día 10 y aumentar paulatinamente durante 5 meses hasta llegar a 25% en octubre próximo. Analistas políticos y activistas recordaron que la estancia de centroamericanos en espera de una solución a sus demandas de asilo "no será de días ni de semanas" por cuanto el sistema de tribunales de migración estadounidense "está cerca de colapsar", sino de meses y aún años.
El líder del Senado Ricardo Monreal llamó a atenuar el triunfalismo por cuanto "no hay ninguna garantía" de que el magnate no volverá a esgrimir la amenaza de los aranceles.
Jamileth
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