Del Dicho al Hecho

¿Renuncia o denuncia?

2019-07-15

Tuvieron que pasar sólo 45 días entre la renuncia del secretario de Hacienda y la...

Kenia López Rabadán | Revista Siempre

Evidentemente después de leer la carta de renuncia, o más bien denuncia, del Doctor Carlos Urzúa, ex titular de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, hay muchas cosas que nos tiene que preocupar como mexicanos.

Tuvieron que pasar sólo 45 días entre la renuncia del secretario de Hacienda y la renuncia anterior, es increíble el resquebrajamiento que se está teniendo en este gobierno federal.

Recordamos cómo renunció la secretaria de Medio Ambiente, detuvo un avión, se hizo público y renunció al otro día; el reciente caso es todavía peor pues el motivo es decisiones sin sustento, extremistas y politizadas, imposiciones, desconocimiento, influyentísimo y conflicto de intereses ¿así o más claro? La 4T debe recapacitar.

Es lamentable y lacerante para el Estado de derecho en México, para la certeza jurídica, para las instituciones en nuestro país, lo que dice la denuncia del Dr. Urzúa “discrepancias en materia económica hubo muchas”, “se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento”, a esta última, desde el Senado de la República hemos hecho hincapié.

Con el desmantelamiento indiscriminado de instituciones como la Policía Federal, agencias como Notimex, programas como el de Estancias Infantiles, servicios como el de salud o el que ofrece la CONAFOR, las consecuencias de las malas decisiones están siendo graves y en algunos casos serán irreversibles.

No hay sustento, no hay un análisis, no hay claridad en el procedimiento, no hay un objetivo concreto.

Ahora no lo dice el PAN, no, ahora no lo dice la oposición, lo dijo el secretario de Hacienda: “extremismos, sean de derecha o de izquierda”, es evidente, están pensando ideológicamente, no están pensando en hacer políticas públicas que beneficien a las mujeres y a los hombres de este país, están pensando de manera dogmática.

“imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la hacienda pública”, lo hemos reclamado en las comparecencias de diversas propuestas del Gobierno federal, no tienen el perfil, no tienen la experiencia, no tienen el expertise que se necesita para llevar a cabo su función.

“Por personas influyentes”, los que ahora conforman la Cuarta Transformación, cuánto criticaban cuando eran oposición acerca del influyentismo, empezaban las sesiones de Congreso criticando a los gobiernos pasados, ahora su propio secretario de Hacienda los acusa de esta mala práctica política.

Por último, dice el ahora ex secretario de Hacienda: “hay conflicto de interés”, evidentemente, nosotros no lo podemos permitir, y cuando digo nosotros me refiero a los mexicanos, incluyo también a los integrantes de Morena, incluyo también a los buenos servidores públicos que hay en este país, no lo podemos permitir; de inicio porque hay la posibilidad de que esas conductas encuadren distintos delitos como el ejercicio ilícito del servicio público, abuso de autoridad, ejercicio abusivo de funciones e incluso tráfico de influencias.

Por supuesto que no es deseable que este tipo de cosas sucedan, pero lamentablemente el gobierno federal se ha envuelto en un circulo interminable de malas decisiones que aumentan conforme avanza el sexenio. Reitero que el Presidente debe rectificar, al final los afectados son las y los ciudadanos.


 



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