Internacional - Finanzas

Mercados de Argentina, inquietos tras regreso del peronismo al poder

2019-10-28

Pese a ser considerado un político moderado, el arribo de Fernández a la presidencia...

Por Nicolás Misculin y Cassandra Garrison

BUENOS AIRES, (Reuters) - Los mercados financieros de Argentina operaban erráticos el lunes tras la victoria de la centroizquierda peronista en los comicios generales del domingo, alimentados por un cóctel mixto de esperanzas de una transición ordenada pero también de incertidumbre sobre las futuras políticas del nuevo gobierno.

Luego de proclamarse presidente en la primera vuelta electoral, el opositor Alberto Fernández se reunió el lunes con el mandatario saliente Mauricio Macri, el preferido por los mercados, en busca de un diálogo que permita reducir los efectos de una severa crisis económica.

El peso argentino se apreciaba un 1,08%, a 59,25/59,35 por dólar, mientras que en la plaza informal se depreciaba un 0,66% a 74,00/76,00 unidades.

La bolsa de comercio pasaba a perder un 2,64%, tras registrar un alza del 6,53% tras la apertura. Los bonos soberanos de Argentina caían un 1,2% promedio, en línea al alza de 99 unidades del riesgo país a 2.245 puntos básicos.

Fernández obtuvo el domingo el 48,10% de los sufragios frente al 40,37% del presidente neoliberal Mauricio Macri, una diferencia menor a la prevista que llevó alguna tranquilidad a los inversores, que esperan que haya una oposición fuerte tras el cambio de Gobierno en diciembre.

“El llamado y la aceptación a un desayuno entre Macri y Fernández para esta mañana, creemos que es un buen comienzo para la transición”, dijo Lucas Gardiner, analista de Portfolio Personal Inversiones. “Esto será un día a día por los poco más de 40 días que nos restan al 10 de diciembre”.

Pese a ser considerado un político moderado, el arribo de Fernández a la presidencia es visto con preocupación por los mercados financieros, que temen amplias regulaciones de la economía como las que aplicó su compañera de fórmula, la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner.

Pero Alberto Fernández, sin mayoría en la Cámara de Diputados, se verá obligado a negociar sus políticas.

“El próximo Gobierno peronista va a estar muy condicionado, con una oposición que queda fortalecida (...) No es una victoria contundente de Alberto” Fernández, dijo el economista Ariel Coremberg, de la Universidad de Buenos Aires.

Al margen de la notoria recesión de la economía, la incertidumbre política generó en las últimas semanas una fuerte caída de reservas del banco central (BCRA), que las usó mayormente para evitar el derrumbe del peso local.

La reactivación de la economía, el combate a la pobreza y la renegociación de un acuerdo por 57,000 millones de dólares firmado el año pasado -cuando despuntaba la crisis- con el Fondo Monetario Internacional (FMI) serán las prioridades en las que tendrá que enfocarse Fernández cuando asuma el poder en diciembre.

El mandatario electo, que logró aunar al peronismo para las elecciones, fue jefe de Gabinete en parte de las gestiones del expresidente Néstor Kirchner (2003-2007) y de su compañera de lista (2007-2015).

CRISIS CAMBIARIA

Para evitar perder más reservas internacionales intentando que el peso no siga cayendo, el BCRA decidió en la madrugada del lunes limitar a solo 200 dólares por persona la compra de divisas desde el límite de 10,000 dólares previo.

Aunque el peso se apreciaba en la plaza formal, la decisión impulsó las compras de dólares en el mercado negro, lo que podría alimentar una inflación que ya supera el 50% anual.

En una conferencia de prensa ofrecida el lunes, el presidente del BCRA, Guido Sandleris, dijo que la restricción cambiaria dispuesta apunta a preservar las reservas de la entidad hasta la asunción del nuevo Gobierno.

“Es crucial dar tranquilidad a la economía”, sostuvo el funcionario, y añadió que “buscamos proteger las reservas”.

El salto que dieron la inflación, el desempleo y la pobreza fueron el talón de Aquiles de Macri y de su alianza de centroderecha Juntos por el Cambio, que igualmente conserva un núcleo duro de votantes que ven en él a un impulsor de la transparencia y de las obras públicas.

Fernández es proclive a una mayor intervención estatal para impulsar el mercado doméstico y hacer crecer la actividad, actualmente en contracción. El candidato peronista suele defender la gestión de Kirchner, durante la que la economía creció robustamente con superávit fiscal y reducción de la pobreza.

El peronismo -que ganó también la elección en la provincia clave de Buenos Aires- va a tener mayoría en el Senado, pero no en la Cámara de Diputados.



Jamileth