Nacional - Seguridad y Justicia

Los 10 meses más sangrientos en México

2019-11-22

El mandatario pidió "tiempo" a los ciudadanos para observar una caída en...

(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 21 NOV - México registró entre enero y octubre los 10 meses más sangrientos desde que se tiene memoria, pero el presidente Andrés López Obrador insistió hoy en que el flagelo de la violencia que castiga al país se estabilizó.
    
El mandatario pidió "tiempo" a los ciudadanos para observar una caída en los asesinatos.
    
En este sombrío período bajo el nuevo gobierno izquierdista que está por cumplir un año en el poder, se registraron 29.574 homicidios, según el informe del secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Solo en octubre fueron asesinadas 94 personas cada día, lo que hace un promedio de 4 cada hora, de acuerdo con el reporte.
    
Si se mantienen los mismos niveles de violencia durante el último bimestre, 2019 pasará a la historia como el más violento desde que se tiene registro, con unos 34,400 homicidios intencionales.
    
"Nuestra casa (está) ensangrentada", señaló el poeta y activista anticrimen Javier Sicilia en una carta enviada del presidente López Obrador, quien ha hecho de la frase "abrazos, no balazos" su mantra en materia de lucha contra el crimen.
    
"El país está en llamas. A fuerza de reducir la erradicación de la violencia a abrazos y no balazos, la consecuencia de los abrazos es la misma que la de las balas: sufrimiento, indefensión y muerte", afirmó Sicilia.


    
El escritor criticó el "puñado de programas sociales destejidos de una verdadera y profunda política de Estado en materia de justicia de transición" que López Obrador ha impulsado. El activista encabezó en 2011 encabezó un "Movimiento por la paz con justicia y dignidad", que permitió crear una Ley de Víctimas.
    
Sin embargo, López Obrador señaló hoy en conferencia de prensa que el gobierno, pese a este fatídico informe, logró un "punto de inflexión" para "estabilizar" la espiral de violencia en particular en el caso del homicidio.
    
"Nosotros estamos actuando, puedo decir que ya logramos estabilizar el crecimiento desmesurado, progresivo de violencia, sobre todo de homicidios, porque iba creciendo cada vez más", afirmó. Sin embargo, las cifras parecen desmentir esta "estabilidad" de la que presumió también hace poco el ministro de Seguridad Pública, Alfonso Durazo.
    
En los 13 años que lleva la fracasada estrategia contra el crimen lanzada temerariamente por el entonces presidente Felipe Calderón en 2006, con sustento sobre todo en las Fuerzas Armadas, la contabilidad de muertes alcanza las 270,000 y la cifra de desaparecidos ha trepado hasta superar los 40,000.
    
López Obrador prometió durante su campaña electoral frenar la violencia, regresar a los militares "a sus cuarteles" y devolver la paz al país, pero estos compromisos no han podido hasta ahora cumplirse y los expertos y ciudadanos observan con pesimismo que logre hacerlo al menos en el corto plazo.
    
Apenas en las últimas semanas se han registrado diversas masacres que sacudieron al país como el asesinato durante una emboscada de 13 policías en la localidad de Aguililla, estado sureño de Michoacán, el pasado 15 de octubre. No habían pasado ni 24 horas cuando 14 integrantes de un grupo armado y un oficial del Ejército resultaron muertos en otro enfrentamiento en Tepochica, una comunidad cercana a la ciudad de Iguala, estado meridional de Guerrero.
    
El 17 de octubre, una fallida operación del Ejército para detener a Ovidio Guzmán, de 28 años, hijo del famoso "rey de las drogas", Joaquín "El Chapo" Guzmán, condenado a varias cadenas perpetuas en junio pasado por un tribunal de Nueva York, arrojó la muerte de 14 personas.
    
Para coronar esta retahíla de asesinatos, el 4 de noviembre, hombres armados victimaron con armas de alto poder a 9 personas (tres mujeres y 6 niños) de la comunidad mormona mexicano-estadounidense en una localidad de la frontera norte de México, entre los estados de Chihuahua y Sonora.
    
En los días siguientes, la situación siguió igual a pesar de que no ha habido sucesos que hayan alcanzado impacto mediático.
    
Por ejemplo, en una finca de Tlajomulco, estado occidental de Jalisco, la policía encontró 52 bolsas de plástico negro con restos humanos, que corresponden a 25 personas descuartizadas.
    
En lo que va del mes, al menos 30 personas fueron asesinadas en Ciudad Juárez, estado de Chihuahua, en los confines con Estados Unidos, donde se contabilizan 1,300 homicidios en lo que va del año. (


 



regina