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Esperanza y preocupación ante las señales de regreso del fútbol

2020-04-24

Manuel Neuer del Bayern Muninch durante un entrenamiento a pesar de que la mayoría de los...

Por Brian Homewood | Reuters

BERNA, 24 abr (Reuters) - El fútbol está despertando de nuevo en el escenario de la pandemia de COVID-19, pero la sensación de esperanza en los equipos que han empezado a entrenar se mezcla con la preocupación por si quizá sea demasiado pronto y la incertidumbre de cómo mantener a los jugadores protegidos.

Muchas ligas europeas, suspendidas desde mediados de marzo, confían en volver a empezar en los próximos dos o tres meses, sin espectadores, y los entrenamientos han comenzado en Alemania y Austria. Sin embargo, la vuelta a los terrenos está plagada de dificultades.

“Hay una enorme cuestión logística y médico-científica sobre las pruebas y los protocolos, pero también social”, dijo Jonas Baer-Hoffmann, secretario general del sindicato mundial de jugadores FIFPRO.

“Necesitamos orientación y protocolos sobre cómo volver de forma sana y segura. El fútbol es un deporte de contacto y creemos que se requieren estándares de protección muy altos”.

También hay una cuestión moral. “¿Estamos enviando el mensaje correcto a la sociedad, y estamos fomentando un retorno sano a la vida normal, o estamos enviando una mala señal de que el fútbol tiene reglas diferentes al resto del mundo?”, añadió.

Por otra parte, la Liga Suiza de Fútbol dijo que una reanudación exitosa, bajo una supervisión científica que permita una estricta gestión de los riesgos, podría permitir que el fútbol “enviara una señal de que es posible volver a algo más cercano a la normalidad”.

Varias ligas de todo el mundo han elaborado un protocolo médico para los entrenamientos, en su mayor parte de forma similar.

Estas directrices generalmente contemplan la realización de pruebas exhaustivas a los jugadores para asegurarse de que no están infectados y la división de las plantillas en grupos de seis, observando las pautas de distanciamiento social.

Sin embargo, muchos detalles para la reanudación de las competiciones, tales como si los equipos tendrían que ser aislados hasta que la liga termine y lo que sucedería si un jugador da positivo, siguen sin estar claros.

Como dijo el martes Christoph Freund, director deportivo del Salzburgo, campeón de Austria: “No puede ser que si un jugador, o un acompañante o un entrenador, contrae el virus, toda la jornada tenga que parar, o que la actividad se detenga de nuevo durante dos o tres semanas”, dijo.

La Bundesliga alemana puede ser el conejillo de indias, ya que es la que más se acerca a la reanudación de las grandes ligas. Al igual que otras competiciones, solo puede empezar con la luz verde del Gobierno.

El jueves, la Bundesliga dijo que los jugadores serán observados por un responsable de salud del equipo y que se les harán pruebas regularmente.

La infección de un jugador será comunicada a las autoridades, que se encargarán de cualquier otra medida. El equipo, sin embargo, no quedaría automáticamente en cuarentena.

PREGUNTAS IMPORTANTES

Geoff Dreher, profesor adjunto de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, dijo que no tenía mucho sentido volver a empezar si un solo caso provocaba que toda una liga se detuviera de nuevo, y había otras cuestiones que resolver.

“Si alguien enferma en el equipo local, ¿qué se hace?”, le dijo a Reuters. “Si está en el equipo visitante y tienen que viajar, ¿cómo reaccionan y regresan a su lugar de origen?”.

“¿Están contentos con la posible cuarentena, con estar aislados de amigos, de la familia... durante un largo período de tiempo? Esa es una pregunta importante”, añadió.

“Si uno de mis compañeros de equipo ha contraído el virus, ¿puedo seguir jugando sin problema? Hace falta la aportación de mucha gente y creo que la razón por la que no tenemos muchas ideas al respecto es porque la gente está (todavía) intentando responder a estas preguntas”.

También está la cuestión de si hay suficiente plantilla y recursos para tratar a jugadores enfermos y lesionados, un riesgo natural en el fútbol.

Carl Bergstrom, profesor de biología de la Universidad de Washington, dijo que una posibilidad es una estrategia de “burbuja” en la que los jugadores y el personal estén aislados durante la temporada.

“Aun así, la logística de esta medida sería difícil”, dijo a Reuters. “La comida tiene que venir de alguna parte. La atención médica tiene que venir de alguna parte. Cualquier contacto con el mundo exterior conlleva un riesgo de infección”.

Una alternativa sería tener un “aislamiento débil” del mundo exterior y depender de pruebas diarias durante la temporada.

“Esto podría funcionar si se puede alcanzar la capacidad de hacer todos esos tests, y si los individuos infectados dan positivo antes o alrededor del mismo momento en que se contagian. Si puede haber contagios mientras las pruebas son negativas, esta estrategia no funcionaría”, dijo.

Bergstrom añadió que las ligas tendrían que invertir en pruebas en la medida en que hubiera un exceso de capacidad en las comunidades locales, incluidos los hospitales.

“De lo contrario, se corre el riesgo de sufrir un desastre de relaciones públicas al quitar las pruebas a aquellos que las necesitan con más urgencia”, dijo.

Más de 2,64 millones de personas se han infectado con el nuevo coronavirus en todo el mundo y 184.910 han muerto.



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