Internacional - Seguridad y Justicia

Venezuela dice que frustra intento de ataque marítimo

2020-05-04

El ministro de Interior, mayor general Néstor Reverol, aseguró que el incidente se...

Por JORGE RUEDA

CARACAS (AP) — Venezuela aseguró el domingo haber frustrado un intento de invasión marítima por parte de hombres armados procedentes de Colombia, en la que murieron varios de los atacantes y otros fueron detenidos.

El ministro de Interior, mayor general Néstor Reverol, aseguró que el incidente se produjo la madrugada del domingo frente a las costas del estado La Guaira, a unos 20 kilómetros al norte de Caracas. Reverol no presentó fotos, vídeos o alguna otra evidencia de lo sucedido.

El “grupo de mercenarios terroristas procedentes de Colombia” pretendió realizar “una invasión por vía marítima” en lanchas rápidas y fueron repelidos por agentes de la fuerza armada y la Policía Nacional , aseveró el ministro en una declaración difundida por la televisión estatal. No está claro quiénes fueron los atacantes.

Los supuestos mercenarios fueron “abatidos unos y detenidos otros”, acotó Reverol, sin dar otros detalles.

Según el ministro, la incursión tenía el propósito de cometer “actos terroristas en el país, asesinato a líderes del gobierno revolucionario, incrementar la espiral de violencia, generar caos y confusión en la población como parte de un nuevo intento de golpe de Estado” para separar al presidente Nicolás Maduro del poder.

La operación de rastreo “minucioso por tierra, mar y aire” continúa por lo que no se descartan otras detenciones en las próximas horas, agregó el alto funcionario.

Colombia, en un comunicado emitido por la cancillería, se desvinculó de los hechos e hizo un llamado a la comunidad internacional para rechazar las acusaciones de una supuesta invasión “en un punto ubicado a más de 490 kilómetros del punto de costa más cercana de Colombia. Se trata de una acusación infundada, que intenta comprometer al Gobierno de Colombia en una trama especulativa”.

Además, la cancillería colombiana señaló que el supuesto incidente fue un intento “por desviar la atención respecto de los verdaderos problemas que vive el pueblo de Venezuela, mediante la acostumbrada estrategia de ese régimen ilegítimo de buscar debates y distractores externos en momentos de crisis interna”.

El ministro de Defensa, general en Jefe Vladimir Padrino López, acompañado de varios jefes castrenses, condenó el ataque y anunció en una declaración televisada el reforzamiento de la presencia militar en la frontera. También dijo que las fuerzas armadas están en alerta con el objetivo de neutralizar cualquier nueva incursión armada.

En tanto, la vicepresidenta Delcy Rodríguez indicó que, producto de las investigaciones iniciales, sostuvo una conversación con el embajador de los Países Bajos en Caracas para “alertarlo sobre el uso del territorio de la isla caribeña de Aruba para prestar apoyo logístico y de abastecimiento a estos grupos mercenarios”.

Horas antes, el poderoso líder del partido socialista y aliado de Maduro, Diosdado Cabello, confirmó la muerte de al menos ocho de los atacantes, uno de ellos un desertor de las fuerzas armadas venezolanas, apodado “Pantera”.

Cabello destacó que podrían ser más los fallecidos dado que los abatidos cayeron justo en el momento que “llegaron a la costa” del balneario de Macuto en La Guaira, donde “hubo un enfrentamiento, hubo disparos”.

En declaraciones a la televisión estatal, Cabello afirmó que no hay duda que se trata de “un plan orquestado por Estados Unidos”, resaltando que uno de los detenidos “es un narcotraficante, que admitió que era un supuesto “agente de la DEA. Los atacantes portaban uniformes y les incautaron un importante lote de “armas de alto calibre, teléfonos satelitales, entre otros equipos y documentos.

Cabello vinculó a los atacantes con Cliver Alcalá, un general de división retirado del Ejército de su país, señalado de ser el cabecilla de los desertores militares venezolanos.

Alcalá, sancionado por Estados Unidos en 2011 por presuntamente suministrar misiles tierra-aire a las guerrillas de las FARC en Colombia a cambio de cocaína, fue acusado en marzo —junto con Maduro— de ser uno de los capos de una conspiración “narcoterrorista” que presuntamente enviaba 250 toneladas de cocaína a Estados Unidos cada año.

Actualmente Alcalá está bajo custodia federal en Nueva York a la espera de un juicio, luego de entregarse en Colombia, donde vivía desde 2018.

“Vamos a enfrentar con todos los instrumentos que nos garantiza la Constitución” y “el uso de la fuerza donde sea necesario para preservar el orden interno. Y quienes así lo asuman de atacar la institucionalidad de Venezuela tendrán que asumir también las consecuencias”, añadió Cabello.

Previamente, Cabello en una declaración que circula en redes sociales llamó a los residentes de todo el país, incluidos pescadores a lo largo de la línea costera de unos 2,800 kilómetros, a reportar de inmediato cualquier actividad sospechosa que vean.

“Ha sido neutralizado un nuevo intento de la derecha y el imperialismo norteamericano”, pero “es necesario que nos activemos todos”, manifestó Cabello. “Hemos logrado darles un gran golpe, pero necesitamos seguir golpeándolos para que más nunca se les ocurra intentarlo” de nuevo, insistió.

Casi 60 países, entre ellos Estados Unidos y Colombia, reconocen al líder opositor Juan Guaidó como presidente legítimo. Guaidó como presidente de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, se autoproclamó mandatario interino en 2019 por considerar que la reelección de Maduro en 2018 fue fraudulenta.

Maduro repetidamente acusa al gobierno del presidente colombiano Iván Duque de ser parte de un complot en su contra y albergar en su territorio a mercenarios y campamentos donde entrenan para “agredir” a Venezuela.

Estados Unidos, por su parte, lidera una campaña para expulsar a Maduro, acusándolo de narcotraficante y ofreciendo una recompensa de 15 millones de dólares por su arresto. Estados Unidos también aumentó las severas sanciones, enfocadas en buena medida en el sector petrolero venezolano para ahogar financieramente a Maduro. Las exportaciones de petróleo son la principal fuente de ingresos de divisas en Venezuela.

Estados Unidos y Colombia repetidamente han negado las anteriores acusaciones del gobierno venezolano sobre su supuesto respaldo a militares que serían parte de un complot para derrocar al gobierno socialista.

Iván Simonovis, comisionado especial de Seguridad e Inteligencia de Guaidó, acusó en la jornada al gobierno de Maduro de montar “un falso positivo” luego que presuntamente “ejecutó extraoficialmente a oficiales del ejército, verdaderos patriotas que trabajan por restituir el orden judicial” en el país sudamericano.

Simonovis, quien permaneció en prisión durante casi 15 años y que se trasladó a Estados Unidos luego de escapar el año pasado, agregó que es un hecho el “descontento” en la Fuerza Armada y las organizaciones policiales por la crisis en Venezuela.

Guaidó, en tanto, manifestó en Twitter que Venezuela tiene claro que “hay militares patriotas dispuestos a luchar por Venezuela, pero es evidente que lo ocurrido” en la Guaira es “una olla (una noticia falsa) de la dictadura”

El líder opositor señaló que el gobierno de Maduro “mientras ignora la masacre de Guanare” __ciudad donde ocurrió el viernes un motín carcelario que dejó al menos 40 fallecidos y más de 50 heridos” y un reciente “enfrentamiento” entre bandas por el control de una barriada del este de Caracas__ “pasa lo de Macuto. Buscan confundir y sembrar evidencias” contra adversarios políticos.

El gobierno de Maduro ha enfrentado a varias amenazas militares en pequeña escala, incluido un intento de asesinar a Maduro con drones y el llamado de Guaidó para un levantamiento militar, que apenas contó con el apoyo de un puñado de elementos.

La Associated Press informó el viernes de un aparentemente mal financiado intento por conformar una fuerza de invasión de 300 hombres en Colombia, que involucraba a un ex oficial militar venezolano y un ex Boina Verde. La operación sufrió un enorme revés en marzo, cuando se arrestó a uno de sus principales organizadores , se decomisó el alijo de armas, y se provocó la huida de algunos de los participantes.

Jordan Goudreau, ex Boina Verde, dijo en un vídeo publicado el domingo en Twitter desde un lugar no revelado que las fuerzas habían ingresado a Venezuela desde otros puntos y estaban “en el interior de Caracas”. No se atribuyó el mérito de la supuesta invasión a la playa antes del amanecer, pero dijo que “nuestras unidades han sido activadas”, aunque no aparecieron otras señales de disturbios durante todo el día.

El capitán retirado de la Guardia Nacional de Venezuela, Javier Nieto Quintero, apareció en el vídeo con Goudreau, instando a los miembros de las fuerzas armadas a ayudar a liberar a la nación en una acción que llamó “Operación Gedeón”.

Venezuela está sumida en una severa crisis política y económica caracterizada por una hiperinflación y una profunda contracción del Producto Interno Bruto que ha obligado a casi cinco millones de personas a irse del país en los últimos años. El Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas, estima que uno de cada tres venezolanos o 9,3 millones, tiene dificultades para poner sobre la mesa suficientes nutrientes .



Jamileth