Salud
Los casos de coronavirus en Pekín caerán "en picado" esta semana, según un experto chino
PEKÍN, (Reuters) - Los nuevos casos del brote de coronavirus de Pekín caerán “en picado” a finales de esta semana ante las medidas adoptadas para controlar la propagación en la capital china, según dijo un experto de la autoridad nacional de salud.
La ciudad de más de 20 millones de habitantes informó el 11 de junio de su primer caso relacionado con un mercado mayorista de alimentos en el suroeste de Pekín en el reciente rebrote. Hasta ahora, 236 personas se ha contagiado, en lo que ha sido el peor foco en Pekín desde que se identificara el COVID-19 en un mercado de Wuhan a finales del año pasado.
Pekín comunicó el lunes nueve nuevos casos para el 21 de junio, lo que supone una importante caída respecto a los 22 del día anterior.
“Si controlas la fuente, y cortas la cadena de transmisión, el número sufrirá una caída en picado”, dijo Wu Hao, experto en control de enfermedades de la Comisión Nacional de Salud, a la televisión estatal en una entrevista emitida el domingo por la noche.
Millones de personas de Pekín han visto su vida diaria alterada por el resurgimiento de la enfermedad en los últimos 11 días, y algunos temen que la ciudad se dirija hacia un confinamiento.
Sin embargo, según Wu, Pekín no se encamina hacia un confinamiento generalizado, a diferencia de las medidas adoptadas en Wuhan cuando se sabía poco sobre el virus. Wu dijo que los procedimientos de confinamiento han sido más específicos esta vez.
Para controlar la propagación del virus, Pekín ha designado hasta ahora cuatro barrios como de alto riesgo y 37 como de riesgo medio.
En los barrios de riesgo medio, la gente puede salir y entrar, con controles de temperatura y registro, pero los bloques de apartamentos con dos casos confirmados o más están totalmente cerrados. En los barrios de alto riesgo, se cierra todo un complejo residencial si hay una sola infección en la comunidad.
Para identificar a los portadores, Pekín ha estado realizando pruebas entre personas de grupos de mayor riesgo, como los trabajadores de restaurantes y los mensajeros de alimentos y paquetería. También se han hecho pruebas a los residentes de algunos barrios de bajo riesgo. Hasta el 20 de junio, se han hecho test a alrededor de 2,3 millones de personas.
“Tenemos que vivir con el virus a largo plazo antes de que haya una vacuna disponible”, dijo Bill Yuan, 28, informático.
“Puede que haya unas cuantas infecciones nuevas todo el tiempo. Si hay un brote, tenemos que estar alerta durante un tiempo y poner en cuarentena (a los pacientes). Y luego volver al trabajo cuando se haya acabado el brote”.
Jamileth
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