Internacional - Política

‘Es realmente irresponsable’: encuentran miles de votos sin contar en Puerto Rico

2020-11-12

El descubrimiento de las boletas no contadas podría tener efectos radicales en los comicios...

Por Frances Robles | The New York Times

Casi 200 cajas de votos no contados han aparecido en Puerto Rico, una semana después de que los votantes acudieran a las urnas para elegir a su gobernador, legisladores y alcaldes en toda la isla, lo que generó más desconfianza en el gobierno.

El descubrimiento de las boletas no contadas podría tener efectos radicales en los comicios más competidos de la isla, en particular la reñida contienda por la alcaldía de San Juan, donde la afluencia repentina de nuevos votos podría forzar un recuento. Los funcionarios reconocieron que esas boletas podrían cambiar los resultados de carreras particularmente cerradas que ya habían sido certificadas. En la ciudad de Culebra, la contienda por la alcaldía tiene un margen de apenas dos votos; en Guánica, nueve.

El embrollo electoral, que se produjo tres meses después de unas primarias desastrosas en las que la gente esperó durante horas bajo un calor sofocante para recibir boletas que nunca llegaron, socavó aún más la credibilidad del proceso electoral y subrayó la profunda desconfianza que muchos residentes sienten por el gobierno.

“La tragedia no es tanto lo que pase al final, sino que después de una primaria fallida y este proceso actual no creo que nadie en Puerto Rico pueda decir que confía en el sistema”, dijo William Ramírez, el director ejecutivo de la Unión Americana de Libertades Civiles en Puerto Rico, quien presentó una demanda para que se permitieran más boletas ausentes. “Tuvimos una gran participación de jóvenes que votaron por primera vez, y esta fue su experiencia”.

La elección se produjo después del cambio sísmico sucedido en la escena política local cuando las personas, cansadas de los escándalos de corrupción que ya llevaban varios años, salieron a las calles para forzar la renuncia del gobernador Ricardo A. Rosselló. En 2019 se filtraron mensajes de texto en los que Rosselló y sus colaboradores se burlaban de las personas gay, las mujeres e incluso de los fallecidos por el huracán.

Los resultados electorales de la semana pasada en Puerto Rico ya eran históricos.

Durante años, la política puertorriqueña ha estado controlada principalmente por dos partidos rivales que, en gran medida, se enfocan en el tema de si la isla debería convertirse en el estado número 51 de Estados Unidos o seguir siendo un Estado Libre Asociado.

Si bien Pedro R. Pierluisi, un miembro tradicional del Partido Nuevo Progresista, el movimiento político de Rosselló que está a favor de la estadidad, ganó la contienda por la gobernación la semana pasada, representantes independientes que no militan en los partidos tradicionales tuvieron un desempeño admirable en las urnas.

Los resultados sugieren que los votantes puertorriqueños, rompiendo precedentes, eligieron candidatos particulares, no solo partidos. Con seis candidatos en la carrera por gobernador, incluidos dos de partidos políticos emergentes, Pierluisi, exrepresentante de Puerto Rico en el Congreso, ganó con el 33 por ciento de los votos. El aspirante del Partido Independentista Puertorriqueño, que suele obtener alrededor del 3 por ciento del apoyo, recibió un 14 por ciento de los votos, al igual que el Movimiento Victoria Ciudadana, un partido relativamente nuevo.

Por primera vez, la Legislatura de Puerto Rico estará formada por una sólida mezcla de políticos de diferentes partidos. El senador que obtuvo el mayor número de votos en una contienda general en toda la isla pertenece al Partido Independentista Puertorriqueño. Dos conservadores religiosos fueron elegidos para la Legislatura. Y en la carrera por la alcaldía de San Juan, el candidato del Movimiento Victoria Ciudadana, Manuel Natal Albelo, quedó atrás por poco más de 2000 votos. Rara vez en los últimos años alguien ajeno a los dos partidos principales ha estado tan cerca de ser elegido alcalde de la ciudad más grande de Puerto Rico.

Los resultados se certificaron de manera preliminar, aunque los candidatos se quejaron de que faltaban algunos votos.

“Primero dijeron que encontraron cuatro cajas de votos no contados. Luego fueron cinco y anoche cien”, dijo Fermín Arraiza, observador electoral. “Llegué esta mañana y son 115 cajas. Ahora creo que son 190”.

Natal, el candidato a la alcaldía de San Juan, dijo que estaba convencido de que los nuevos votos obligarían a un recuento. Su oponente, Miguel Romero, ya cambió su biografía de Twitter a “alcalde electo”.

“Hemos estado diciendo durante la última semana que hubo miles y miles de boletas que no fueron contabilizadas”, dijo Natal. “Ahora no solo admitieron que hay papeletas que no han sido contadas, sino que las tarjetas de memoria de las máquinas de conteo se han perdido”.

Natal dijo que estaba juntando declaraciones juradas de personas que fueron rechazadas en las urnas después de que les dijeron que ya habían votado por correo, a pesar de que nunca habían solicitado boletas para votar en ausencia. Pero no está dispuesto a acusar a nadie de cometer fraude.

“Esto ha creado un nivel de incertidumbre que nunca antes habíamos visto en nuestra historia electoral”, dijo.

El presidente de la Comisión Estatal de Elecciones de Puerto Rico, Francisco Rosado Colomer, reconoció que las votaciones fueron desorganizadas y se lo atribuyó a la pandemia de coronavirus. La inusual avalancha de votos por correo hizo que fuera difícil mantenerse al día, dijo.

En las urnas descubiertas recientemente, se encontraron muchas papeletas no contadas de diferentes precintos mezcladas “en el lugar equivocado, mal organizadas”, dijo Rosado. Pero destacó que ninguna de ellas había salido de la bóveda electoral y que su descubrimiento subrayó la transparencia del proceso.

Aún no se sabe cuántos votos contienen las cajas, dijo en una conferencia de prensa el martes.

“Hay casos que tienen tres papeletas, hay casos que tienen 500”, dijo. El miércoles por la mañana, le dijo a la radio WKAQ-580 AM que podría haber entre 3000 y 4000 votos.

“Confíen en la transparencia del proceso”, dijo Rosado. “Cada voto será contado”.

“Pedirle esto al país es un absurdo”, tuiteó Carmen Yulín Cruz, la alcaldesa saliente de San Juan.

Los críticos culparon al partido gobernante, que está a favor de la estadidad, porque este año cambió la ley electoral de formas que le dieron al partido de Rosado más control sobre las elecciones. El representante del Partido Nuevo Progresista en el consejo electoral, Héctor J. Sánchez, insistió en que el partido del gobierno quería que se contara hasta el último voto.

El sábado, todos los partidos opositores acordaron dejar de contar los votos, explicó Sánchez, a pesar de las persistentes preguntas sobre las boletas que aparentemente faltaban en algunas elecciones.

En Puerto Rico, cada carrera se vota con una boleta diferente y hubo discrepancias en el número de votos emitidos en algunas áreas.

En realidad, las boletas de las urnas adicionales no fueron descubiertas recientemente, afirmó Sánchez, sino que fueron etiquetadas con algún tipo de problema durante el conteo inicial y se reservaron para contabilizarse durante el proceso de certificación del conteo.

“Desafortunadamente, hay personas a las que solo les interesa crear confusión e inestabilidad”, dijo Sánchez.

Sin embargo, otros cuestionaron que las papeletas adicionales hayan sido etiquetadas como problemáticas e insistieron en que simplemente se habían pasado por alto.

Roberto Iván Aponte, un miembro de la comisión de elecciones, dijo que los resultados finales no se certificarían hasta diciembre.

“Es realmente irresponsable: un alcalde que cree que ganó tiene reuniones con el comité de transición y hace conferencias de prensa”, dijo Aponte, quien representa al Partido Independentista Puertorriqueño en la comisión. “Hay contiendas importantes que están prácticamente empatadas”.



Jamileth