Curiosidades
Mara y Dona, las hijas de la devoción argentina por "Diego"
Leonardo Benassatto
BUENOS AIRES, 28 nov (Reuters) - En un hogar de Buenos Aires cuelgan de una línea para secar ropa dos camisetas de la selección de fútbol de Argentina, una lleva el nombre Mara y la otra Dona. Pertenecen a dos mellizas de nueve años cuyo padre, como tantos otros argentinos, idolatran a “Diego”, el icono del fútbol que falleció el miércoles.
La decisión de Walter Rotundo, el padre de Mara y Dona, de hacer de los nombres de sus hijas un homenaje al ídolo por cuya muerte los argentinos se volcaron en masas a la calle para expresar su dolor se remite a un tiempo en que estaban lejos de siquiera nacer: la final del Mundial de Italia 1990.
Según el devoto del “Pelusa”, miembro de la denominada “Iglesia Maradoniana”, prometió que llamaría a sus hijas de esa manera luego de ver a Maradona llorando desconsoladamente tras perder la final de ese campeonato 1-0 contra Alemania.
“Cuando conocí a la mamá de ellas (...) le dije en algún momento vamos a tener dos hijas, una se va a llamar Mara y la otra se va a llamar Dona”, dijo Rotundo, de 38 años, recordando el diálogo que tuvo con la madre de las niñas, Stella Maris Prez.
En la casa de los Rotundo abundan las referencias a Maradona y Walter tiene tatuada en la espalda la reproducción de una fotografía en la que Diego está sosteniendo una instantánea en la que aparecen Mara y Dona. La casa de los Rotundo es como muchas otras de Argentina, donde se idolatra a Diego.
Por eso la noticia de la muerte de Maradona conmocionó al país sudamericano, cuyos habitantes acudieron en masa el jueves a un velorio público en el palacio presidencial Casa Rosada, en una jornada con incidentes violentos en las calles de Buenos Aires debido a que el fin de la ceremonia dejó a miles afuera.
Tras el masivo y desordenado velatorio, el cuerpo del icono fue trasladado a un cementerio privado de Bella Vista, en los suburbios de Buenos Aires, en medio de miles de personas que, apostadas al lado de la ruta, saludaban el paso del cortejo.
“A mi me parece muy lindo tener este nombre y lo que más me gusta de este nombre es saber por qué me llamo así. Yo siento que este nombre es maravilloso”, dijo Mara Rotundo, que vestía la camiseta de la selección argentina con el tradicional número 10 que usaba Maradona en la espalda.
Por su parte Dona Rotundo, que también vestía la “albiceleste”, señaló que la muerte de Diego la sorprendió. “Yo tampoco puedo creer que se murió. Encima es una persona re buena que no se merece eso”.
JMRS