|
Formato de impresión |
Al Sisi dice tras su victoria que las elecciones "son prueba de la vitalidad y la resiliencia de los egipcios"
MADRID, (EUROPA PRESS) - El presidente de Egipto, Abdelfatá al Sisi, ha destacado que las últimas elecciones presidenciales "son una prueba de la vitalidad y la resiliencia de los egipcios" y ha manifestado además que supone "un rechazo poderoso" de la población egipcia a la "inhumana" ofensiva lanzada por Israel contra la Franja de Gaza. Al Sisi, que se ha hecho con cerca del 90 por ciento de los votos, según los resultados oficiales anunciados el lunes por la comisión electoral, se ha mostrado "abrumado" por "las colas de votantes" durante la jornada electoral, que ha descrito como una muestra del "vibrante caleidoscopio de la sociedad". "Estas escenas, que he seguido de cerca, evocan un profundo sentimiento de aprecio e inmensa gratitud a todos los egipcios que participaron en este acto clave en unas circunstancias críticas, ya que el Estado hace frente a una multitud de desafíos en todos los niveles", ha manifestado. Así, ha explicado que entre ellos está "la guerra desatada en la frontera oriental", en referencia al conflicto en la Franja de Gaza, del que ha dicho que "requiere todos los esfuerzos para detener su avance, debido a la grave amenaza que supone para la seguridad nacional de Egipto, en particular, y para la cuestión palestina, en general". El mandatario egipcio ha recalcado que las elecciones "fueron un voto para todo el mundo, que resuena con su poderoso rechazo a esta guerra inhumana y no sólo como un voto para elegir a un presidente", al tiempo que ha ensalzado que los comicios se celebraron de forma "digna" y "sin violaciones de seguridad", según la transcripción de sus declaraciones facilitada por el Servicio de Información Estatal a través de su página web. Al Sisi ha subrayado además que es "perfectamente consciente" de "la magnitud de los desafíos" a los que hace frente Egipto y ha destacado que "el verdadero héroe que hace frente a esto es el gran ciudadano egipcio, que se ha enfrentado al terrorismo y su violencia, ha superado reformas económicas y sus impactos y ha perseverado a través de las crisis". Por ello, ha prometido trabajar para "construir la Nueva República", que ha descrito como "un Estado democrático" dirigido por "un compromiso inamovible con el respeto de la ley y la Constitución que avance firmemente hacia la modernidad y el crecimiento a partir de la ciencia y la tecnología al tiempo que mantiene su identidad, cultura y patrimonio". AGRADECIMIENTO AL RESTO DE RIVALES En otro orden de cosas, Al Sisi ha expresado su agradecimiento "a todos los candidatos" que aspiraban a la Presidencia por "el gran trabajo que han llevado a cabo", al tiempo que ha argumentado que esto "allana el camino para una vida política vibrante y diversa". "Elegirme para la misión de liderar el país es una responsabilidad que asumo plenamente ante Dios todopoderoso y antes ustedes. La historia será testigo", ha manifestado, antes de describirse como "un hombre egipcio que creció en un auténtico barrio egipcio antiguo". "Pertenezco a la institución militar. En la misión que se me ha encomendado, no tengo más que trabajar con y para ustedes. No escatimaré esfuerzos a la hora de satisfacer a Dios todopoderoso y materializar los deseos y aspiraciones de la población", ha dicho Al Sisi, quien ha pedido "trabajar juntos por el querido Egipto". Al Sisi se ha hecho con el 89,6 por ciento de los votos, según el anuncio del presidente de la Autoridad Nacional de Elecciones, Hazem Badaui. Por detrás quedaron Hazem Omar, con el 4,5 por ciento; Farid Zahran, con el cuatro por ciento; y Abdelsanad Yamama, con el 1,9 por ciento de las papeletas. Badaui afirmó que la participación en los comicios, que se celebraron entre el 11 y el 13 de diciembre, fue del 66,8 por ciento, al tiempo que destacó que la misma supone un alza respecto a otras votaciones anteriores. De hecho, en el referéndum constitucional de 2019 votó el 44,3 por ciento del censo, mientras que en las presidenciales de 2018, 2014 y 2012 participaron el 41 por ciento, el 47,5 por ciento y el 51,8 por ciento de la población, respectivamente. CRÍTICAS DE HRW La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha acusado a Al Sisi de promover una campaña de intimidación, arrestos y de pedir requisitos excesivos a candidatos para evitar cualquier tipo de competencia. "Meses antes de las elecciones presidenciales de diciembre, el Gobierno de Al Sisi eliminó meticulosamente cualquier posible competencia", ha dicho el investigador principal para Oriente Próximo y el Norte de África de HRW, Amr Magdi. "La eliminación por parte del Gobierno de una elección independiente es el último capítulo de una campaña de represión en curso que ha destruido en gran medida el espacio cívico y encadenado la participación política en el país durante la última década", ha subrayado. Al Sisi, principal favorito, fue director de los servicios de Inteligencia Militar entre 2010 y 2012, cuando fue nombrado ministro de Defensa por el entonces presidente, el islamista Mohamed Mursi, quien se había impuesto en las primeras elecciones democráticas del país, celebradas tras el derrocamiento de Hosni Mubarak tras semanas de movilizaciones en el marco de la Primavera Árabe. Posteriormente, encabezó en julio de 2013 un golpe de Estado que derrocó a Mursi --quien fue detenido y murió en 2019 tras sufrir un colapso durante una vista judicial--, lo que derivó en el nombramiento de Adli Mansur como presidente interino hasta que en 2014 optó por abandonar su puesto en el Ejército para presentarse a las presidenciales de 2014, en las que se hizo con la victoria. El mandatario, que hacía frente a tres rivales con pocas aspiraciones --incluidas dos figuras consideradas cercanas al mandatario-- ha sido acusado de encabezar un régimen autoritario y de reprimir con dureza a la organización islamista Hermanos Musulmanes y a los activistas prodemocráticos que se movilizaron contra Mubarak. Jamileth |
|
� Copyright ElPeriodicodeMexico.com |