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"La Zona del Silencio"


2006-10-10

Notimex.- "La Zona del Silencio", en el área desértica del Bolsón de Mapimí, en la colindancia de los estados de Durango, Coahuila y Chihuahua, es, sin duda, enigmática.

Esa zona ha llamado la atención de investigadores y curiosos, por reunir, en el mismo sitio, tecnología, diversas culturas y biodiversidad.

Su riqueza estriba en la diversidad de flora y fauna que, a pesar de los cambios climáticos, se ha logrado adaptar. Pero, lo realmente atrapante, es lo inexplicable de los sucesos ahí ocurridos.

El lugar se encuentra entre los paralelos 26� y 28� de Latitud Norte y los meridianos 104� y 106� de longitud Oeste, que son los paralelos donde se encuentran los puntos de mayor magnetismo del planeta, como el Triángulo de las Bermudas y las pirámides de Egipto.

Se cree que este sitio fue habitado por una antigua tribu maya denominada Tulum Balam, porque se descubrió un antiguo observatorio indio y restos en el cementerio del lugar.

En 1965, en una expedición de Petróleos Mexicanos (Pemex) se constató de extrañas interferencias en las ondas de radio de los aparatos transmisores. En 1966, un inspector de la compañía, el geólogo Harry Augusto de la Peña Pérez, comprobó el suceso.

El investigador trazó en el mapa un área de 50 kilómetros cuadrados que denominó "Zona del Silencio", ya que su radio-transmisor no recibía las ondas hertzianas y, por lo tanto, no se escuchaba ninguna señal.

A la fecha, no se ha logrado establecer oficialmente la longitud de esa zona. Algunos científicos afirman que abarca 60 kilómetros cuadrados y otros aseguran que son 120.

En esa zona se encontraron vestigios de un gran meteorito denominado "Chupaderos", que se impactó en el área, cerca de Jiménez, Chihuahua, el cual es considerado uno de los más grandes del mundo, y hoy se encuentra en el museo del Palacio de Minería de la ciudad de México.

Además, el lugar se caracteriza por ser llano y con pequeñas e irregulares elevaciones. Al poniente está la sierra de la Campana, y los cerros San Ignacio, Capitán Jaime y de la Bienvenida.

Al oriente de esta región, a unos kilómetros del área considerada, está la sierra Mojada y al sur la sierra de Tlahualilo.

El lugar es atravesado por una falla, que aparece posiblemente desde el casquete polar, pasa por Canadá y Estados Unidos, llega al estado de Sonora y atraviesa el mar de Cortés.

Al nordeste de Tlahualilo, Durango, se encuentran las evidencias de un fuerte movimiento telúrico ocurrido, posiblemente, hace millones de años.

Estudios indican que la falla se adentra al océano Pacífico y corta en las islas de Revillagigedo, vuelve al territorio mexicano, atraviesa el Istmo de Tehuantepec y se conecta en una ramificación de fallas ubicadas en el Triángulo de las Bermudas.

En la zona se localiza el valle del Hundido, lo que fuera la laguna del Caimán o de Tlahualilo y el valle del Sobaco. Se cree que en estas dos últimas zonas hubo aguas marinas, ya que se han encontrado fósiles de estrellas de mar y de otros animales.

La temperatura es cambiante. En enero, por las noches llegan a registrarse hasta menos siete grados centígrados y la máxima en el día es de 20 grados.

Entre verano e invierno, la temperatura media varía de entre 11 y 28 grados centígrados, y en primavera se han registrado temperaturas de cinco grados por la noche y 40 grados en el día.

En la zona casi no llueve, pero cuando eso ocurre, inunda todo el valle. La precipitación anual es de entre 50 y 400 milímetros cúbicos.

La planta denominada gobernadora destaca en la vegetación de la "Zona del Silencio". A veces ocupa llanos enteros mezclándose con el maguey chaparro, el nopal rastrero, cardenches, mezquites, candelilla y ocotillo.

Estudios que se han realizado concluyeron que hay mutación en los pigmentos del nopal de la región y cambios en las raíces de la planta gobernadora.

Además, en los cañones y quebradas de los cerros habitan el puma y el jaguar, los cuales, en ocasiones, se acercan a ranchos y al edificio del laboratorio de la Reserva de la Biosfera.

En la región también habitan: gato montés, coyote, venado, mapache, liebre, conejo, lagartija, correcaminos, rata canguro y tortuga, entre otros.

Según científicos estadunidenses, la tortuga de la "Zona del Silencio" es única en el mundo. En vez de extremidades terminadas en aletas, ésta desarrolló pezuñas para horadar en la arena, protegerse, depositar sus huevos y buscar comida.

Además, se sabe que hace 60 millones de años, la sierra de Tlahualilo fue un lecho marino; pero la geología terrestre tuvo cambios, por lo que se formó una región rodeada de lagunas y sierras, la cual después sería llamada región Lagunera. En esta zona también habitaron indígenas irritilas, conchos, coahuilas y tobosos.

Hoy, tras el descubrimiento del geólogo De la Peña Pérez, las extrañas interferencias en las ondas de radio que él percibió cautivan a científicos, quienes se refieren a este sitio como "Zona del Silencio".



AAG


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