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López Obrador y sus afirmaciones no verdaderas

2019-05-06

Por Armando Reyes | Revista Siempre

Entrevista a Luis Estrada 

Si bien como ejercicio de comunicación las conferencias “mañaneras” del presidente López Obrador generaron interés no sólo entre la clase política, sino también entre la ciudadanía, en los análisis que se han hecho de las mismas se revela que se trata de comparecencias ante los medios plagadas de inexactitudes, datos sin confirmar, promesas y datos que son complicadas de comprobar.

Lo anterior se desprende del análisis que ha realizado el director de Spin Taller de Comunicación Política, Luis Estrada, quien con su equipo las han revisado hasta el pasado 30 de abril, 102 conferencias de prensa que se dan en Palacio Nacional a partir de las 7 de la mañana.

En entrevista con Siempre! Estrada afirmó que su trabajo “es parte de un análisis que hacemos sistemáticamente todos los días y que nos revela múltiples aspectos de la comunicación del presidente, no sólo medimos la conferencia, medimos su audiencia en Facebook, medimos las características de su cuenta en Instagram, por ejemplo, y el impacto que tiene lo que el presidente dice en las primeras planas de la nota principal al día siguiente”.

El pez…

Luis Estrada compartió con este medio la manera que clasifica las declaraciones del presidente, utilizando para ello una categoría que llama la atención por la manera en que se redactó. Así, la mayor parte de las palabras de López Obrador cae en lo que nuestro entrevistado calificó como “afirmaciones no verdaderas”.

Estas, a su vez, se clasifican en cuatro categorías:

Promesas, “proyecciones a futuro cuya veracidad se verificaría después de un tiempo”; compromisos, “acuerdos con la fuente de reporteros, que posponen la presentación de evidencia y que no siempre se les da seguimiento”; no falseables, “imposible verificar si es verdad o mentira”; y falsas, “refutadas por evidencia”.

“En principios (el presidente utiliza este tipo de afirmaciones) porque no tiene la afirmación completa y busca evadir la respuesta, por eso utiliza cuatro tipos de afirmaciones no verdaderas que tenemos clasificadas y que son muy frecuentes, 29 en promedio por conferencia”, explica nuestro entrevistado.

De acuerdo a la revisión que ha hecho Spin de este tipo de ejercicios, lo que se tiene es una conferencia de prensa diaria que no está demostrando su eficiencia para hacer de los temas que presenta el presidente la nota principal en los medios de comunicación.

“Justo el dato que damos a conocer, dice que 10 por ciento de las primeras planas o notas principales son reflejos de la conferencia del día anterior”.

De igual manera, otro dato que se encontró fue que la audiencia en redes sociales ha disminuido desde que inició, en diciembre pasado, este tipo de herramientas de comunicación. Así, en Faccebook el 3 de diciembre la conferencia “mañanera” tuvo un millón 400 mil “vistas”, en tanto que la del pasado 26 de abril tuvo 416.

Spin determinó que cada conferencia tiene 5 mil 600 “vistas” menos que la anterior.

Difícil comparación

Seguirle la pista a un ejercicio de comunicación diario, con la cantidad de información que genera, no es una tarea sencilla, pero que Luis Estrada y su equipo realizan dedicadamente todos los días.

En principio, no hay información para comparar con otras etapas, como en la que López Obrador fue jefe de gobierno de la hoy Ciudad de México.

“No tenemos la información de las conferencias de prensa cuando era jefe de gobierno, pero lo que sí podemos decir es que los medios han cambiado, la diferencia más importante es que cuando ocupó ese cargo no había Internet y eso cambia toda la dinámica del ciclo informativo”.

Acerca del concepto, “afirmaciones no verdaderas”, Luis Estrada explicó porqué se usa este término y no se aplica la palabra mentira a lo que dice el presidente.

“No todas son mentiras, en El Universal explicamos la clasificación de promesas, compromisos, afirmaciones no falseables, y otra es afirmaciones falsas; no todas son mentiras, son no verdaderas porque se necesitan verificar de otra forma”.

Acerca de si este formato está cayendo en el desgaste y la posibilidad de que se vaya a modificar o sustituir por otra herramienta de comunicación, Estrada respondió que no ve este escenario en el corto plazo.

“En principio sí (hay un desgaste), pero eso no significa que las vaya a dejar de hacer, no tenemos evidencia de que eso suceda, habrá una razón para que el presidente la siga haciendo a pesar de el desgaste evidente que nosotros medimos está ahí, pero no podemos saber cual es su intención o que está pensando”.

Sobre la comparación con su contraparte estadounidense, Estrada compartió con este medio que se han encontrado similitudes en cuanto al uso de las llamadas “afirmaciones no verdaderas”. Nuestro entrevistado aseguró que al igual que The Washington Post, en Spin “contamos las ‘afirmaciones no verdaderas’, las clasificamos en 4 categorías y el diario estadounidense también las va contando”.

Finalmente, recordó que su trabajo de análisis se basa en la experiencia previa que tienen en el ámbito de la comunicación.

“Somos un despacho de consultoría en comunicación estratégica con experiencia de 9 años en el ámbito de la consultoría, además de varios años en campañas y otros aspectos, para nosotros esto es algo que hacemos todos los días”.

Otro ejercicio

La consultora Integralia que dirige Luis Carlos Ugalde, también ha hecho un ejercicio de verificación de la información que se da a conocer en la conferencia “mañanera”.

De acuerdo a su análisis, “el presidente ha optado consistentemente por declaraciones vagas y genéricas, que hacen difícil su verificación”.

Tan sólo en la semana del 1 al 4 de abril, ejemplifica Integralia, “aseguró que la estrategia de seguridad estaba dando resultados, pues se había logrado ya una reducción de la incidencia delictiva en Jalisco. Sin embargo, no especificó el tipo de delitos que estaba midiendo ni la fuente de donde obtuvo esa información. Las cifras del Secretariado Ejecutivo revelan, además, una realidad contraria, pues Jalisco atraviesa una ola de violencia, en gran parte derivada del enfrentamiento entre el Cártel Jalisco Nueva Generación, la Nueva Familia Michoacana y los Caballeros Templarios por el control de la plaza.

De igual forma, continúa la revisión, “utilizó cifras incorrectas para resaltar las ‘deficiencias del sector energético’, en un esfuerzo por justificar su interés por incrementar la injerencia del Estado en el manejo del sector”.

Como Trump

Otro mandatario que ha sufrido el escrutinio de la prensa es el estadounidense Donald Trump, quien ha sido calificado como un mandatario que recurre constantemente a las “afirmaciones no verdaderas” en su comunicación pública.

De acuerdo a The Washington Post, el presidente de la Unión Americana hacia en su primer año de gobierno un promedio de cinco declaraciones falsas al día, cifra que aumentó a 23 en los últimos siete meses, en una revisión hasta finales de abril.

El rotativo estadounidense ha desarrollado una herramienta de análisis, llamada Fact Checker (verificación de hechos), la cual inició en los primeros 100 días de la administración Trump siguiendo minuciosamente las declaraciones del inquilino de la Casa Blanca y encontrando que en 800 días en el cargo ha hecho 10 mil declaraciones falsas o engañosas.

Uno de los escenarios favoritos para el también magnate para pronunciar falsedades, son los mitines que tiene en sus recorridos por su país; en dichos eventos, ha pronunciado 22 por ciento de sus declaraciones engañosas.

Adicionalmente, The Washington Post estableció los Bottomless Pinocho (Pinochos sin fin), un reconocimiento mediante el cual reconoce una declaración falsa que ha sido repetida al menos 20 veces. Trump ha sumado 21 de estos Pinochos a lo largo de su mandato.

En contraparte, el propio presidente ha señalado que los encargados de los fact checker, al igual que los medios de comunicación, son deshonestos.