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Estampida de turistas por sargazo en playas del Caribe mexicano
2019-05-24
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO.- La epidemia de sargazo que afecta al sureste de México provocó la estampida de los turistas de las costas de la región del Caribe mexicano para optar por la región del Pacífico, especialmente en el occidente y noroccidente del país.
Según estadísticas oficiales de la autoridad turística del estado de Quintana Roo, fronterizo con Belice, la ocupación hotelera disminuyó 5,5% en el mes de abril, específicamente en los principales centros veraniegos como Cancún, Puerto Morelos, Isla Mujeres o la Riviera Maya, en comparación con el año pasado.
El más popular buscador de viajes por Internet, Kayak, reveló que los turistas están planeando viajar a diversos balnearios del Pacífico como Mazatlán y Los Cabos (noroeste), Puerto Escondido (sureste), Puerto Vallarta (occidente) y Acapulco (sur) como alternativa a las costas del Caribe.
El Caribe mexicano es una de los principales destinos de playa y sol para el turismo nacional y extranjero, con altos índices de ocupación en temporadas como Semana Santa o verano.
Las macroalgas son provocadas por el aumento en la temperatura del mar que inundan en forma de grandes islas que se desplazan hacia el sur en la zona del Atlántico son la causa principal de la estampida.
Las grandes cantidades de sargazo se descomponen en las costas de las playas del Caribe, emitiendo gases que a largo plazo pueden causar daños a la salud, además de quitar el color claro del mar y emitir un olor desagradable.
Brigitta Van Tussenbroek, Investigadora del Instituto de Ciencias del Mar y Limnologia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que hay dos especies actualmente en el Caribe mexicano.
Una proviene del Mar del Sargazo ubicado en Bermudas, y la otra de un mar situado entre Africa y Brasil. Esta última, por razones desconocidas, es la especie que más está arribando a México es esta última, pero se cree que podría deberse al llamado "Efecto Invernadero".
"Exactamente no sabemos por qué la segunda especie que proviene de entre Africa y Brasil es la que está llegando al Caribe más abundante. Seguramente por una serie de factores que involucran el calentamiento global y la contaminación de los océanos", afirmó la especialista.
"Esta alga entra en el Caribe porque encuentra condiciones más favorables para seguir creciendo y descomponerse", explicó.
Según Van Tussenbroek, la "tarjeta de visita" en el Caribe mexicano son las "playas azul turquesa y transparente y la arena blanca", pero con el sargazo "el mar se vuelve verdoso, por eso impacta cuando llega en maneras masivas".
Adicionalmente, las algas pueden provocar daños a la salud pues el contacto constante genera problemas debido a que emiten ácido sulfúrico y metano que afectan al cuerpo humano.
El gobierno de Quintana Roo activó el "protocolo emergente para atención del sargazo" en el estado, con fondos por 15 millones de pesos (unos 800,000 dólares), derivados del Fideicomiso para el Manejo Integral de la Zona Costera, pero se estima que la cifra es insuficiente.
Los dueños de cadenas de hoteles, restaurantes y otros negocios del sector turístico en la región han llamado al gobierno a otorgar fondos adicionales para enfrentar esta emergencia.
"Es necesario actuar de manera conjunta iniciativa privada y autoridades para un manejo integral del sargazo, emitir alertas tempranas y ejecutar la recolección en altamar", afirmó Manuel Paredes, director ejecutivo de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya.
Por ahora, el flujo de esta alga parece no conceder ninguna tregua, de acuerdo con la Red de Monitoreo del Sargazo Cancún.
La zona más afectada es Cancún, seguido de la Riviera Maya e Isla Mujeres, donde los hoteleros participan con cuadrillas de trabajadores en la remoción de las montañas de sargazo que se acumulan sobre la arena.
Los hoteleros suelen organizar tours para los turistas a fin de que visiten cenotes, zonas selváticas y áreas arqueológicas, para evitar la desagradable experiencia del sargazo mientras se bañan en el mar.
Jamileth
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