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¿Estados Unidos reabre fronteras con Europa y Brasil? Trump dice que sí, Biden dice que no


2021-01-19

Por Alina DIESTE

Washington, 19 Ene 2021 (AFP) - La reapertura de fronteras de Estados Unidos con gran parte de Europa y Brasil el 26 de enero quedó en entredicho el lunes, cuando el saliente presidente Donald Trump hizo el anuncio y minutos después la portavoz del entrante mandatario Joe Biden lo contradijo.

Trump, que termina su mandato el miércoles, emitió una declaración levantando las restricciones al ingreso de ciertos viajeros procedentes del espacio Schengen, Reino Unido, Irlanda y Brasil a partir del martes de la semana próxima.

"Esta medida es la mejor manera de continuar protegiendo a los estadounidenses del covid-19 al tiempo que permite que los viajes se reanuden de manera segura", dijo Trump en una proclamación de la Casa Blanca.

Para frenar la propagación del nuevo coronavirus, la administración Trump cerró las fronteras de Estados Unidos a los 26 países del espacio Schengen el 11 de marzo de 2020, luego a Reino Unido e Irlanda el 14, antes de hacer lo mismo para Brasil el 24 de mayo. 

Solo ciudadanos o residentes estadounidenses, así como personal diplomático puede hasta ahora ingresar a Estados Unidos proveniente de esos lugares.

Pero el mandatario republicano recordó que la agencia gubernamental de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), autoridad sanitaria en el país, emitió el 12 de enero una orden por la cual se requerirá que todos los pasajeros que ingresen vía área al país tengan una prueba de covid-19 negativa.

Esta normativa entrará en vigor el 26 de enero y amplía una limitación ya vigente desde diciembre a Reino Unido, impuesta luego de la aparición allí de una variante del coronavirus considerada más contagiosa.

El CDC recomienda actualmente que todos los viajeros procedentes del extranjero se hagan la prueba nuevamente de tres a cinco días después de su llegada y que se queden en casa durante al menos siete días.

Trump dijo que las nuevas directivas del CDC lo convencieron de terminar con las limitaciones a los viajeros procedentes de Europa y Brasil. 

Las prohibiciones para los que ingresen desde China e Irán siguen sin embargo en vigor, señaló.

- "No es el momento" -

La futura portavoz de la Casa Blanca no tardó en desestimar la decisión de Trump.

"Siguiendo el consejo de nuestro equipo médico, la Administración no tiene la intención de levantar estas restricciones el 26 de enero", dijo Jen Psaki minutos después de la publicación de la declaración de Trump.

"De hecho, planeamos fortalecer las medidas de salud pública en torno a los viajes internacionales para mitigar aún más la propagación del covid-19", indicó en Twitter.

"Con el empeoramiento de la pandemia y el surgimiento de variantes más contagiosas en todo el mundo, este no es el momento de levantar las restricciones a los viajes internacionales", agregó.

Algunos epidemiólogos han advertido que es probable que ya haya nuevas variantes más contagiosas del SARS- CoV- 2 circulando en Estados Unidos, el país más afectado del mundo por el virus reportado por primera vez en China a fines de 2019.

Hasta el lunes, Estados Unidos había registrado más de 24 millones de casos de covid-19, con casi 400,000 muertes.

Y la situación en el país puede empeorar cuando la variante B.1.1.7. detectada en Reino Unido se convierta en marzo en la cepa dominante, lo cual podría aumentar el porcentaje de personas que deben vacunarse para lograr inmunidad colectiva.

Estados Unidos, con 328 millones de habitantes, había vacunado hasta el viernes a 12,2 millones de personas y había distribuido 31,1 millones de dosis, según datos del CDC, muy por debajo de la meta de Trump de haber vacunado en diciembre a 20 millones de personas.

El desencuentro entre la administración de Trump y el futuro gobierno de Biden es un nuevo capítulo de una transición de mando particularmente tumultuosa.

Trump, que será el primer presidente saliente en 152 años en no asistir a la investidura de su sucesor, se negó durante meses a aceptar el resultado de las elecciones del 3 de noviembre, insistiendo sin fundamento en que la votación había sido manipulada en su contra, e ignorando los fallos judiciales que señalaron lo contrario.

No sólo no felicitó ni se reunió aún con Biden, como es tradicional en Estados Unidos, sino que el mandatario republicano inicialmente negó al equipo demócrata el acceso a fondos y recursos dispuestos por ley para asegurar la instalación ordenada de la administración entrante.

Biden, que llega a la Casa Blanca tras una gestión de Trump de la pandemia muy criticada, reveló el viernes un ambicioso plan para luchar contra el covid-19, prometiendo vacunar a 100 millones de estadounidenses en sus primeros 100 días en el cargo.



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