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Colapso en Surfside: los escombros muestran indicios de un posible fallo de construcción


2021-07-09

James Glanz, Mike Baker, Anjali Singhvi, The New York Times

Los ingenieros que estudian el derrumbe de la torre de Florida indicaron que en ciertas áreas parecía haber menos refuerzo de metal que lo que se proyectó en los dibujos de diseño de 1979.

Los ingenieros dijeron que las columnas dañadas en el sitio del colapso parecían tener menos refuerzo de acero de los requeridos por los dibujos de diseño.

Los ingenieros que han visitado o examinado fotografías del siniestro del complejo de condominios Champlain Towers South han quedado sorprendidos ante un posible fallo en su construcción: sitios clave cerca de la base del edificio parecen haber empleado menos refuerzos de acero que lo proyectado en los dibujos del diseño original.

La observación es el primer detalle que surge y que apunta a un posible problema de calidad de construcción en la torre de 13 pisos de Surfside, Florida, que colapsó el mes pasado y mató al menos a 78 personas y deja aún 62 desaparecidos.

Contactado por teléfono, Allyn E. Kilsheimer, un experto en ingeniería forense contratado por la ciudad de Surfside para investigar el colapso, dijo que la investigación aún se encontraba en sus fases iniciales, pero confirmó que había señales de que la cantidad de acero empleada para conectar las losas de hormigón debajo de un nivel de estacionamiento a las columnas verticales del edificio podría haber sido menor que las especificaciones de los planos del proyecto inicial.

“Las varillas podrían no haber estado acomodadas del modo en que indican los dibujos originales”, dijo Kilsheimer en una entrevista. Dijo que necesitaría examinar los escombros más a detalle para determinar si, de hecho, las conexiones de losa a columna contenían menos acero del esperado.

R. Shankar Nair, miembro de la Academia Nacional de Ingeniería y expresidente del Consejo de Edificios Altos y Hábitat Urbano, estuvo entre los ingenieros que revisaron fotografías y encontraron inconsistencias entre el diseño y el acero que era aún visible en las columnas.

El desplome de la plataforma dejó expuestas partes del acero en estas tres columnas, lo que permitió a los ingenieros comparar el armado con los planos de diseño.

Una porción de la losa de la plataforma colapsó en el estacionamiento subterráneo.

La investigación del colapso podría tomar meses, así que las observaciones preliminares y los hallazgos podrían cambiar. Algunos ingenieros indicaron que un posible déficit en el armado de refuerzo en la zona relativamente pequeña del edificio que habían examinado no debería identificarse como una causa del colapso pero sí que potencialmente podía ser uno de varios factores que habrían permitido que se acelerara cualquiera que haya sido el detonante del problema hasta convertirse en una falla catastrófica.

Al cuestionar la cantidad de acero de refuerzo en el edificio, los ingenieros señalaron tres columnas dañadas en la sección occidental del edificio que seguían intactas después del colapso.

Dichas columnas eran parte de una plataforma exterior que servía como zona de estacionamiento en una planta baja adyacente a la plaza de la piscina. Se trata de un punto clave de interés puesto que al menos dos testigos han dicho que vieron que parte de la plataforma colapsó minutos antes de la caída del edificio.

Los planos de 1979 de la torre de condominios, proporcionados por la ciudad de Surfside y revisados por ingenieros estructurales y The New York Times, indican que las columnas verticales en muchas zonas del edificio debían proveer una conexión estructural crítica a las losas horizontales, empotradas con ocho varillas de acero de refuerzo —cuatro en una dirección, cuatro en la otra— cerca de la parte superior de las losas. Pero las varillas de refuerzo del estacionamiento, que quedaron expuestas en muchos puntos después de que la losa de la plataforma de estacionamiento se estampó contra el nivel inferior, parecen ser menos.

En la mayoría de los costados de la losa expuesta solo se aprecian dos piezas de varilla de refuerzo, la mitad de lo esperado. En otro hay tres varillas visibles.

El hormigón es capaz de soportar los edificios altos solo cuando está reforzado con acero. El hormigón es un material resistente “en compresión”, como dicen los ingenieros, al soportar el peso que tiene por encima, por ejemplo. Pero es mucho menos eficaz “en tensión”, o para unir cosas cuando existen fuerzas que tienden a jalar el hormigón en direcciones opuestas. El armado con acero añade esa fuerza tensil y los cálculos de diseño sólidos, respaldados por los reglamentos de edificación, especifican cuánto acero se requiere según el tipo, tamaño y otras características de un inmueble.

Kilsheimer advirtió que es común que la construcción terminada difiera de los diseños en plano.

También dijo que se deben realizar más análisis para evaluar si la cantidad de refuerzo de acero empleado había sido un factor determinante del colapso. Comentó que trabaja en modelado por computadora para responder esa cuestión.

Algunos de los ingenieros que dijeron que había menos acero visible en el siniestro de lo esperado basaron su evaluación en una lectura cuidadosa de los documentos de diseño del edificio.

Nair, que tiene más de 50 años de experiencia en diseños, dijo que a partir de las imágenes de las tres columnas dañadas era claro que las estructuras no parecían contener la cantidad esperada de acero.

En su opinión, el diseño exigía que una serie de varillas de acero atravesaran la losa de la plataforma del estacionamiento, al menos cuatro pasarían en cada dirección a través de cada una de las columnas que sostenían el garaje, y el resto de la estructura, en su lugar. Pero las fotos muestran menos varillas en esas columnas, dijo.

“No parece que hayan puesto el acero necesario para conectar la losa a las columnas”, dijo Nair. “Lo que hemos visto parece inconsistente con lo que muestran los planos”.

Los ingenieros advirtieron que los investigadores tendrían que examinar los componentes más a fondo para descartar la posibilidad de que hubiesen varillas de refuerzo adicionales que se cortaron por la furia del colapso. Nair y otros ingenieros también dijeron que era posible que algunas varillas se hubieran instalado muy cerca de los bordes de las columnas y dejaran poco o ningún rastro de su presencia.

John Pistorino, un ingeniero consultor del área de Miami que ha trabajado en la industria durante décadas, dijo que, en general, un inspector gubernamental de edificaciones o alguien contratado por el constructor tendría que haber examinado la instalación del acero antes de verter el concreto.

No está claro, a partir de los registros disponibles, si el diseño original del edificio cumplió o excedió los estándares del código de construcción en el momento de la edificación en 1981. Desde entonces, la mayoría de los reglamentos de todo Estados Unidos se han mejorado y exigen más refuerzos de acero.

Los estándares de inspección de Florida se mejoraron en la década de 1980 después del colapso de un edificio en construcción en Cocoa Beach, cerca de Orlando. Los estándares ahora requieren la contratación de un inspector independiente para los edificios más grandes.

El desarrollo del proyecto Champlain Towers South fue liderado por Nattel Construction, una empresa que no existe desde hace 20 años. El director de la empresa, Nathan Reiber, murió en 2014.

En los últimos años, el complejo Champlain Towers South debía emprender un proceso extenso de renovaciones porque un informe de ingeniería realizado en 2018 identificó oxidación, hormigón desmoronado y un diseño defectuoso de la plataforma de la piscina cuyas reparaciones costarían varios millones de dólares.

Parte del hormigón estaba tan deteriorado que durante un proyecto de reparación inicial ejecutado en octubre, los equipos no pudieron completar el trabajo alrededor de la piscina que estaba programado. El deterioro había penetrado profundamente en algunos componentes y una excavación podría haber afectado la estabilidad de esa parte de la estructura, según un informe de la firma de ingeniería Morabito Consultants.

Durante el derrumbe, la losa de Champlain Towers South que, en parte, estaba ubicada sobre las tres columnas dañadas que aún son visibles, cayó al nivel del estacionamiento, un piso debajo de la planta baja, a nivel de suelo. Las fallas en el acero “podrían explicar que la losa se haya soltado y caído”, dijo Nair. Pero aseveró que no creía que la losa derrumbada fuese la causa inicial del colapso mayor.

Sin embargo, la atención se ha centrado en el área alrededor de la losa del estacionamiento y la piscina. El video del colapso sugiere que la falla inicial ocurrió en algún lugar cerca de la parte inferior del edificio, donde se encuentran el garaje y la piscina.

Además, otro video desde el exterior del edificio, tomado poco antes del colapso, muestra un chorro de agua y lo que parecen ser escombros cerca de la rampa de entrada al estacionamiento.

Gabriel Nir, quien vivía en el apartamento 111, en el primer piso de la parte del edificio que se derrumbó, dijo que llegó a su casa antes de la 1:00 a. m. y notó que se acumulaba agua en la base de la rampa de entrada, aunque eso no era raro. No vio escombros en ese momento, dijo en una entrevista.

Cuando él y su madre entraron al apartamento, escucharon golpes que sonaban como si vinieran de arriba.

“Pensamos que alguien estaba haciendo reformas”, dijo Nir. Al principio lo ignoraron, pero continuó durante varios minutos, y se volvió más intenso.

Nir dijo que su madre fue al vestíbulo para quejarse del ruido. Estaba en la cocina preparando comida cuando escuchó un fuerte estruendo y vio una nube de polvo proveniente del área de la terraza de la piscina. Él y su hermana se apresuraron al vestíbulo para reunirse con su madre y alertaron a un guardia de seguridad para que llamara al 911.

Mientras caminaba hacia afuera, Nir vio que en la planta baja, la plataforma del estacionamiento y la piscina, la parte que los ingenieros ahora están revisando, se había caído. Dijo que también vio la explosión de las tuberías, seguida por el derrumbe de aproximadamente la mitad del edificio. Él y sus familiares huyeron del lugar y sobrevivieron aunque su departamento fue aplastado por el colapso.

Los ingenieros dijeron que parecía poco probable que tener menos varillas de refuerzo desencadenara el colapso, incluso teniendo en cuenta el deterioro significativo acumulado a lo largo de muchos años. Un factor de seguridad integrado en la mayoría de los proyectos garantiza que una ligera reducción en el contenido de acero no conduzca necesariamente a un desastre.

El armado en las losas de Champlain Towers South es una malla compleja, con conjuntos entrecruzados de varillas paralelas largas colocadas en un plano cerca de la parte superior de la losa y con más refuerzos cerca de la base.

Como es difícil detereminar cuál de los segmentos inferiores del armado habría atravesado las columnas y, por lo tanto, sería visible en los escombros después de la caída de la losa, algunos ingenieros se han centrado en las varillas superiores. Las pistas más importantes de lo que sucedió probablemente estén enterradas entre los escombros.

“Tenemos un montón de problemas que creemos que podrían ser parte, o ser el detonante, de lo que sucedió”, dijo Kilsheimer.

La cantidad inesperadamente baja de varillas de refuerzo visibles después del colapso de la losa de estacionamiento no fue el único problema con el armado de acero que los ingenieros notaron en sus revisiones iniciales.

Dawn E. Lehman, profesora de ingeniería estructural en la Universidad de Washington, señaló que se podían ver varillas de refuerzo colgando de algunas partes de la estructura restante, extraídas del concreto. Dijo que eso podría indicar que en algunos lugares, el concreto estaba dañado y el acero no tenía la unión necesaria con el concreto. Lo anterior podría tener varias explicaciones, dijo, incluida la corrosión, el deterioro del hormigón, el daño por cizallamiento en el concreto o el uso de un tipo de armadura de refuerzo con propiedades de unión más débiles.

Kilsheimer dijo que esperaba ver más de cerca el resto del edificio para evaluar mejor sus componentes. Había preocupaciones de que la estructura restante fuera un peligro. Kilsheimer dijo recientemente que un análisis por computadora sugirió que la parte norte de la misma podría estar en riesgo de colapso con fuertes vientos.

El hormigón y el acero en el edificio eventualmente serán sometidos a pruebas, dijo Kilsheimer, y los investigadores irán bajo tierra para examinar el suelo y probar el área con perforaciones. Modelarán el edificio con ayuda de computadoras y reconstruirán los componentes recuperados de los escombros en una instalación de almacenamiento externa.

Resolver este misterio, dijo, es como comenzar varios rompecabezas, “arrojarlos al aire, mezclarlos con una escoba y luego tratar de averiguar qué pieza va en cada rompecabezas”.



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