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Suben a dos los muertos por explosiones en México

2021-11-04

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Una mujer murió a consecuencia de las graves quemaduras que sufrió en las explosiones generadas por una fuga de gas que ocurrieron el fin de semana en una ciudad del centro de México, con lo que se elevó a dos el número de fallecidos que dejó el incidente, anunciaron el jueves autoridades estatales.

La víctima tenía 62 años y se encontraba en cuidados intensivos desde el fin de semana con quemaduras de segundo y tercer grado en 72% de la superficie corporal. Falleció la noche del miércoles, dijo a la prensa el secretario de salud del estado de Puebla, José Antonio Martínez García.

La fallecida era una de los 18 heridos que dejaron las cuatro explosiones de diferentes magnitudes e incendios que ocurrieron la madrugada del 31 de octubre en la barriada San Pablo Xochimehuacan de la ciudad de Puebla a consecuencia de una fuga de gas que se presentó en una toma clandestina. En las explosiones murió un hombre.

Martínez García indicó que aún se mantienen en centros de salud 13 heridos, de los cuales cuatro permanecen entubados en condición “muy grave” y otros seis están delicados.

Las explosiones afectaron unas 183 viviendas en San Pablo Xochimehuacan que sufrieron colapsos en parte de sus estructuras. Varios centenares de personas debieron ser desalojadas de la zona y llevadas a refugios mientras se remueven los escombros del área afectada por las explosiones que alcanzaron un radio de 800 metros.

De acuerdo con la evaluación realizada por la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), la fuga de gas se presentó en una toma clandestina de combustible que fue localizada a 3,5 metros de profundidad.

En México ha proliferado el robo de hidrocarburos, sobre todo de petróleo, y Puebla es uno de los estados más afectados, pues se encuentra entre la capital y la zona petrolera del Golfo de México.

Los criminales perforan los ductos pese a los riesgos que eso provoca. Uno de los sucesos más graves fue en enero de 2019 en Tlahuelilpan, al norte de Ciudad de México, donde murieron más de 130 personas, muchas de las cuales fueron afectadas porque tras detectarse la fuga de combustible acudieron a llenar garrafas de gasolina y quedaron atrapadas en el incendio.

El presidente Andrés Manuel López Obrador emprendió, desde que asumió el gobierno en 2018, una lucha contra el millonario negocio del robo de combustible y desplegó a miles de militares para custodiar los ductos.