Calibre 45
En la ficción política, Marcelo Ebrard llamó al presidente de la república desde Washington para poner los puntos sobre las íes: “¿Quién se va a hacer cargo de las negociaciones con Estados Unidos? ¿La embajadora o yo?”
En la ficción política, Marcelo Ebrard llamó al presidente de la república desde Washington para poner los puntos sobre las íes: “¿Quién se va a hacer cargo de las negociaciones con Estados Unidos? ¿La embajadora o yo?”
Solo era cuestión de tiempo para que México se alineara a la política migratoria de Estados Unidos. La paradoja es que le tocó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador dar el paso ante el chantaje de Donald Trump.
El pasado 27 de mayo se publicaron en el Diario Oficial de la Federación las leyes reglamentarias en materia de Guardia Nacional, que fueron aprobadas por poco en unanimidad en el Congreso de la Unión.
Las razones de Trump para amenazar a México con el alza de las tarifas comerciales tienen que ver con su reelección. Lo sabe él, lo sabemos todos. El primer incremento, del 5%, programado para el 10 de junio, y justo ocho días después haría pública su decisión de lanzar su reelecciòn.
Tanto la Presidencia de la República como el Instituto Nacional de Acceso a la Información niegan haber filtrado el documento, como si el pecado fuera dar a conocer el manejo de dinero público y no ese infame revoltijo que lesiona la buena fama de quienes legítimamente la tienen.
Además del proyecto de Ley Federal de Austeridad Republicana del Estado, pendiente de aprobación por el Senado, el Presidente de la República firmó el 3 de mayo un Memorándum que restringe aún más los gastos de los miembros de la Administración Pública.
Las manifestaciones de extrema derecha celebradas en Brasil el pasado fin de semana contra las decisiones del Congreso y del Tribunal Supremo constituyen un preocupante indicio de inestabilidad institucional en el país más grande de Sudamérica, que ha vivido una convulsa etapa en los últimos años.
Las grandes corporaciones suelen aprovechar su envergadura económica para intervenir en política y obtener regulaciones beneficiosas. Pero cuando al tamaño de las empresas se suman la corrupción y el subdesarrollo institucional de los países donde operan el resultado es criminal.
La falta de credibilidad de los medios es una realidad. Según un sondeo de la agencia Parametría presentado en 2017, apenas el 18 por ciento de los mexicanos confía en ellos, porcentaje bastante menor al de los que creen en el ejército, la Iglesia o el mismísimo IMSS, lo que ya es grave...
Los números y cuadrículas de Raquel matan. Los recortes que está haciendo en su cuaderno de matemáticas para cumplir con el mandato presidencial de ahorrar, controlar el gasto y combatir la corrupción están por convertir el país en una funeraria.
Y eso hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia de prensa del jueves, cuando acusó a la prensa de pertenecer al hampa –y sugerir que la crítica es una acción delictiva–, por recoger la crisis del sector salud bajo el enfoque de la austeridad.
Forman un ejército de decepcionados, de frustrados. Cruzaron la frontera para unirse a la cruzada de Juan Guaidó, dejaron atrás todo y pusieron sus vidas en riesgo, y tres meses después les anuncian que se deben unir a la legión de simples emigrantes.
El asesinato de Gilberto Muñoz Mosqueda, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Química, Petroquímica, Carboquímica, Energía y Gases, no mereció una sola mención o frase de reprobación por parte del Presidente de la República.
¿Por qué no quiere ir el presidente López Obrador a la reunión del G20 en Osaka, Japón? Argumentar que está muy ocupado con la agenda interna es ridículo, como si los otros mandatarios estuvieran en un lecho de rosas. México pierde mucho si no va.
Juego de Tronos entró en una inédita temporada en México con la victoria de López Obrador. Por primera vez un partido distinto al PRI y al PAN –MORENA- ocupa la presidencia. Su Plan de Desarrollo 2019-24 fija como objetivo el desarrollo incluyente, sostenible y abatir la violencia.
Algunos me dicen que uso expresiones fuertes contra el Presidente. Es cierto, pero debe considerarse que él no respeta la ley, ni a las instituciones —empezando por la que encarna— ni a los gobernados, sean los que pensamos diferente o los acarreados que a mano alzada le confirman caprichos.
Rara es la semana en la que no se discuta, en México y otras geografías, la relación que guardan los medios de comunicación con el poder. El debate es casi rutinario y, sin embargo, no deja de proporcionarnos de tanto en tanto alguna sorpresa, cuando no un franco sobresalto.
El 1 de mayo, Día del Trabajo, el Presidente de la República hizo dos anuncios importantes. Festejó la aprobación de la Reforma Laboral y anunció que se iniciarían las excavaciones para rescatar los cuerpos de los 65 mineros que quedaron enterrados en la mina de Pasta de Conchos.
El gran problema del país es la inseguridad, los indicadores son contundentes, es la realidad caótica que hace aflorar las carencias del gobierno mexicano desde hace algunos sexenios, porque la violencia no se ha frenado con todo y la guerra contra el narco emprendida hace una década.
Con los programas de bienestar, aclaró en su conferencia de prensa mañanera ayer lunes desde Veracruz, se permitirá “alejar a los jóvenes del mal camino. Con su atención se garantiza que no sean jalados por bandas del crimen organizado”.
Lucha contra los agravios legítimamente combatidos y lamentados por una mayoría de la sociedad mexicana. Busca en los anhelos o exigencias de esa mayoría las soluciones para expiar los pecados anteriores y transformar el mundo.
En días recientes el presidente Andrés Manuel López Obrador ha desatado varias críticas y debates en redes, fundamentalmente en torno a dos temas: el primero la libertad de prensa y el derecho de réplica; y el segundo respecto al memorándum para “cancelar” la reforma educativa.
Es un dicho común entre los mexicanos: “prometer es fácil, cumplir no tanto”, pero para el gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, más que un dicho parece ser un hecho. A más de cuatro meses de estar operando muestra inconsistencia entre sus propuestas y el cumplimiento de éstas.
Tras el arresto del fundador de WikiLeaks Julian Assange en Londres, su abogado rápidamente denunció que se estaban comprometiendo los derechos de los periodistas de todo el mundo que tratan de destapar secretos.
El problema con la realidad es que es muy terca. Más tardó en salir el programa de becas para los jóvenes propuesto por el nuevo presidente de México que empresas dedicadas a ofrecerle a los muchachos no trabajar a cambio de un “moche”.
La anomalía que veían los economistas se disolvió. Se preguntaban, ¿cómo es posible que baje el consumo en todos los rubros, haya inflación y desempleo creciente y la confianza del consumidor sea positiva?
Se cansó de censurar al anterior gobierno con la visita del yerno presidencial de nuestro país vecino, aun cuando se trató de una visita formal y pública, a diferencia de la que López Obrador tuvo en lo oscurito, en casa de un empresario de Televisa y sin informar detalles de lo ahí tratado.
Nadie en el mundo podría concluir que las caravanas de migrantes centroamericanos con rumbo a la frontera con Estados Unidos conforman una “emergencia nacional”. Millones de personas sin visa buscan cada año pasar esa frontera, por lo cual, emergencia no es.
En los 90 algunos definían a Rusia como “Haití con bombas atómicas” y se decía que los submarinos nucleares rusos no eran una amenaza militar, sino un peligro medioambiental. El fracaso de la Unión Soviética fue una gran humillación para el nacionalismo ruso.
Kushner fue muy específico, según minutas del encuentro. Si México resuelve los problemas de la migración desde Centroamérica, Estados Unidos estará dispuesto a ayudar a López Obrador con sus problemas económicos.
“La reforma educativa propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador es histórica”, aseguró (2019) el diputado federal Mario Delgado Carrillo, pidiendo a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) apoyo para esa reforma, “pues respeta derechos laborales..."
Hace cuatro años que Alain Rouquié (Millau, 1939) no visitaba México. En 1964, el politólogo francés llegó por primera vez fascinado por una democracia a modo sustentada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
"Por lo visto", dijo, "a Blair le resulta bastante fácil lamentar acontecimientos prudentemente lejanos, por los cuales no le toca ninguna responsabilidad moral. Pero se empeña en no pedir disculpas al pueblo iraquí por haberles sometido a una guerra injusta".
La revocación de mandato es un mecanismo de participación, un método de democracia directa mediante el cual la ciudadanía puede remover a un funcionario con un mandato vigente. Lo que se juzga es el desempeño del político durante el tiempo en que ha ejercido sus funciones.
Obnubilado por el efecto de una deficiente traducción de la votación popular en las curules y los escaños de las cámaras de diputados y de senadores, nuestro Poder Legislativo pretende avanzar hacia la modificación de la Constitución para introducir la revocación del mandato presidencial.