Punto de Vista
El pueblo es quien paga
José Manuel Rodríguez Solar
La espectacular guerra que libra Estados Unidos en Irak la estamos pagando todo el mundo y la financian todas las naciones. La guerra de Irak devora cientos de miles de millones de dólares anualmente que se toman de los mercados financieros mediante la emisión de deuda pública o emisiones extraordinarias de dólares que con "manga ancha" y sin ningún tope ni límite emite los Estados Unidos, patrón del dólar que "hoy por hoy" domina al mundo.
Pero, ante los eventos que salen a la superficie, sobre el manejo de las finanzas y las cuentas públicas, la confianza en el dólar y los Estados Unidos se deteriora aceleradamente a niveles mínimos cada día. Frente al oro supero la barrera de los 1,000 dólares hace menos de 6 meses. Con relación al Euro toco los 1.60 dólares por cada uno. Con el petróleo se devaluó hasta tocar los 150 dólares el barril.
Estos tres indicadores nos dan la pauta de la debilidad del dólar. Las tasas de interés comienzan a subir a la par que la inflación. Muchos inversores han perdido sus ahorros y la confianza en los mercados. El Gobierno de EU inyecta cientos de miles de millones para sortear la crisis. Expertos ven paralelos de Gran Depresión en crisis EU. La actual crisis es la peor desde la Gran Depresión, según El premio Nóbel de Economía, Joseph Stiglitz.
Estas son las tendencias y las expectativas sobre Estados Unidos y el dólar de las que dan cuenta los medios de comunicación, solamente que aquí no están regadas ni se han ido al cesto de la basura.
Tampoco se puede seguir ocultando que Estados Unidos es el país del mundo que estaría más quebrado si se le ajustaran las cuentas o si se le hiciera una auditoria. Por cada dólar circulando no habría ni un centavo en la reserva federal para respaldarlo. Es sin lugar a dudas el más dependiente de los capitales, mercancías y bienes externos. La fortaleza del dólar radica en las tesorerías de todos los países miembros del FMI que están "casi" obligadas a invertir sus reservas y los superávit en los bonos del tesoro y de deuda de los EU, y esto hace que el dólar se mantenga a flote sucumbiendo a todo tipo de vaivenes. Es en síntesis el país que más compra pero el que más queda a deber. Su deuda pública es más cuantiosa que toda las que suman los países europeos, sin incluir inversiones, depósitos ni reservas que tienen a su cargo.
Ahora estamos viendo como los contribuyentes norteamericanos comienzan a sentir las consecuencias del despilfarro y los derroches de dinero que ha hecho el gobierno para financiar las guerras y conflictos que enfrenta en el mundo, financiamiento que se le hizo fácil tomar de la banca y de los inversionistas. Por lo tanto las dificultades por las que atraviesa el sistema financiero no son casuales ni fortuitas y tienen su origen muy bien definido. Por eso algunos bancos e hipotecarias comenzaron a "quebrar", entre los que se encuentran los que se creían más solventes. Estos mismos "apuntalaban" al gobierno con fondos de los depósitos del público inversionista o ahorradores y por eso el apoyo gubernamental no se hace esperar con los apoyos que provienen desde la casa blanca para rescatarlos de las "subprime", que es la versión norteamericana del "Fobaproa" mexicano o del "corralito" argentino.
Finalmente resulta que el costo de las guerras y guerrillas que vemos que se libran alrededor del mundo son el contrapeso y causa de que la economía mundial se encuentre en franca decadencia, después de soportar y apuntalar al dólar, ya sea con inversiones, o a través de su déficit en la balanza comercial o de pagos. Mientras dure la ocupación y la guerra en Irak el mundo seguirá financiándola con tal astringencia económica y financiera.
El dólar tiene además a su favor que es la moneda de circulación y tránsito mundial establecida casi como riguroso medio de pago en los mercados comerciales, financieros, monetarios y bursátiles. Por si fuera poco, también el dólar es la moneda en la que se refugian los grandes millonarios del mundo. Por todo esto se ha mantenido fuerte el dólar. El Euro ahora aparece como su rival y más fuerte competidor. Y el oro brilla como una varita mágica para medir y ajustar a todas las monedas y que vuelva a ser el "patrón oro" ante el caos y la anarquía que priva en los mercados financieros y monetarios.
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