Policrato Philodemos
Terrorismo
Un análisis iconoclasta
En el universo todo efecto tiene una causa que lo provoca el conocimiento consiste en saber la causa que produce tal efecto.
En la sabiduría tradicional se dice que en el correcto planteamiento y enunciado de un problema se encuentra el 50% de su solución, lo anterior viene al caso ahora que los actos de terrorismo se están manifestando de manera globalizada, así como su condena general y estrategias para combatirlo, pues se han convertido en el tema que llena todos los espacios informativos del mundo y es materia de análisis y de artículos de opinión, escritos por analistas políticos y estrategas militares, que han invadido los medios de divulgación en el ámbito internacional.
Cabe señalar de manera anticipada que el autor de estas reflexiones condena de antemano todo acto terrorista, porque estoy a favor de la vida y de la paz, y porque el terrorismo siempre siega vidas inocentes y destruye el patrimonio de amplios sectores de población, que no tienen relación alguna con los fines perseguidos por las organizaciones que perpetran estos actos vandálicos.
Sin embargo es de estricta lógica que para entender y combatir al terrorismo se hace necesario escudriñar en las raíces mismas de las causas que lo originan, ya que la mayor estupidez que se ha venido cometiendo para combatirlo es utilizar sus mismos métodos violentos, dejando intocadas las causas que lo hacen aparecer como ha sido la estrategia seguida hasta la fecha, lo que solamente ha conseguido crear una escalada de violencia que se realimenta a sí misma, iniciándose así un juego perverso y paranoico entre quienes buscan protegerse con medidas preventivas de naturaleza policíaca generalmente violatorias de los derechos ciudadanos, y que finalmente han creado un ambiente político-social propicio al autoritarismo gubernamental, o peor aún, a guerras que con el pretexto de vengar los agravios de la nación afectada, llevan a invasiones militares genocidas que se aprovechan para encubrir hegemonías planetarias y desatan las codicias latentes para controlar las riquezas de los países escogidos como "chivos expiatorios".
En primer lugar es necesario definir ¿ Qué es el terrorismo ?... ¿ Cuales son las causas que lo originan ?... con el fin de entender perfectamente la naturaleza de este fenómeno de violencia espectacular indiscriminada y descubrir las condiciones que la crea, ya que si se modifican esas condiciones el fenómeno desaparecerá por sí solo al anularse las causas que lo originan y alimentan.
Podemos definir al "Terrorismo", como la acción esporádica y espectacular de carácter violento e indiscriminado contra una sociedad, que siempre lleva al exterminio de vidas o a la destrucción de bienes.
El terrorismo se diferencia del genocidio por el hecho de que en este último la violencia no busca ser espectacular y siempre tiene como finalidad, la aniquilación de manera sistemática y permanente de un grupo étnico, cultural o religioso, desde el poder de un gobierno.
Por definición cabe señalar que el terrorismo siempre es el recurso extremo de los grupos marginados cuyas voces no han sido escuchadas, razón por la que siempre busca la espectacularidad de la violencia de sus actos como un reclamo para que se oigan y conozcan sus demandas, o bien para infundir el pánico en la sociedad y obligar a un cambio en la situación existente que los relega como marginados.
Aunque el terrorismo no es un fenómeno nuevo en la historia humana, la globalización y el desarrollo tecnológico actual han influido radicalmente en la movilización internacional que tiene hoy en día, así como en el aumento de capacidad destructiva que ha alcanzado, circunstancia que lo ha convertido en un problema mundial que afecta a todos los países.
Las naturaleza de las demandas de los grupos terroristas es muy diversa, ya que siempre se tratará de marginados políticos, étnicos, o religiosos a los que no se les ha hecho caso o que se han visto arrinconados hasta la desesperación, convirtiéndolos en fundamentalistas de su causa, que por lo mismo declaran inviable para ellos obedecer el estatus legal de la sociedad y autoridades que no escucharon sus demandas iniciales, son grupos que en su desesperación están dispuestos a todo tipo de vandalismo espectacular para conseguir sus fines.
Como fue señalado anteriormente, la respuesta violenta del estado a los actos terroristas solo lleva a una espiral de violencia que se realimenta a sí misma, iniciando una escalada de venganzas mutuas que vuelven inacabable el problema por reducirlo a la ley universal de la reciprocidad, o ley del Talión que aplica el "ojo por ojo y diente por diente" entre el gobierno que no supo escuchar ni prevenir negociando, y los grupos marginados convertidos en terroristas.
Si la causa principal del terrorismo es la marginación de minorías, la solución del problema del terrorismo tendrá que ser la negociación con esas minorías antes de que sus miembros, al no ser escuchados, se conviertan en fundamentalistas de su causa y busquen el espectáculo de la violencia indiscriminada capaz de sacudir a la sociedad entera, como una forma extrema de hacer oir sus demandas sin importar si en ello dejan una estela mortal de víctimas inocentes y de destrucción de patrimonios.
Ante este panorama de violencia terrorista y de reacciones guerreras para combatirla, surge preguntas obligadas cuyas respuestas estarán condicionadas por la posición que asuma cada uno que las responda ¿ A quien debemos culpar de la aparición del terrorismo ?... ¿ A los gobiernos que no atienden los reclamos de sus minorías ?... ¿ O a los fundamentalistas marginados que utilizan la violencia espectacular como medio para hacerse oir ?... ¿ Que no se tratará de un juego perverso de complicidades para encubrir fines inconfesables ?
AAG
