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"Hay que respetar al árbitro y que nadie pretenda manchar esta jornada bella": Nicolás Maduro

2024-07-29

Sin embargo, el aspirante a la reelección condicionó cualquier conversación...

Por | BBC News

Diálogo. Esto prometió Nicolás Maduro nada más ser declarado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), organismo controlado por el oficialismo, como el ganador de las elecciones presidenciales en Venezuela.

Sin embargo, el aspirante a la reelección condicionó cualquier conversación con sus adversarios a que éstos acaten "la decisión del pueblo del 28 de julio".

La oposición, por su parte, ha puesto en duda los primeros resultados oficiales y denunció una serie de irregularidades, entre ellas que a sus testigos les fue negada la posibilidad de acceder a las actas de los escrutinios, en violación a lo que prevé la ley electoral.

"Hay que respetar esta Constitución. Hay que respetar al árbitro y que nadie pretenda manchar esta jornada bella que tuvo el pueblo de Venezuela", dijo Maduro en un discurso ante sus seguidores reunidos en el Palacio de Miraflores en la madrugada del domingo al lunes.

De acuerdo con los resultados oficiales anunciados por el presidente del CNE, Elvis Amoroso, luego de escrutadas el 80% de las mesas ya había una tendencia "contundente e irreversible" que le otorgaba a Maduro un apoyo del 51,20% (5.150.092 votos), frente al 44,2% (4.445.978 votos) obtenido por el candidato de la opositora Plataforma Unitaria, Edmundo González Urrutia.

Lo que se viene

Maduro aseguró que trabajará para ejecutar los cambios que requiere Venezuela.

“En este nuevo mandato que ustedes me han dado, que ustedes se han dado a sí mismos, les juro que daré mi vida entera por llevar adelante todos los cambios y transformaciones que necesita nuestra patria para enrumbarse hacia un destino de prosperidad , de crecimiento, de paz, de felicidad social, para rescatar todos los derechos vulnerados por la guerra económica, por los misiles imperialistas”, dijo.

El líder bolivariano aseguró que no esperará al 10 de enero, cuando se inicia el nuevo período presidencial, para comenzar a trabajar.

Así, anunció que ya mismo dictará un "primer decreto" con el cual convocará a “un gran diálogo de entendimiento, de debate nacional y de nuevos consensos alrededor del plan de las 7T (por las siete transformaciones) con todos los sectores económicos, sociales, culturales y políticos de todo el país".

Maduro aseguró que la recuperación económica será su prioridad, pero también anunció nuevas conversaciones con sus adversarios, aunque con condiciones.

"Punto de partida, que respeten la Constitución y las leyes, que respeten a las instituciones y al pueblo y que no estén convocado a golpes de Estado. Que respeten la decisión del pueblo de este 28 de julio”, agregó.

Esta no es la primera vez que Maduro convoca a sus opositores a diálogos.

A finales del año pasado, el oficialismo y la llamada Plataforma Unitaria Democrática mantuvieron negociaciones que terminaron con la firma del llamado Acuerdo de Barbados, el cual buscaba asegurar la transparencia de los comicios celebrados este domingo.

Sin embargo, a lo largo de los últimos meses las partes se han acusado mutuamente de violar dicho pacto.

Asimismo, Maduro anunció que el decreto que firmará incluirá la convocatoria de "elecciones generales" para el próximo 25 de agosto. La figura de las "elecciones generales" no está prevista en la Constitución venezolana.

En este proceso, por lo que explicó el gobernante, las comunidades elegirán los "proyectos" que desean que el gobierno ponga en marcha.

Nuevos complots y ataques

Tras asegurar que la demora en la publicación del primer boletín con los resultados oficiales fue producto de un "hackeo brutal", Maduro señaló que su gobierno desarticuló un plan para atentar contra los comicios.

"No lo dije pero (...) en días anteriores (...) capturamos, están convictas y confesas, a varias personas que querían quemar centros electorales y le he pedido a la Fiscalía mano de hierro con los terroristas y con los guarimberos (manifestantes violentos)", afirmó.

Hasta ahora la Fiscalía venezolana no ha informado sobre ninguna detención relacionada con ninguna conspiración. Y, por el contrario, su máxima autoridad, Tarek William Saab, calificó de "ejemplo para el mundo" los comicios celebrados este domingo.

Maduro también dejó entrever que el presunto ataque cibernético contra el sistema electoral era parte de un plan de la oposición para denunciar fraude y justificar acciones violentas.

"¿Por qué querían impedir que el pueblo tuviera sus resultados? ¿Quién está detrás de esto? Para gritar lo que ya estaba cantado: fraude. Esta película la he visto varias veces", dijo.

En las elecciones presidenciales que se celebraron anticipadamente en 2013, luego del fallecimiento de Hugo Chávez, el candidato opositor Henrique Capriles Radonsky puso en duda los resultados del CNE que dieron la victoria a Maduro por estrecho margen. Esto, tras denunciar una serie de irregularidades que jamás fueron investigadas.

Ahora los resultados oficiales también han sido rechazados por la oposición. Su líder, María Corina Machado, afirmó que el abanderado Edmundo González Urrutia fue quien en realidad ganó con un 70% de los votos.

"Hay un nuevo presidente electo y es Edmundo González", dijo Machado.

"Esto no es un fraude, es desconocer y violar la soberanía popular. No hay manera que ellos puedan justificar eso. No con la información que tenemos", añadió.

Machado dijo que la oposición monitoreó el proceso a lo largo de todo el día y que los resultados a los que se refirió estaban respaldados por encuestas a pie de urna y conteos rápidos independientes, así como por todas las actas que había transmitido el CNE.

Varios gobiernos latinoamericanos como los de Chile, Perú y Costa Rica cuestionaron los resultados anunciados.

"El régimen de Maduro debe entender que los resultados que publica son difíciles de creer. La comunidad internacional y sobre todo el pueblo venezolano, incluyendo a los millones de venezolanos en el exilio, exigimos total transparencia de las actas y el proceso, y que veedores internacionales no comprometidos con el gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados", dijo el presidente de Chile, Gabriel Boric.



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