Policrato Philodemos

Los olvidos de nuestros "políticos"

2009-04-02

Un proyecto de nación es la meta hacia donde se debe dirigir la política de un...

"La confusión entre política y "grilla"

Un estadista gobierna pensando en el futuro de su patria,

Un político gobierna pensando en el  futuro inmediato, y

Un "grillo" demagogo actúa pensando en su bolsillo

Observando el comportamiento de nuestros políticos en estos tiempos electorales, encuentro que en casi todos, sin importar la geometría política que dicen seguir como doctrina, asoman los viejos vicios que envilecen un quehacer que debiera orientarse al servicio de la comunidad.

Creo que no todo es culpa de ellos, pues al final de cuentas son hijos de nuestra cultura y del sistema educativo que nos formó a todos los mexicanos, en donde la trampa, la simulación y el engaño, es el bagage heredado y aceptado del cual, a fuerza de su cotidianeidad en el tiempo y en todos los espacios geográficos de nuestro territorio, ya consolidaron una idiosincracia y una inercia difícil de extirpar, a no ser que realicemos una revolución cultural modificando de raíz nuestro sistema educativo desde el jardín de niños hasta las universidades, pasando por el entorno familiar y la porquería de televisión comercial que padecemos.

Sin embargo, y como una aportación para recordar los principios olvidados que rigen a una sociedad sana y a un gobierno verdaderamente democrático, se hace necesario señalar algunos principios elementales sobre la naturaleza que deben tener los políticos y los gobiernos que deciden por todos nosotros, y que actualmente en México imitan al flautista de Hamelin para llevarnos al precipicio de la mediocridad, y para seguir siendo un país subdesarrollado y explotado como colonia tecnológica, por secular seculorum, mientras los dejemos actuar como pandilleros que han tomado al país como su botín, y a nosotros como sus súbditos.

Quiero señalar algunos de los olvidos (sin agotar la lista) principales que han tenido los "políticos" que nos gobiernan, como son los siguientes:

I.- Que no se puede legislar eficientemente sin tener un proyecto de nación

Un proyecto de nación es la meta hacia donde se debe dirigir la política de un país, cuando no se tiene dicho proyecto, las decisiones siempre son inmediatista e improvisadas.- En México han tenido un carácter funesto para el desarrollo, pues cada sexenio se improvisa un país distinto.- No hay continuidad en el esfuerzo porque no se sabe hacia donde nos dirigimos, y el resultado es el subdesarrollo.

II.- Que un país no puede desarrollarse sin atender a la educación y a la investigación científico-tecnológica

Actualmente el conocimiento científico, y su aplicación práctica que es la tecnología, se han convertido en herramientas de dominio de absoluta importancia, como nunca se había presentado en la historia de la humanidad.- En México nunca se le ha dado importancia a este renglón, por lo que la cultura en nuestro país se asemeja a un barco a la deriva, que carece de un derrotero guiado por la ciencia, y del motor (o velamen) de la tecnología, porque se supone que la cultura solo abarca la educación artística (pintura, danza, festivales de cine o de teatro, conciertos musicales, etc.), actividades que enriquecen el espíritu, pero que nunca nos van a sacar del subdesarrollo.

Cuando asistimos a negociar con los demás países, siempre acudimos en posición desventajosa, porque lo único que podemos ofrecer son nuestras riquezas naturales y nuestra mano de obra artesanal o primaria (ambas tienen un nulo valor agregado), lo que impide negociar como pares equivalentes, ya que siempre adquirimos los insumos necesarios para producir bienes industriales, con el alto valor agregado que nos imponen los dueños de las patentes y de las tecnologías.- Un país es tan desarrollado como las herramientas de que disponga para producir bienes de consumo o alimentos, y la tecnología a la que tenemos acceso siempre es de segunda generación, pues entre los países no existe la filantropía y solo exportan aquella que esté por debajo de la que ellos poseen, para evitar una verdadera competencia.- Lo que dicho en otros términos, seguimos siendo una colonia tecnológica por haber olvidado la investigación y el desarrollo en este campo de poder.

III.- Que por atavismos étnicos, sociales y por ignorancia, somos una nación que ha marchado cojeando a través de su historia, olvidando una de las fuentes primordiales de su riqueza, a pesar de ser un país geográficamente privilegiado con fronteras marítimas a todos los continentes del planeta.

En los mares nacionales y zona económica exclusiva yacen riquezas incalculables que podrían darnos la independencia alimentaria que hemos perdido.- En nuestros litorales e islas están pendientes de ocupar innumerables fuentes de trabajo que esperan la presencia del hombre para su explotación sostenible.- Carecemos de una marina mercante y de una flota pesquera de alta mar, ya que la mayoría de nuestros pescadores trabajan la captura litoral y lo hacen de manera artesanal.

IV.- Que en una verdadera democracia el mandatario solamente obtiene el poder que le otorga el pueblo, para que le sirva y no para servirse del mismo.

Quien gobierna tiene más poder que el ciudadano particular, pero siempre menos poder que el conjunto de la ciudadanía, pues la política no es el camino para alcanzar el poder y servirse del mismo, sino el sendero que permite servir a sus mandantes, que son la ciudadanía, desde los puestos para los que son electos por ellos.

V.- Que sería un suicidio hacia el coloniaje y el subdesarrollo permanente, si en nuestro sistema educativo, y en la investigación científico-tecnológica, pretendemos imitar la curva de aprendizaje que han seguido los países, hoy desarrollados, en este campo de poder, pues sería tanto como pretender superar la brecha que nos separa de ellos, partiendo desde una posición muy lejana y al ritmo que ellos la recorrieron.

La única solución viable para alcanzarlos, es la de iniciar nuestro desarrollo a partir de las ciencias de vanguardia, mirando hacia el futuro, no hacia el pasado, esto es, enseñar a nuestra niñez y juventud la ciencia del Siglo XXI, y educar a nuestros niños desde la escuela de párvulos, enseñándoles el placer del conocimiento y la plenitud que conlleva para el individuo el saber aplicarlo para el bienestar general.- Los mejores ejemplos de esta política científico-tecnológica son los países emergentes de Asia (China, Japón, Malasia, Corea del Sur, Taiwán, pero sobre todo la India), en donde le apostaron al desarrollo de la educación científico tecnológica, utilizándola para sustentar su salto hacia la modernidad y para el desarrollo económico-político-social; Sabiendo que si buscaban la equidad social antes de desarrollarse, solo iban a prolongar indefinidamente su condición tercermundista y de explotados tecnológicamente, por lo que decidieron privilegiar la educación y la investigación científico-tecnológica para el mayor grupo de jóvenes posible, hasta donde les alcanzaran sus recursos, con la esperanza de que una vez que se iniciara su independencia en ciencia y tecnología, iban a ahorrar las divisas que antes se fugaban por comprar los insumos en este rubro, con las cuales potencializarían su despegue y les permitiría atender a los más necesitados para alcanzar la equidad socialÂ… tuvieron éxito y ahora están como economías emergentes con un desarrollo superior a nosotros y con menor dependencia del extranjero.

VI.-  Que la función de los legisladores es hacer leyesÂ… sí, pero leyes que respondan a las verdaderas necesidades del país y que lleven el bienestar y la equidad a la población, siempre dentro de un proyecto de nación que pueda ser sustentable, así como representar las justas demandas de la ciudadanía del distrito que los eligió.

La mayor injusticia es la inequidad social y el abismo obsceno de la desigualdad entre las élites que poseen en demasía, y los desamparados que viven en la miseria extrema careciendo de todo.

VII.- Que el bienestar y desarrollo de un país (especialmente México, como país tecnológicamente subdesarrollado y dependiente del exterior en dicha materia), no es solamente un asunto de finanzas.

Como nos lo quieren hacer creer los políticos actuales, que ya parecen haberse convertido en evangelistas del neoliberalismo (sistema nacido en Breton Woods al finalizar la Segunda Guerra Mundial, que ya evidenció su inoperancia con la crisis actual que provocó), se ha olvidado, o se ignora mañosamente para eludir compromisos y responsabilidades, que la mayor riqueza de un país es su población y que entre más preparada sea esta, el país será más rico porque su pueblo tendrá mayor capacidad de crear riqueza, pero los políticos tradicionales le temen a ese tipo de ciudadanía, ya que una ciudadanía preparada y culta es más exigente y pide cuentas a quienes la gobiernan, de ahí nace el abandono educativo en México, porque los políticos tradicionales quieren ser rabadanes de hatos de ganado, no dirigentes de ciudadanos responsables y políticamente exigentes. Los ejemplos internacionales de lo anteriormente expuesto están a la vista, como son los países europeos que pudieron remontar rápidamente la devastación y miseria que les dejó como secuela la Segunda Guerra Mundial a mediados de los años cuarenta del siglo pasado, y actualmente son ejemplos de lo mismo los llamados "Tigres asiáticos" que participan fuertemente en ciencia y en tecnología, además de ser poderosos financieramente.



EEM

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