Una Luz en Mi Ventana
Octubre, mes del Rosario (2a. parte)
Guadalupe García
Si bien el origen del rosario se remonta casi hasta el año 800, con el paso del tiempo ha ido cambiando hasta llegar a la manera en cómo la rezamos hoy en día. Este nos invita a hacer una hermosa meditación sobre la vida de Jesús y de Santa María. Solos o acompañados podemos ofrecer nuestra oración por muchas intenciones pidiendo la intercesión de Nuestra Madre.
El rosario en su forma actual fue entregado por la misma Virgen María a Santo Domingo de Guzmán en el año 1214. Se lo entregó para dar batalla a los herejes y pecadores de aquellos tiempos y además le encomendó que enseñara a rezarlo y a propagar su devoción. Un mandato que sigue vigente y nos compete a todos los católicos. Desde aquellas épocas los cristianos lo rezamos acompañado de la meditación de 15 misterios sobre la vida de Nuestro Señor Jesús y de Santa María. Y, en el año 2002 el Papa Juan Pablo II introdujo 5 misterios adicionales: los Misterios Luminosos. Hoy son 20 misterios los que meditamos.
CÓMO SE REZA
El modo de rezarlo es el siguiente:
1: hacemos la señal de la cruz en frente, boca y pecho mientras decimos “Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos, Señor Dios nuestro. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.”
Ahora se reza el acto de contrición (Señor mío Jesucristo).
2: recitamos la siguiente Oración:
“Abre tú, Señor, mis labios y mi boca cantará tus alabanzas. Ven oh Dios en mi auxilio. Señor, date prisa en socorrerme.”
“Gloria al Padre, al Hijo y al Espírito Santo. Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén."
3: se enuncia el misterio correspondiente a ese día, se medita en silencio brevemente y se comienza a rezar la decena: 1 Padrenuestro, 10 Avemarías y 1 Gloria al Padre. Hay quien ofrece cada misterio o bien todo el rosario por una intención concreta.
4: Al terminar cada decena se recita una de estas oraciones:
“María, madre de gracia, madre de piedad y misericordia: defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la ora de nuestra muerte. Amen.”
“Oh Jesús mío, perdona nuestros pecados y líbranos del fuego del infierno, lleva al cielo a todas las almas y socorre especialmente a las más necesitadas de tu misericordia. Amén.”
5: Al terminar el 5º misterio se rezan 3 Padrenuestros por estas intenciones:
1-Por las necesidades de la Iglesia y del Estado.
2-Por el señor obispo de esta diócesis.
3-Por las benditas almas del purgatorio.
6: Y a continuación las letanías:
Dios te salve María, Hija de Dios Padre, llena eres de gracia….
Dios te salve María, Madre de Dios Hijo, llena eres de gracia…
Dios te salve María, Esposa de Dios Espíritu Santo, llena eres de gracia…
Dios te salve María, Templo y Sagrario de la Santísima Trinidad llena eres de gracia…
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo óyenos,
Cristo escúchanos,
Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros
Dios Hijo redentor del mundo,
Dios Espíritu Santo,
Trinidad santa, un solo Dios
Santa María, Ruega por nosotros
Santa Madre de Dios,
Santa Virgen de las vírgenes,
Madre de Cristo,
Madre de la Iglesia,
Madre de la divina gracia,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre virginal,
Madre inmaculada,
Madre amable,
Madre admirable,
Madre del buen consejo,
Madre del Creador,
Madre del Salvador,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen poderosa,
Virgen clemente,
Virgen fiel,
Espejo de justicia,
Trono de la sabiduría,
Causa de nuestra alegría,
Vaso espiritual,
Vaso digno de honor,
Vaso insigne de devoción,
Rosa mística,
Torre de David,
Torre de marfil,
Casa de oro,
Arca de la alianza,
Puerta del cielo,
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consuelo de los afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los ángeles,
Reina de los patriarcas,
Reina de los profetas,
Reina de los apóstoles,
Reina de los mártires,
Reina de los confesores,
Reina de las vírgenes,
Reina de todos los santos,
Reina concebida sin pecado original,
Reina elevada al cielo,
Reina del santísimo rosario,
Reina de las familias,
Reina de la paz.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, ten misericordia de nosotros.
Oración:
Bajo tu amparo nos acogemos, santa Madre de Dios; no desprecies nuestras súplicas en nuestras necesidades, antes bien, líbranos de todo mal, Virgen gloriosa y bendita. Ruega por nosotros, santa Madre de Dios, para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro señor Jesucristo. Amén.
Te suplicamos, Señor, que derrames tu gracia en nuestras almas, para que los que por el anuncio del ángel hemos conocido la Encarnación de tu Hijo Jesucristo, por su pasión y cruz seamos llevados la gloria de su resurrección. Por Jesucristo nuestro señor. Amén.
JMRS