Internacional - Seguridad y Justicia

Estados Unidos pide a sus ciudadanos que abandonen Ucrania en un plazo máximo de 48 horas

2022-02-11

Además de Estados Unidos, un nutrido grupo de países pidieron a lo largo del viernes...

Amanda MarsRaúl Sánchez Costa | El País

Washington / Bucarest - Estados Unidos eleva el nivel de alarma respecto a Ucrania. Las nuevas maniobras militares de Rusia en la frontera de Bielorrusia han acrecentado el temor a un ataque desde dicho flanco y la Administración de Joe Biden ha redoblado este viernes su llamamiento a los ciudadanos estadounidenses que se encuentran en suelo ucranio a que abandonen el país “en las próximas 24-48 horas” porque la crisis puede desbordarse en cualquier momento y no se enviarán tropas a evacuarlos. El secretario de Estado, Antony Blinken, aseguró que el Kremlin podría decidir la invasión de la antigua república soviética “en cualquier momento, incluso durante los Juegos Olímpicos” de Invierno en Pekín, que se celebran hasta el 20 de enero.

El consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, insistió en que no tiene constancia de que Vladímir Putin haya tomado ya una decisión sobre un ataque, pero dejó claro que las circunstancias han cambiado en las últimas horas y que el despliegue de fuerzas rusas ha escalado de tal modo que “hay una posibilidad muy concreta de un ataque en cualquier momento” y que “un asalto rápido” a la capital, Kiev, “es posible”.

Además de Estados Unidos, un nutrido grupo de países pidieron a lo largo del viernes que sus nacionales abandonen Ucrania. Se trata de Reino Unido, Letonia, Holanda, Japón Corea del Sur y Noruega. La Unión Europea dejará abandonar Ucrania al personal diplomático no esencial, tras revisar la situación en el país, en plena tensión con Rusia por el despliegue militar en la frontera ucrania. “No estamos evacuando”, aseguró Peter Stano, portavoz de Exteriores de la Comisión Europea, “por el momento, se ha dado al personal no esencial la oportunidad de teletrabajar desde fuera del país”. “Seguimos evaluando la situación a medida que se desarrolla, en consonancia con el deber de atención que tenemos hacia nuestro personal y en estrecha consulta y coordinación con los Estados miembros de la UE”, añadió, según informa desde Bruselas Guillermo Abril. Israel, por otra parte, ha pedido que dejen el país los familiares de los diplomáticos.

“Hay signos de una escalada rusa. Estamos en una ventana en que la invasión puede empezar en cualquier momento”, señaló Antony Blinken, que se encuentra de viaje por Asia. La noche anterior, el presidente lanzó duras advertencias, con el tono más grave utilizado hasta ahora. “Estamos lidiando con uno de los mayores Ejércitos del mundo”, señaló, “las cosas podrían descontrolarse muy rápidamente”, añadió, y apeló a los estadounidenses a “marcharse, marcharse ahora”. “Si los estadounidenses y los rusos empiezan a dispararse unos a otros, es una guerra mundial”, aseguró, “estamos en una situación muy diferente de las que hemos visto en el pasado”.

Hasta ahora, Washington ha señalado que no creía que Putin hubiera decidido invadir Ucrania, pero que sí había preparado sus fuerzas para hacerlo, aunque en las últimas horas . También ha insistido en que el abanico de agresiones posibles era variado y que podía constituir una invasión propiamente dicha. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, se expresó en este sentido este viernes desde Rumania, donde hizo una visita relámpago como una nueva señal de apoyo.

“Existe el riesgo de una invasión a gran escala, pero también de otras acciones agresivas, como el derrocamiento del gobierno en Kiev o ciberataques”, remarcó Stoltenberg en una rueda de prensa conjunta con el presidente de Rumania, Klaus Iohannis, durante su visita a la base militar aérea Mihail Kogălniceanu de Constanza, en el este del país. El secretario general de la organización atlántica ha puntualizado, sin embargo, que la OTAN “no tiene certeza en este momento de lo que sucederá”.

Biden organizó este viernes una llamada con líderes de países pertenecientes a la OTAN y europeos para abordar las novedades y coordinar su estrategia. En concreto, la llamada participaron los miembros europeos del G-7 -el canciller de Alemania, Olaf Scholz; el presidente de Francia, Emmanuel Macron; el primer ministro británico, Boris Johnson; su homólogo canadiense, Justin Trudeau, y el primer ministro italiano, Mario Draghi-, así como los de países limítrofes, los de Polonia, Andrzej Duda, y de Rumania, Klaus Iohannis. También lo hicieron el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.

Von der Leyen “describió el estado de las sanciones sectoriales e individuales en caso de una agresión militar más por parte de Rusia a Ucrania. Reafirmó el hecho de que todas las opciones estaban sobre la mesa y que las sanciones implicarían sobre todo a los sectores financiero y energético, así como a las exportaciones de productos de alta tecnología”, explicó la Comisión Europea en un comunicado.

Washington ha intensificado los contactos diplomáticos con sus aliados. Estas es la primera gran crisis geopolítica global que afrontan los Estados Unidos de Joe Biden -los que habían prometido volver a la multilateralidad y la cooperación tras la era rupturista de Donald Trump- y el fiasco de la salida de Afganistán el pasado verano había puesto en entredicho ese regreso de hijo pródigo.



Jamileth