Internacional - Economía

Fallece el secretario general de la OPEP, Mohammad Barkindo

2022-07-06

Barkindo se encontraba en las últimas semanas de su mandato de seis años como...

Grant Smith y Salma El Wardany

(Bloomberg) -- El secretario General de la OPEP, Mohammad Barkindo, un veterano de la industria petrolera que condujo al grupo a través de la creación de la alianza OPEP+, falleció en su Nigeria natal a los 63 años de edad.

Barkindo se encontraba en las últimas semanas de su mandato de seis años como máximo diplomático de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, donde dirigía su secretaría con sede en Viena. Había regresado a Abuja para prepararse para una carrera posterior a la OPEP. No se ha entregado una causa inmediata del fallecimiento.

Barkindo supervisó uno de los períodos más turbulentos de la historia de la organización, comenzando con la creación de la coalición OPEP+ solo unos meses después de su nombramiento en el verano de 2016. El nigeriano llevó a cabo una intensa labor de diplomacia itinerante para establecer la antes impensable asociación con los no miembros, presionando personalmente a líderes como el ruso Vladímir Putin.

Su mandato abarcó una serie de recortes de producción destinados a mantener el equilibrio de los mercados mundiales del petróleo, que culminaron en las reducciones sin precedentes durante la pandemia de covid-19 en 2020. Con un estilo cálido y jovial —y su afición a llevar tocados locales en sus visitas a los países miembros de la OPEP+—, Barkindo fue a menudo clave para aliviar las tensiones dentro de la díscola alianza.

“Este es un día muy triste para la familia de la OPEP”, dijo Haitham Al-Ghais, funcionario petrolero kuwaití que se convertirá en secretario general el próximo mes. “Fue sin duda un gran líder del sector y también un amigo. El legado que Mohammad deja tras de sí será recordado en la historia de la OPEP durante muchos años”.

Durante un viaje a Houston en 2017, Barkindo dio el inusual paso de acercarse a los rivales de la OPEP en la industria del esquisto de Estados Unidos, y durante una cena con ejecutivos como Mark Papa y Harold Hamm, estableció una improbable relación que calmó años de acritud entre los productores.

El acto de “partir el pan”, como dijo el nigeriano, se convertiría en una costumbre anual y dio lugar a relaciones duraderas con figuras de la industria. La nueva simpatía de hombres del petróleo como Hamm —que alguna vez despreció a la OPEP como un “tigre sin dientes”— puede haber ayudado finalmente al grupo a sortear las relaciones con el presidente Donald Trump, cuya hostilidad se convirtió en un apoyo entusiasta durante la intervención en el mercado de la OPEP+ de 2020.

“Con su larga y eficaz labor en la OPEP, se ganó legítimamente una gran reputación internacional”, dijo el presidente ruso Vladímir Putin en un discurso dirigido a su homólogo nigeriano, según comentarios publicados en el sitio web del Kremlin. “Mohammed Barkindo siempre será recordado en Rusia como un verdadero amigo de nuestro país”.

Barkindo falleció repentinamente en Abuja, donde se reunió el martes con el presidente de Nigeria, Muhammadu Buhari. Sus planes profesionales tras dejar la organización incluían una beca en el centro de estudios Atlantic Council. Uno de sus últimos viajes fue a Bagdad, donde se fundó la OPEP.

“Barkindo era amigo de Irak y amaba a su pueblo”, dijo el ministro de Petróleo iraquí, Ihsan Abdul Jabbar. “Estaba interesado en fortalecer el papel de la OPEP en la estabilización de los mercados del petróleo ante los desafíos que habían asaltado al sector petrolero y la economía mundial”.



Jamileth