Internacional - Población
Perú ordena a militares custodiar bienes por protesta antiminera
LIMA (Reuters) - Perú ordenó el lunes a sus militares custodiar las instalaciones de servicios básicos en una región del sur del país, fronteriza con Bolivia, en una medida inusual que busca contener las crecientes protestas en demanda por la eliminacion de concesiones mineras.
La protesta, que comenzó hace dos semanas, paralizó el comercio entre Perú y Bolivia a través del bloqueo de una ruta internacional, en el pueblo binacional de Desaguadero, y generó el desabastecimiento de productos básicos.
Los dirigentes de la protesta, en la que participan miles de campesinos de la región de Puno, han dicho que radicalizarán su medida de fuerza el martes con marchas en la zona, según la radioemisora peruana RPP.
La última vez que los militares intervinieron en una manifestación en Puno fue en el 2003, en un sangriento episodio que dejó al menos un estudiante muerto y centenares de heridos.
En el 2009, una violenta protesta en contra de la explotación de recursos naturales en la Amazonía dejó más de 30 policías y nativos muertos y se convirtió en la peor crisis del Gobierno del presidente Alan García.
En Puno operan pequeñas firmas mineras con proyectos de metales preciosos, así como la minera de estaño Minsur, uno de los mayores depósitos de este metal del mundo.
En una resolución firmada por García, el Gobierno dijo que las Fuerzas Armadas podrán intervenir en la zona hasta el 11 de junio para "garantizar el normal funcionamiento" de los servicios públicos esenciales, público o privados en la región de Puno.
La medida implica que los militares deberán custodiar, por ejemplo, instalaciones energéticas y edificios públicos. Sin embargo, el control del orden interno permanecerá a cargo de la policía.
Perú se alista para realizar el 5 de junio la segunda ronda electoral para la presidencia de Perú, en las que disputan la conservadora Keiko Fujimori y el nacionalista de izquierda Ollanta Humala.
El bloqueo en Desaguadero, a 90 kilómetros al oeste de La Paz, perjudicaba a las exportaciones de soja boliviana, que perderían sus embarques en puertos peruanos, utilizados preferentemente por los exportadores agroindustriales de Bolivia, país mediterráneo.
Entre tanto, el desabastecimiento de productos básicos como alimentos y combustibles en ambos lados de la frontera era cada vez mayor, mientras el transporte seguía bloqueado.
La presidenta de la Cámara de Comercio de Puno, Vilma Enriquez, afirmó que las actividades comerciales se encuentran estancadas y hay escasez de productos de primera necesidad.
"Hay indignación en los empresarios por esta situación, por lo que exigimos que se de una solución inmediata", dijo Enriquz a la agencia estatal Andina.
KC
