Internacional - Economía
Donald Trump insiste en que construirá el muro, pero ya no será en este año fiscal
Peter Baker y Jennifer Steinhauer, The New York Times
WASHINGTON — El presidente estadounidense Donald Trump insistió el martes en que sigue comprometido con su controversial plan de construir un muro a lo largo de la frontera con México, a pesar de que pospuso la inclusión de ese proyecto en el próximo presupuesto federal.
El gobierno estadounidense tiene hasta la medianoche del viernes 28 de abril para negociar con los legisladores demócratas y republicanos con el fin de lograr la aprobación del paquete presupuestal.
Si no logran un acuerdo, Trump tendría que enfrentarse al cierre del gobierno federal, lo que implicaría la paralización de buena parte de la administración y los servicios públicos por falta de fondos, como sucedió cuando Barack Obama se enfrentó a los republicanos en 2013 por la implementación de la reforma sanitaria.
Al posponer la inclusión de los fondos para la construcción del muro, parece que Trump logró eliminar uno de los mayores obstáculos para la aprobación de las asignaciones.
Sin embargo, el mandatario no quiere que su decisión sea vista como una señal de que no está comprometido con el proyecto. “No dejes que los medios falsos te digan que he cambiado mi posición con respecto al MURO”, escribió en Twitter el martes por la mañana. “Se construirá y ayudará a detener las drogas, la trata de personas, etc”.
El lunes en la noche, Trump se reunió en la Casa Blanca con un grupo de periodistas conservadores y les dijo que podría aceptar un presupuesto que incluya fondos para la seguridad fronteriza sin centrarse en el muro. Pero el presidente puede retomar su batalla para la construcción del muro durante el próximo año fiscal.
“Construir el muro y poderlo financiar sigue siendo una prioridad para él”, dijo Kellyanne Conway, consejera del presidente, en el programa Fox & Friends el martes por la mañana. “Pero también sabemos que eso puede suceder durante este año o en el próximo. Mientras tanto veremos la implementación de tecnologías inteligentes y otros recursos y herramientas que se utilizarán para la seguridad fronteriza”.
Los demócratas apoyaron la decisión de Trump. “Eso elimina la perspectiva de una pelea innecesaria sobre una propuesta venenosa que no apoyan legisladores de ambos partidos”, dijo el senador por Nueva York Chuck Schumer, líder de la bancada demócrata, minoría en la cámara alta.
La promesa de construir un muro —o más bien extender las barreras físicas que ya existen en algunas zonas de la frontera— fue un tema central de la campaña electoral de Trump. Según el mandatario, el muro no solo protegerá a Estados Unidos de los inmigrantes que cruzan la frontera ilegalmente, sino que México pagaría por la construcción.
Pero las estimaciones de los costos de esa obra han subido y México asegura que no gastará sus fondos en eso.
Sean Spicer, el secretario de Prensa de la Casa Blanca, dijo el lunes que Trump todavía está decidido a lograr que México pague por el muro pero que, en un inicio, el proyecto se financiará con los impuestos pagados por los estadounidenses.
“El presidente ha sido muy claro” al decir que “para que continúe el proceso de seguridad fronteriza y el muro, tendrá que usar el actual proceso de asignaciones”, dijo Spicer. “Pero se asegurará de que esa promesa se mantenga hasta conseguir los fondos”.
Cuando le preguntaron si eso significaba que México pagará por el muro, Spicer contestó: “Eso es correcto”.
Durante la campaña, Trump dijo que el muro costaría 12,000 millones de dólares, pero desde entonces la cifra se ha disparado. Un reciente informe interno del Departamento de Seguridad Nacional estimó que la obra podría costar unos 21,600 millones de dólares. Un nuevo informe emitido por los senadores demócratas la semana pasada aumentó los costos a casi 70,000 millones de dólares.
Incluso sin el muro, los cruces ilegales en la frontera han disminuido de forma dramática. El número de personas detenidas cayó un 40 por ciento entre enero y febrero y disminuyó un 30 por ciento entre febrero y marzo, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
La Casa Blanca lo atribuye a la retórica del presidente y a medidas que endurecen la aplicación de la ley. Desde noviembre, cuando Trump fue elegido, el paso ilegal de personas por la frontera ha disminuido en casi un 75 por ciento.
yoselin
