Nacional - Política
López Obrador avanza con aliada incómoda
Por Marcos Romero
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 26 JUN - El candidato presidencial Andrés López Obrador parece enfilarse cómodamente hacia la victoria en las elecciones del domingo, pero la derecha evangélica, uno de sus "compañeros de viaje", se convirtió en un "aliado incómodo".
El minoritario Partido Encuentro Social (PES), que aglutina a un sector de las iglesias protestantes, es una de las tres fuerzas políticas que apoyan al abanderado de izquierda. Las otras dos son el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que encabeza el aspirante y el Partido del Trabajo.
Muchos analistas se preguntan donde encaja una organización conservadora y religiosa en una alianza formada mayoritariamente por corrientes de izquierda, pero la cabeza visible del PES, Hugo Eric Flores, defiende todas las propuestas de López Obrador, aunque insiste en reivindicar la agenda de su organización.
En sucesivas entrevistas con diversos medios locales, Flores defendió la política de Israel contra los palestinos y consideró que Jerusalén debe ser "la capital de ese país, al tiempo que se manifestó en contra del "matrimonio entre homosexuales".
Flores dijo que "fue un error convertirnos en un Estado ateo" porque "sin Dios en la política no hay moral", lo que puso en guardia a grupos que defienden el laicismo.
Genaro Lozano, un activista por los derechos homosexuales y periodista, calificó de "preocupantes y falsas" las declaraciones del dirigente, al señalar que "el estado laico ha sido parte fundamental del Estado mexicano".
Lozano manifestó su temor de que "al rato el PES exigirá" al futuro presidente "direcciones generales de salud en los estados, la dirección del Registro Nacional de Población o la titularidad o puestos claves en el Consejo Nacional de Población".
"En todos esos lugares pondrá a gente con fe, cuya objeción de conciencia le impida ayudar a una pareja de lesbianas a tener un acta de matrimonio" o relegar a "doctores que sí apliquen la interrupción del embarazo por violación" a hospitales rurales.
"No somos homofóbicos, porque somos de una minoría religiosa", afirmó Flores en sus entrevistas con el diario español El País y el periódico local Enlace Judío. El propio López Obrador señaló que temas como el matrimonio entre personas del mismo sexo o la adopción de niños por parejas homosexuales serán sometidos a consulta, lo que generó rechazo de la comunidad gay, por considerar que en algunas ciudades del país son "derechos adquiridos".
A juicio de Lozano, "abrirle la puerta al PES será un error a la distancia para López Obrador y para las causas progresistas del país" y recordó que hay una creciente influencia evangélica en la política latinoamericana, en especial en Brasil.
"Urge un observatorio ciudadano para vigilar que cuando el PES exija puestos, estos no sean en posiciones donde pueda bloquear acceso a derechos sexuales y reproductivos", señaló.
Sin embargo, Flores se declaró, en una entrevista al diario Reforma, "gay friendly" y dijo que su organización no es "un partido homofóbico".
"Puedo convivir con gays, no tengo ningún problema. Cuál es la circunstancia. Podemos tener concepciones distintas, pero podemos abrazarlos, besarlos. Somos mexicanos", afirmó en su defensa.
El analista Leo Zuckermann señaló que la alianza que apoya a López Obrador no es sólo "pragmática", pues "aunque muchos izquierdistas se rehúsen a aceptarlo" el favorito de las encuestas "comparte los valores conservadores de los evangélicos del PES". "Es evidente que está en contra del derecho de las mujeres a decidir, de que los homosexuales puedan casarse y adoptar hijos y que el consumo de drogas es legal", señaló.
Zuckermann recordó que fue jefe de gobierno de la capital, "no hizo nada en esta materia" sino su sucesor Marcelo Ebrard, que convirtió a la urbe "en la ciudad más liberal del país". "Señores de la izquierda, ya es hora que reconozcan que es un conservador en estos temas", afirmó. El Partido Acción Nacional (PAN, derecha) también cuestionó a López Obrador, que supera por 2 a 1 en las encuestas a su inmediato rival, el abogado Ricardo Anaya, postulado por esa formación, por hacer un "uso electoral y de manipulación de la religión" para "conseguir votos".(ANSA).
regina
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