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La sequía azota a México
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 25 MAY - La quinta parte del territorio mexicano sufre de sequía y aunque todavía no hay una situación de emergencia en el país se teme que la situación se agrave hasta junio, cuando recién entonces comiencen a generalizarse las lluvias en el país.
El Monitor de Sequía en México señaló que entre la segunda mitad de abril y la primera de mayo aumentó el fenómeno en 4,4%, sobre todo en la zona limítrofe entre los estados sureños de Guerrero, Oaxaca y Puebla, para llegar a 21% del país.
En la zona occidente, centro y sur del país, en tanto, se observa una "sequía moderada" que está sometida a severa vigilancia por cuanto se teme que pueda pasar a fuerte.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SME), el 16,6% de la superficie que corresponde al Consejo de Cuenca Río Coatzacoalcos, registra "sequía extrema".
El caudal abarca unos 24,000 kilómetros, y nace desde las montañas del estado de Oaxaca y desemboca en las costas del Golfo de México, en el estado de Veracruz.
De acuerdo con el Monitor, 20 municipios de Tabasco, Veracruz, Chiapas y Oaxaca, zona sureste del país, resienten los efectos de la sequía extrema.
En cambio, gracias a las lluvias por arriba del promedio en Coahuila (norte) y Yucatán (sureste), disminuyeron las zonas con condiciones anormalmente secas y sequía moderada.
Víctor Alcocer, Subdirector Técnico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), considera que la situación obedece a que mayo es el mes cuando se registran las temperaturas más altas en el país.
Sin embargo, descartó la existencia de una emergencia por sequía en la presente temporada, pero destacó que el fenómeno tiene este año un patrón de impacto regional distinto.
La región con lluvias escasas se desplazó de toda la zona costera del Pacífico hacia el centro y hacia abajo, afirmó.
En estados como el norteño de Tamaulipas y el vecino de Veracruz, la falta de precipitaciones puso en crisis al sector de la ganadería, con la muerte de miles de reses y el recorte en el suministro de agua.
En este año, se reporta la muerte de 2,000 animales por falta de pastizales y agua o por haber quedado bloqueados en el lodo de las represas, que llegaron a su nivel mínimo.
En el puerto de Tampico, Tamaulipas, unas 2,000 familias sufren escasez de agua y son abastecidos con camiones cisterna.
El 80% de los 600 embalses, pequeños, medianos y grandes, ubicados en ranchos ganaderos en el puerto de Altamira, en el mismo estado, se encuentran secos y sólo el 20% cuentan con reservas de agua pero se teme que se pierdan en dos semanas.
En la ciudad de Jerez, en el estado central de Zacatecas, las autoridades señalaron que los mantos freáticos descendieron 10 metros en su nivel y que las bombas están trabajando de manera forzada.
En el estado vecino de San Luis Potosí, fuentes oficiales consideran que en los primeros cuatro meses del año se vive una de las peores sequías de los últimos 20 años.
Ya en 2011 el norte del país sufrió la peor sequía de sus últimos 70 años, que azotó los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León y Zacatecas, la mayoría de la zona norte y centro norte de México.
Según la Confederación Nacional Campesina, que agrupa a cinco millones de productores del campo, la sequía en ese año arrojó la pérdida de 450,000 cabezas de ganado, principalmente de vacas.
El año pasado, hubo una sequía moderada que afectó el 20% del país y fue considerada la más fuerte desde 2013, afectando desde la Ciudad de México hasta la región norte del país.
JMRS
