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Un clásico para recuperar el liderato e intimidar antes de la Copa
Barcelona, (EFE).- A falta de una semana para el inicio de la Copa del Rey, donde ambos equipos parten como claros favoritos, el Barça visita este viernes la pista del Real Madrid (20.45 horas) en busca de un triunfo que iguale a blancos (20-4) y azulgranas (19-5) en el peldaño más alto de la Euroliga.
Si bien es cierto que el cuadro madrileño venció en el primer clásico de la temporada, la Supercopa Endesa (83-88) disputada en septiembre en Tenerife, el equipo de Sarunas Jasikevicius ganó los dos siguientes: 93-80 en la Euroliga el 12 de diciembre y 75-85 el 23 de enero en la Liga Endesa.
Desde la llegada del técnico lituano al banquillo azulgrana en verano de 2020, la tendencia es clara. El Real Madrid se ha impuesto en las dos finales de la Supercopa Endesa, pero el Barça ha vencido en ocho de los nueve duelos directos disputados entre las tres grandes competiciones.
El cuadro catalán dominó el ritmo y el marcador prácticamente en la totalidad de los dos últimos precedentes, en los que destacaron dos jugadores con pasado madridista, el ala-pívot Nikola Mirotic y el base Nico Laprovittola.
En el clásico europeo de la primera vuelta, el hispano-montenegrino vivió una noche inolvidable al batir su récord personal de valoración en la Euroliga (39 créditos) e igualar el de anotación (31 puntos, con 4 de 4 en tiros de dos y 3 de 6 en triples) además de capturar 10 rebotes.
Al duelo liguero del 23 de enero llegó más justo de forma, recuperado de la COVID-19 en la víspera, pero igualmente resultó decisivo al anotar a falta de 20 segundos el triple que rubricó el triunfo barcelonista, para un total de 13 puntos (3 de 4 en triples).
Laprovittola, por su parte, fue elegido 'MVP' del duelo en su regreso a Madrid con la camiseta del eterno rival (9 puntos, 6 asistencias y 19 de valoración) y en el choque europeo del Palau Blaugrana secundó a Mirotic con 16 puntos (3 de 4 en triples), además de repartir 5 asistencias y registrar un 23 de valoración.
Asimismo, el cuadro catalán llega a la cita en mejor dinámica de resultados después de ganar los seis últimos partidos entre todas las competiciones, una racha que arrancó precisamente con el triunfo del 23 de enero en el WiZink Center.
Además, a diferencia de un Real Madrid que este martes perdió en la pista del Fenerbahce turco (66-51), el Barça ha tenido toda la semana para preparar el partido después de ganar el domingo al Monbus Obradoiro (83-67) y realizará su primer desplazamiento desde el 23 de enero.
En el capítulo de bajas, el escolta Álex Abrines encara la fase final de su recuperación tras ser operado de la rodilla el 16 de septiembre y esta semana ya ha completado los primeros minutos de entrenamiento junto a sus compañeros, aunque su regreso dependerá de la evolución y sensaciones durante las próximas semanas.
Tampoco viajarán a Madrid el pívot Pierre Oriola, con una sobrecarga en la articulación sacroilíaca derecha, ni el escolta Cory Higgins, que arrastra unas dolencias en la fascia plantar del pie izquierdo y en los próximos días deberá decidir si seguir un tratamiento conservador o operarse.
En otro orden de cosas, el del viernes puede ser un partido importante en la carrera del base Nick Calathes, que con un total de 1601 asistencias en la Euroliga se encuentra en disposición de batir el récord de su compatriota Vassilis Spanoulis (1607) como máximo asistente histórico de la competición.
Jamileth
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