Policrato Philodemos
Un proyecto de Nación: Parte 2/8
Autores: A. C.G. PA. H. DEM, Manuel Rodríguez Gordillo; Doctor en Física Nuclear, Roger Magar Vincent
"Un análisis para México en el Siglo XXI"
Segunda de 8 Partes
II- Situación actual
Dada la acelerada evolución de la ciencia y los avances tecnológicos que ha tenido como secuela la rapidez, casi instantánea, con que se transmite la información, las cada vez mayores velocidades de traslado e intercambio de productos, de la interdependencia económica-tecnológica y sus consecuencias políticas, así como la reducción virtual de la geografía, debido a los avances tecnológicos que han vuelto más rápidos los traslados e inmediatas las comunicaciones y noticias, convirtiendo, de facto, al mundo en lo que ha dado a llamarse una aldea planetaria, que ha potencializado el llamado "Efecto Mariposa" ("No se puede pisar una mariposa sin alterar el orden del universo", Lao Tse dixit), pues ningún país en la actualidad puede mantenerse ajeno al acontecer internacional, y menos aún desarrollar un proyecto de nación que excluya al ámbito geopolítico, científico, tecnológico, y económico mundial, ya que éste será el escenario en donde indefectiblemente tendrá que desenvolverse y competir como nación, razón por la que para elaborar un proyecto de nación posible y sustentable, se hace indispensable analizar la situación propia desde donde se pueda iniciar cualquier proyecto, dadas las condiciones internacionales existentes e inmodificables para dicho país en ese momento.
a.- Nacional
El panorama nacional nos muestra la realidad de un país en vías de desarrollo en el que la dependencia tecnológica del extranjero es casi absoluta, situación que de "facto" puede equipararse a la de una colonia tecnológica, dado que la mayoría de la tecnología y sus insumos para sostener alguna industria, así como los bienes o herramientas tecnológicas necesarias, deben importarse del extranjero, provocando que la fuga de divisas por pagos de importaciones y de derechos de patente sigan siendo una cuantiosa sangría a la economía nacional, circunstancia que frena el desarrollo y lo subordina, de hecho, a los intereses de los países proveedores, quienes, a menos que renuncien a la hegemonía que poseen y a los beneficios que esta les otorga, nunca permitirán que su tecnología de punta llegue a otros países que le puedan competir en dicho renglón.
Paralelamente a la situación descrita, cabe señalar que entre los países de la OCDE somos el más atrasado educacional y tecnológicamente, debido al decrecimiento de la excelencia académica en los programas oficiales de estudio, mismos que por razones político-electorales y por corrupción, han sido subordinados a los intereses sindicales de las cúpulas magisteriales, amén de que también somos el país que menos presupuesto destina a la investigación y al desarrollo científico-tecnológico, quizá porque la clase política que decide los destinos de México está compuesta por analfabetos de la ciencia y de la tecnología, a quienes no les interesa el desarrollo del país por tener su identidad e intereses fincados en el extranjero, o porque en su ignorancia y visión cortoplacista suponen que se encuentran a salvo de las crisis económicas generalizadas que provocan, y para quienes, debido a sus limitaciones intelectuales, la "cultura" no incluye el conocimiento científico ni tecnológico, sino solamente los llamados "juegos florales de poesía" y/o "encuentros literarios", así como los festivales cinematográficos, de danza, de música, etc., y por lo mismo malgastan el presupuesto de la nación en festivales solamente de arte, muy respetable y necesario en el ámbito de la sensibilidad humanista que es el lugar que le corresponde, pero en donde desgraciadamente el conocimiento de la ciencia y de la tecnología quedan excluidos (mismos que en la actualidad se han convertido en herramientas de dominio), como si literatos, poetas, dramaturgos, músicos y danzantes (por citar solamente algunas de las prioridades de quienes toman las decisiones políticas en México), con sus actividades pudieran sacar al país del subdesarrollo y de la dependencia en la que hemos caído a escala internacional.
b.- Internacional
En lo que corresponde al análisis de la situación internacional, encontramos que la tendencia continúa dirigida cada vez más al área del conocimiento científico-tecnológico, dado que a todos los dirigentes y estadistas de las naciones desarrolladas y en vías de desarrollo (menos en México), les ha quedado claro que el conocimiento y la tecnología de punta, tanto militar como industrial, ha cobrado cada vez más importancia como una poderosa herramienta de dominio.
En correspondencia con esa visión podemos observar como ejemplo de lo anterior, que países como Surcorea, Malasia, Taiwán, Irlanda, España, y más recientemente la India, China, Chile y Brasil, países que le apostaron a la inversión en infraestructura industrial y al conocimiento, derivado de la inversión dirigida hacia la investigación y hacia la excelencia académica de su sistema educativo, han logrado un incremento notable de su PIB, una mayor independencia tecnológica del exterior, un considerable ahorro de divisas, la exportación de bienes industriales con alto valor agregado y de contratos de asistencia tecnológica, así como paralelamente un desarrollo económico y social que también se ha traducido en mejoras para el bienestar general de su población.
Lo anteriormente citado se hace evidente debido al liderazgo que estos países están asumiendo en la arena internacional, que además señala el camino correcto hacia un desarrollo sustentable y hacia una independencia tecnológica del extranjero, lo que dicho en otras palabras, son países que se encuentran abandonando la vieja tutela tecnológica y económica del exterior, que les dificultaba ejercer una plena soberanía en sus tomas de decisiones.
EEM
