Internacional - Economía

Confianza del consumidor Estados Unidos toca mínimos de nueve meses; mercado vivienda se estabiliza

2023-04-25

Aunque el mercado laboral sigue siendo ajustado, el impulso se está desacelerando y las...

Por Lucia Mutikani

(Reuters) - La confianza del consumidor estadounidense cayó a un mínimo de nueve meses en abril, a medida que aumentaban las preocupaciones sobre el futuro, lo que incrementó aún más el riesgo de que la economía entre en recesión este año.

La encuesta de confianza del consumidor del Conference Board del martes también sugirió que los estadounidenses se estaban preparando para refugiarse a medida que se oscurece el panorama, y la proporción que planea comprar electrodomésticos importantes en los próximos seis meses cayó al nivel más bajo desde 2011.

Las vacaciones tampoco estaban en las cartas para muchos. Los consumidores en general han mostrado resiliencia a pesar de la alta inflación y el aumento de las tasas de interés, manteniendo la economía a flote gracias a un mercado laboral fuerte.

Pero aunque el mercado laboral sigue siendo ajustado, el impulso se está desacelerando y las ventas minoristas se han debilitado.

"Las tasas han estado subiendo durante más de un año y estamos viendo los efectos", dijo Jennifer Lee, economista senior de BMO Capital Markets en Toronto. "A pesar de un mercado laboral aún ajustado, que sigue siendo algo bueno, la persistente inflación tiene sus consecuencias".

The Conference Board dijo que su índice de confianza del consumidor cayó a 101,3, el nivel más bajo desde julio de 2022, desde una lectura revisada de 104,0 en marzo. Los economistas encuestados por Reuters esperaban que el índice se mantuviera sin cambios en relación a marzo. La caída reflejó un deterioro en las expectativas para los consumidores menores de 55 años y los hogares que ganan 50,000 dólares o más.

El índice de situación actual, basado en la evaluación de los consumidores de las condiciones comerciales y laborales actuales, aumentó a 151,1 desde 148,9 el mes pasado. El índice de expectativas, elaborado a partir de las perspectivas a corto plazo sobre las condiciones de ingresos, negocios y mercado laboral, cayó a 68,1 desde 74,0 en marzo. Una lectura por debajo de 80 durante mucho tiempo se asocia con una recesión.

Los riesgos de una recesión han aumentado tras el colapso de dos bancos regionales de Estados Unidos en marzo, que endureció las condiciones crediticias. Una lucha que se avecina para aumentar el tope de endeudamiento del gobierno federal de 31,4 billones de dólares también representa una amenaza para la economía.

La proporción de consumidores que ven las ofertas de trabajo como "abundantes" aumentó, mientras que la aquellos que describen los empleos como "difíciles de conseguir" bajó. El llamado diferencial del mercado laboral del sondeo, derivado de datos sobre opiniones de los encuestados sobre si los trabajos son abundantes o difíciles de conseguir, subió a 37,3 desde 36,5 en marzo, en consonancia con un mercado laboral ajustado.

PLANES DE COMPRA SE DEBILITAN

Las expectativas de inflación a 12 meses de los consumidores cayeron al 6,2% desde el 6,3% registrado el mes pasado. La proporción de quienes planean comprar electrodomésticos en los próximos seis meses cayó al 41%, la menor desde septiembre de 2011, desde el 44,8 de marzo. La proporción que planea comprar vehículos de motor fue la más pequeña en nueve meses.

La proporción de quienes planeaban irse de vacaciones fue la más pequeña desde junio pasado. Menos consumidores tenían la intención de comprar una casa. Sin embargo, algunos economistas advirtieron que no se debía dar demasiada importancia a la caída de los planes de compra.

Ese escepticismo también se extendió a los planes de compra de viviendas. Un informe separado del Departamento de Comercio mostró el martes que las ventas de casas nuevas aumentaron un 9,6% a una tasa anual desestacionalizada de 683,000 unidades en marzo, el nivel más alto desde marzo de 2022.

Las ventas de casas nuevas se contabilizan en el momento de la firma de un contrato, lo que las convierte en un indicador adelantado del mercado inmobiliario, aunque pueden ser volátiles mes a mes. Los compradores han aprovechado cualquier baja en las tasas hipotecarias. La tasa promedio de la popular hipoteca a 30 años, que tocó un máximo de 7,03% a fines de 2022, cotizó mayormente más baja en marzo, según datos de Freddie Mac.

Las señales de que el mercado de la vivienda se estaba estabilizando en niveles más bajos se vieron reforzadas por otros datos del martes que mostraron que los precios de las casas unifamiliares aumentaron en febrero después de siete caídas mensuales consecutivas.

El índice nacional de precios de la vivienda S&P CoreLogic Case-Shiller, que cubre las nueve divisiones del censo de Estados Unidos, subió un 0,2% en febrero a nivel desestacionalizado. Eso siguió a una caída del 0,2% en enero. Los precios subieron un 2,0% no ajustado estacionalmente sobre una base interanual en febrero tras aumentar un 3,7% en enero.



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