Ciencia y Tecnología

Rusia realiza otra prueba exitosa de su nuevo misil intercontinental Bulavá

2010-10-29

Fabricados por el Instituto de Tecnología Térmica de Moscú, los Bulavá...

Moscú, (EFE).- El submarino nuclear ruso "Dmitri Donskói" realizó hoy en el mar Blanco otro lanzamiento de prueba exitoso del nuevo misil intercontinental Bulavá en lo que va de mes y de año, informó el Ministerio de Defensa de Rusia.

"El lanzamiento fue efectuado desde las aguas del mar Blanco y tenía como objetivo el polígono de Kurá, en Kamchatka (extremo oriente de Rusia). Los parámetros de la trayectoria de vuelo del cohete fueron normales y las cargas impactaron con éxito en el polígono de Kurá", precisó un portavoz de esa cartera.

El "Dmitri Donskói" disparó el cohete en posición de inmersión, según el parte de Defensa difundido por las agencias rusas.

Se trata del décimo cuarto lanzamiento de prueba de este cohete, el segundo de este año, después del que se llevó a cabo, también con éxito, el pasado día 7.

De los doce anteriores a estos dos últimos, sólo cinco se consideraron exitosos o parcialmente exitosos.

"El décimo quinto lanzamiento de prueba del Bulavá está previsto para diciembre y se realizará por primera vez desde el submarino nuclear ruso 'Yuri Dolgoruki'", señaló por su parte una fuente del Estado Mayor de la Armada rusa.

Precisó que "el cambio de los lanzamientos de prueba a este submarino nuclear de cuarta generación será posible gracias a los exitosos lanzamientos del cohete desde el sumergible 'Dmitri Donskói'".

El "Yuri Dolgoruki" es el primer sumergible de su clase construido en la Rusia postsoviética, proyecto que ha costado cerca de mil millones de dólares.

Se trata del primer submarino del denominado Proyecto 995, código Borey, tiene 170 metros de eslora y 13,5 metros de manga en su parte más ancha, y puede navegar a hasta 450 metros de profundidad.

Otros dos submarinos, el "Alexandr Nevski" y el "Vladímir Monomaj", se encuentran en proceso de construcción desde 2004 y 2006, respectivamente.

En el marco de este proyecto, Rusia planea construir ocho submarinos exclusivamente para transportar Bulavá y hasta el momento sólo había empleado para los ensayos el sumergible "Dmitri Donskói".

El misil R30 3M30 Bulavá-30 (SS-NX-30, según la clasificación de la OTAN) tiene un alcance de 8.000 kilómetros y está destinado a los submarinos nucleares rusos de última generación.

Rusia confía en que los Bulavá y los Tópol, el misil intercontinental con emplazamiento terrestre, le permitan mantener la paridad nuclear con EEUU por lo menos durante el próximo medio siglo.

Tras el último de los lanzamientos fallidos, el 11 de diciembre del año pasado, el comandante en jefe de la Armada rusa, Vladímir Visotski, ordenó la suspensión de las pruebas hasta el esclarecimiento de las causas de los fracasos.

La Armada rusa tenía previsto efectuar el último ensayo en 2008 y comenzar la producción en serie de los Bulavá en 2009, pero los repetidos fallos le hicieron cambiar de planes.

Los militares rusos sostienen que esos misiles que son capaces de burlar todos los sistemas de defensa hasta ahora conocidos, incluido el escudo antimisiles norteamericano.

Fabricados por el Instituto de Tecnología Térmica de Moscú, los Bulavá pueden portar hasta diez ojivas nucleares de guiado individual que vuelan a velocidades supersónicas.



VGQ