Internacional - Población

Colombia espera mejoría del clima, aunque persisten las inundaciones

2011-05-23

Su previsión coincide con la de la Organización Metereológica Mundial, que...

Por Nina Negrón, AFP

BOGOTÁ - Colombia, uno de los países que más ha sufrido en el último año las lluvias causadas por el fenómeno de La Niña, espera que el clima mejore en las siguientes semanas, aunque las inundaciones persisten y los suelos y la infraestructura se encuentran muy vulnerables, dijeron expertos.

"Esperamos que para fines de mayo o comienzos de junio haya terminado el fenómeno de La Niña, que ha sido el más intenso de los últimos 60 años y a Colombia le ha traído las lluvias más fuertes de los últimos 40", dijo el lunes Yolanda González, jefe de pronósticos del estatal Instituto de Meteorología.

Su previsión coincide con la de la Organización Metereológica Mundial, que este lunes anunció desde Ginebra que el fenómeno de La Niña está acabando su recorrido y debería cesar para el segundo semestre del año.

Sin embargo, Yolanda González advirtió que la emergencia en Colombia no ha terminado, debido a los efectos que deja más de un año de lluvias prácticamente ininterrumpidas.

"Dos aguaceros fuertes, sumados a la saturación de agua en los suelos y los daños en la infraestructura pueden dejar consecuencias graves, pues hay mucha vulnerabilidad, los drenajes y los jarillones están afectados", dijo esta experta a la AFP.

Las precipitaciones que comenzaron en abril de 2010 y se vieron potenciadas con la entrada de La Niña a mediados de ese año dejan hasta ahora 464 personas fallecidas, 566 heridas, 79 desaparecidos, 13.304 viviendas destruidas y 472.954 averiadas, según un balance proporcionado este lunes a la AFP por la Dirección de gestión de riesgos del ministerio del Interior.

Además, las principales vías del país sufren con frecuencia derrumbes y caídas de puentes que interrumpen el paso y dificultan el tránsito de personas y mercancías.

"Hay impactos de mucha consideración en la región andina, que es la más poblada y a la que atraviesan los principales ríos del país: el Cauca y el Magdalena. Hay saturación de agua y ha seguido lloviendo en las cuencas aportantes", refirió Yolanda González.

"El río Magdalena, que históricamente registra un nivel crítico a los 8 metros, ha superado este año en algunos puntos los 11 metros", añadió.

Además, están afectadas las ciudades del noreste de Colombia, con lluvias que en Riohacha (Guajira, cerca de la frontera con Venezuela) han superado tres veces el promedio en mayo, y Cúcuta (Norte de Santander, también sobre el límite con Venezuela) con el doble de las precipitaciones promedio en este mes, indicó la especialista.

También sufren fuertes precipitaciones las ciudades de Santa Marta y Barranquilla (norte, sobre el mar Caribe), Manizales (centroeste) y Popayán (suroeste).

En Bogotá, las lluvias de mayo son 20% superiores al promedio, y la sabana que rodea a la capital colombiana, una zona de cultivos de flores y de ganadería, más de 32,000 hectáreas de tierras se encuentran anegadas, según el gobernador de la provincia de Cundinamarca, Andrés González.

El gobernador señaló que en el río Bogotá hay miles de toneladas de lodo que se comenzaron a retirar este lunes.

"Hemos comenzado el dragado en puntos específicos, en los lugares que hemos identificado se debe actuar", dijo.

En total, más de un millón de hectáreas se han visto inundadas en Colombia desde el año pasado, según cifras del ministerio de Agricultura.

Para atender la emergencia por las lluvias, el gobierno del presidente Juan Manuel Santos ha ejecutado hasta ahora 3,7 billones de pesos (más de 2,000 millones de dólares). Sin embargo, habitantes de los municipios más afectados se quejan de que las ayudas no les llegan o son insuficientes.

El fenómeno de La Niña se caracteriza por aguas inhabitualmente frías en el centro y el este del océano Pacífico, mientras que El Niño destaca por sus temperaturas superiores a lo normal.

Estos dos fenómenos perturban los regímenes de circulación oceánica y atmosférica a gran escala y tienen importantes repercusiones en el clima de numerosas regiones del planeta.



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