Internacional - Población

Los "indignados" de Madrid bajo mayor presión para que se vayan

2011-06-02

Los acampados de Sol seguirán este jueves con sus asambleas buscando lograr un consenso, que...

MADRID, (AFP) - Los jóvenes "indignados" que ocupan la céntrica Puerta del Sol reciben cada vez mayores presiones para que abandonen su campamento en el corazón de Madrid, con los comerciantes de la zona urgiendo al gobierno para que desaloje a los acampados.

El presidente de la Confederación de Empresarios madrileña (CEIM) y presidente de la Cámara de Comercio de Madrid, Arturo Fernández, dio este jueves un ultimátum al gobierno español para que ponga fin a la acampada, que comenzó hace dos semanas y media.

"Los empresarios hemos pedido al Gobierno de la Nación que decida una hoja de ruta y hemos puesto un ultimátum (...) Hemos puesto una fecha tope, que está en la hoja de ruta, y tiene que ser muy inmediata. Puede ser que la fecha tope sea entre el lunes y el martes", dijo Fernández.

Los comerciantes de la Puerta del Sol, céntrica y turística plaza madrileña, denuncian caídas de ventas, desde que los "indignados" han montado su campamento, sobre cuya reestructuración o final no acaban de ponerse de acuerdo los propios acampados con ideas que van desde desmantelar el campamento y dejar un punto de información hasta seguir indefinidamente con él.

Los acampados de Sol seguirán este jueves con sus asambleas buscando lograr un consenso, que buscan desde hace tres días, sobre el destino de su pequeño pueblo de tiendas y lonas levantado en el corazón de Madrid.

Enfrentados a problemas logísticos, de salubridad y de seguridad, los manifestantes empezaron el miércoles a reestructurar el campamento, quitando algunas lonas y desplazando algunas casetas para liberar espacio en el centro y facilitar la circulación.

Pero, a pesar de las presiones crecientes del gobierno, de las autoridades locales y de los comerciantes, no han reducido la superficie del campamento como querían algunos de los acampados.

El miércoles, el ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, advirtió a los manifestantes que "no puede ser que unos ciudadanos acaben con los derechos de otros ejerciendo los suyos", aunque siguió mostrándose cauto respecto a la posibilidad de un desalojo por la fuerza.

En Barcelona, los "indignados" acampados en la céntrica Plaza Cataluña decidieron el miércoles seguir indefinidamente en el lugar hasta no lograr un consenso sobre la forma de levantar el campo.

"No Nos Vamos: Acampada BCN se queda en plaza Catalunya", aseguraron los "indignados" en un comunicado difundido la tarde del jueves por medio de la red social Twitter, que es uno de los principales canales de comunicación de los indignados.

La Asamblea General de AcampadaBCN "permanecerá en Plaça Catalunya para continuar trabajando en un espacio público de debate que nos ha permitido recoger colectivamente las demandas y propuestas de miles de ciudadanos a quienes, por fin, se ha dado voz", añadió.

"La Asamblea decidió no marchar de Plaza Catalunya hasta que no haya consenso de cómo hacerlo", escribieron los "indignados" en Twiter, después de mantener una asamblea en la que calcularon la participación en varios centenares de personas que ocupaban la plaza.

El movimiento de protesta de los jóvenes contra el desempleo, la clase política o las derivas del capitalismo, ha tenido, desde su aparición el 15 de mayo, un gran eco en España donde decenas de miles de ciudadanos participaron en las manifestaciones.

Pero falto de líder y de una estrategia sobre acciones futuras, el movimiento ha ido languideciendo.



KC
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