Cierran las FARC más de una década de secuestros políticos

Martha Trujillo. Corresponsal

Bogotá. (Notimex).- El regreso a la libertad esta semana de los últimos 10 soldados y policías en cautiverio, pone fin a más de una década de secuestros de políticos y militares a quienes las FARC buscaban canjear por rebeldes presos.

Desde 1998, esa organización insurgente acudió a la retención de miembros de la Fuerza Pública y representantes de la clase política, la mayoría congresistas, para presionar la negociación de un canje humanitario.

El investigador Alvaro Villarraga consideró que con la liberación de los últimos uniformados y la promesa de las FARC de cesar el secuestro de civiles, se prevé un viraje en la estrategia que usó como arma de guerra.

En eso coincide el director de la Organización No Gubernamental Planeta Paz, Carlos Salgado, para quien "el canje dejará de ser prioridad por ahora en la agenda" de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

"Al menos en sus más recientes comunicados, la guerrilla no coloca ese tema como punto de discusión, por lo que creo que está tratando de abrir un canal de diálogo" con el gobierno, dijo el activista a Notimex.

Las FARC mantuvieron en cautiverio a políticos de alto rango, como la ex candidata a la Presidencia de Colombia, Ingrid Betancourt, rescatada en 2008 por el Ejército junto a otros 14 rehenes, entre ellos tres asesores estadunidenses.

Como rehenes, también permanecieron varios ex congresistas y diputados regionales, al igual que oficiales, suboficiales, soldados y policías, a los cuales esa guerrilla pretendía canjear por 500 de sus hombres presos.

Organizaciones sociales calculan que entre 2002 y 2011, las FARC realizaron dos mil 678 plagios, de los cuales medio centenar tuvieron como objetivo presionar al gobierno colombiano a un canje humanitario.

"Recordemos que el 78 por ciento de los secuestros cometidos por las FARC son extorsivos económicos, de los que poco se habla pues se trata de personas anónimas", dijo la directora de la Fundación País Libre, Olga Gómez.

Para la representante de la ONG, el anuncio de esa guerrilla de suspender el secuestro de civiles con fines económicos, debe pasar por informarle al país que ocurrió con 405 de ellos de los cuales no se sabe nada.

Por ahora, los analistas creen que con el regreso a la libertad de los últimos 10 uniformados en cautiverio, se pone fin a la lista de los "canjeables", que por años uso las FARC como arma de presión sobre el gobierno.

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