La ambición deportiva de Kazajstán

Por Stefan Tabeling y Andreas Zellmer (dpa)

BERLÍN/ALMATY (dpa) - La victoria del italiano Vincenzo Nibali y del equipo Astana en el Tour de France fue celebrada como propia en Kazajstán, un país que aspira a concretar una revolución deportiva en los próximos años.

Nibali tendrá un extenso programa de actividades tras su triunfo en la prueba más tradicional del ciclismo, pero no podrá evitar realizar un viaje de 5.000 kilómetros hasta Kazajstán.

Al fin y al cabo, es el equipo kazajo el que paga su sueldo estimado en unos cuatro millones de euros (5,4 millones de dólares) anuales.

La visita de Nibali a la ex república soviética es considerada todo un honor en el país del este europeo, donde el presidente Nursultan Nazarbayev se encargará de recibir en persona al italiano.

La victoria en el Tour representa una plataforma ideal para un país que aspira a organizar, entre otros eventos, los Juegos Olímpicos de invierno de 2022 en Almaty.

Pese a su escasa tradición deportiva, acoger los Juegos de 2022 resulta una misión más que posible para Kazajstán. Sólo Oslo y Pekín compiten por la organización del evento y ambos cargan con importantes desventajas.

Unos Juegos en Pekín chocarían con la política del Comité Olímpico Internacional (COI) de rotar las regiones en las que se realizan sus competencias. Ya Asia albergará los Juegos de invierno de 2018 en la surcoreana Pyeonchang, mientras que los Juegos Olímpicos de verano de 2020 se disputarán en Tokio.

Oslo tiene una gran tradición invernal, pero el gobierno aún no confirmó su apoyo a la postulación debido a unas recientes encuestas que muestran el rechazo de la población noruega a organizar el evento.

Una opinión pública contraria a los Juegos -como sucedió en candidatas potenciales como Múnich, Cracovia o la región suiza de Grisonia- no es algo que preocupe a las autoridades kazajas. Organizaciones como Amnistía Internacional y Humans Rights Watch han denunciado repetidamente la violación de derechos humanos en el país.

Los recursos financieros en el rico estado petrolero tampoco serán un problema.

Kazajstán tiene grandes pozos petrolíferos que financian el fondo soberano Samruk-Kazyna, que respalda una compañía petrolera, una aerolínea y los servicios de correo y ferroviarios. Samruk-Kazyna patrocina también el equipo Astana con diez millones de euros al año y un contrato hasta 2016.

"Este proyecto en todo caso está pensado para el largo plazo", dijo a dpa Kairat Kelimbetov, presidente de la Federación Kazaja de Ciclismo y jefe del banco nacional. "Tiene gran valor para Kazajstán y es importante en diferentes mercados".

El país espera utilizar el deporte como un billete de entrada en varios mercados y para promocionar la nación en el mundo. Los Juegos de Asia de invierno 2011 fueron en Almaty, mientras que los Juegos Universitarios invernales llegarán en 2017.

"Seríamos una buena sede, la ciudad está preparada", dijo sobre la candidatura para 2022 Kelimbetov, que mencionó también otros proyectos como la Exposición Mundial de 2017 en Astana.

Pero las imágenes más efectistas son las del deporte. Cuando Alexander Vinokourov ganó el oro olímpico de ciclismo en frente del Palacio de Buckingham en Londres 2012, el presidente Nazarbayev estaba extasiado. Vinokourov es un héroe nacional en Kazajstán y dirigente destacado del equipo Astana.

El hecho de que fuera suspendido por doping sanguíneo en la época sucia del ciclismo es algo que no interesa a nadie en su país. "Ya fue castigado. Después de decir adiós a Armstrong y Contador, hemos creado un nuevo equipo Astana. Nos sometemos a las guías de la Agencia Mundial Antidoping, la Unión Ciclista Internacional y el MPCC (Movimiento por un Ciclismo Creíble)", dijo Kelimbetov.

El equipo Astana es miembro del club presidencial de deportes profesionales, creado por Nazarbayev en 2012. Equipos profesionales de fútbol, baloncesto, hockey sobre hielo o waterpolo están incluidos, así como el dos veces campeón olímpico de halterofilia Ilya Ilyin o Denis Ten, bronce en los Juegos de Sochi 2014 en patinaje artístico sobre hielo.

En Londres 2012, Kazajstán terminó duodécimo en el medallero con siete oros. Su estrella sigue creciendo a través del deporte y da pocos signos de apagarse aún.

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