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La final de la Champions League se jugará en Oporto y con público

2021-05-13

El cambio de sede, como ya ocurrió también hace un año, se produce...

Juan L. Cudeiro | El País

A Coruña - La final de la Liga de Campeones se jugará finalmente en Portugal, que ya acogió la final de la Champions en 2020. Los finalistas de la Copa de Europa, el Manchester City y el Chelsea, dos clubes ingleses, se enfrentarán el próximo 29 de mayo en el estadio Do Dragao, de Oporto, en lugar de hacerlo en Estambul, donde estaba prevista la celebración de la final, y después de considerar también el estadio de Wembley, en Londres.

El cambio de sede, como ya ocurrió también hace un año, se produce después de que Turquía fuera agregada a la lista roja de Inglaterra de países con brotes severos de coronavirus, lo que presentaba riesgos para que los aficionados viajaran al país y también podía afectar a la agenda de los jugadores, especialmente la de aquellos que disputen la Eurocopa este verano, al verse obligados los viajeros procedentes de Turquía a superar una cuarentena de diez días. Portugal, sin embargo, está en la lista verde de Inglaterra, incluido entre los 12 territorios de bajo riesgo donde las personas no están obligadas a ponerse en cuarentena a su regreso a partir del próximo lunes, lo que facilita que miles de aficionados ingleses puedan viajar para asistir al partido.

El primer ministro británico, Boris Johnson, planteó la posibilidad de disputar la final en Wembley (Londres), para evitar así desplazamientos masivos de aficionados al extranjero, pero la UEFA descartó la opción después de no obtener garantías del gobierno inglés para que tanto su personal como patrocinadores e invitados a la final pudiesen entrar en el país sin necesidad de cumplir una cuarentena.

“Una vez más contamos con la ayuda de nuestros amigos portugueses”, apuntó en un comunicado Aleksander Čeferin, presidente de la UEFA. El país luso ya había salido en ayuda del máximo organismo futbolístico continental para organizar con urgencia la fase final de la competición del año pasado, cuya final también estaba prevista en Estambul. Entonces se jugó en Lisboa a puerta cerrada. Ahora la UEFA informa asimismo de la posibilidad de que unos 12,000 aficionados puedan asistir como espectadores al encuentro. La capacidad total del estadio, informa el organismo europeo, será confirmada a su debido momento sin que ello afecte a que los seguidores del City y del Chelsea puedan empezar a adquirir sus localidades a través de sus respectivos clubes, que dispondrán de 6,000 entradas para la venta entre sus socios desde este mismo jueves. Además, a partir del 24 de mayo la UEFA empezará a vender entradas para el público general.

Oporto iba a ser la sede de la Supercopa entre Bayern y Sevilla europea el pasado mes de septiembre. Finalmente, el partido se trasladó al Puskas Arena de Budapest, donde se dio permiso para que accediesen poco más de 15,000 aficionados. Entonces el alcalde de Oporto, Rui Moreira, amenazó con emprender acciones judiciales contra la UEFA y explicó que esperaba una compensación deportiva o financiera “por faltar el respeto y manchar el nombre de la ciudad”. Moreira acoge ahora, agradecido, la decisión con “honra y entusiasmo”. “Será una cita muy importante para retomar la actividad en la ciudad”. Oporto tiene en la actualidad una incidencia acumulada a catorce días de 55 casos de covid-19 por 100,000 habitantes, casi la mitad que la semana pasada. Además, el 40% de los portugueses han recibido al menos una dosis de la vacuna.

“Los aficionados han tenido que sufrir más de 12 meses sin poder ver a sus equipos en directo y llegar a una final de la Champions League es la cúspide del fútbol de clubes. Privar a esos aficionados de la posibilidad de ver el partido en vivo no era una opción y estoy encantado de que se haya encontrado este compromiso”, explicó Aleksander Čeferin, que espera que el partido sea un “símbolo de esperanza” en tiempos complicados.

El calendario previsto por la UEFA anuncia las próximas finales de la Liga de Campeones de aquí a 2024 en San Petersburgo, Múnich y Londres. No se descarta que pueda variar dicho calendario para cumplir los compromisos previstos y que no se han podido cumplir durante las dos últimas ediciones con Estambul.



Jamileth