Huesped

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2006-08-02

A los maestros ya nada les convence. Ni los ofrecimientos económicos. Ojala que al final del...

Por Angélica Torres.

El problema pos-electoral ha centrado tanto la atención, que el conflicto magisterial en Oaxaca ha quedado de lado, no obstante que éste ya represente una bomba de tiempo.

Los mentores de la sección 22 de Oaxaca del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, han decido radicalizar sus acciones como apoderarse de las sedes de TV azteca y Televisa en la entidad y además proponen la quema masiva de autobuses.

Este movimiento desde un principio iba más allá de mejoras salariales, tenía un objetivo político dictado por la maestra Elba Esther Gordillo, derrocar al gobernador de la entidad, Ulises Ruiz, todo en venganza por las diferencias que mantuvo con el candidato presidencial priísta Roberto Madrazo Pintado..

Los rencores no han sido olvidados, aun cuando la líder moral de los mentores fue expulsada del Partido Revolucionario Institucional y en este camino solo hay de dos sopas: o el gobierno federal a petición de Ulises Ruiz utiliza la fuerza pública para reprimir a los manifestantes o cede a la demanda y busca una salida que implique la destitución del mandatario oaxaqueño.

Sin duda, en los últimos meses del gobierno de Vicente Fox Quesada el panorama político no es nada alentador y para el Secretario de Gobernación, Carlos Abascal Carranza, tampoco, ya que no ha podido ejercer su oficio político que tanto le funcionó cuando era el titular de la Secretaría del Trabajo.

A los maestros ya nada les convence. Ni los ofrecimientos económicos. Ojala que al final del día se encuentre una solución que no implique la represión, que como están las cosas, sólo agravaría la situación política.

No hay que perder de vista Oaxaca, que representa una papa caliente, a punto de reventar.



AAG

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