México supedita plan anticrisis a reforma en Pemex

MEXICO, (AFP) - El plan del gobierno mexicano para responder a la crisis financiera internacional está atado a una polémica reforma pendiente que prevé la participación del capital privado en la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), coincidieron analistas este viernes.

El programa anticrisis lanzado por el presidente Felipe Calderón contempla un fuerte impulso de inversiones en infraestructura por 57,000 millones pesos (USD 4,560 millones) y se sustenta en una reforma "en la contabilidad y en las finanzas públicas" relacionadas con Pemex, la principal empresa del país y que aporta el 40% de los recursos fiscales del país.

La reinversión de Pemex está condicionada a mantener un balance equilibrado con el gasto público, limitando su autonomía, y debido a eso Calderón propuso "considerar fuera del presupuesto de la administración central el programa de inversión tan necesario en Pemex".

"Esto nos permitiría tener un espacio adicional de gasto por más de 78,000 millones de pesos (unos 6,240 millones de dólares) que no sólo compensaría la caída de ingresos derivada del entorno internacional adverso sino que incluso nos permitirá ampliar el programa de inversión a la infraestructura".

En camino a la resistida reforma petrolera, Calderón propuso en su plan eliminar los llamados Pidieriegas, instrumentos de financiamiento de infraestructura para la estatal Pemex, una medida que busca compensar en unos 6,000 millones de dólares la caída del ingreso gubernamental derivada de la crisis económica internacional.

Los Proyectos de Infraestructura con Impacto Diferido en el Gasto (Pidieriegas) son fondos de financiamiento del gobierno mexicano para proyectos de infraestructura, principalmente de Pemex.

Entre los puntos propuestos están: liquidar parte de estas obligaciones utilizando los excedentes de Pemex, acumulados por los altos precios del petróleo, y la otra parte dejarlas como deuda de la petrolera mexicana.

El mandatario mexicano consideró que existen los consensos para promover la autonomía técnica y financiera de Pemex e iniciar cuanto antes este proceso, que será gradual.

El presupuesto federal actualmente depende en un 40% de los ingresos fiscales de Petróleos Mexicanos.

"Es un paso evidente hacia la apertura al capital privado (de Pemex), que (Calderón) intenta sin éxito desde hace tiempo que el Congreso lo acepte. Como dicen, el momento es ahora o nunca", dijo a la AFP un analista financiero extranjero.

Los especialistas coincidieron en que la coyuntura por la crisis económica es una buena oportunidad para impulsar la polémica reforma de Pemex, propuesta en abril de este año por Calderón y que la oposición se ha negado a aprobar.

"Ante la debilidad de la economía, por causas externas, es más factible que se sienten a negociar, y ante la situación de la debilidad de la producción de hidrocarburos", indicó, de su lado, Octavio González, economista del español BBVA Bancomer.

"Si hay urgencias se hace más importante esta negociación y se alinean los partidos. Los partidos de oposición serán mas receptivos en esta coyuntura", añadió.

Para los expertos resulta impopular tanto que el gobierno no anuncie medidas anticrisis como que el Legislativo no las apruebe. "Como estamos en año electoral (comicios legislativos en 2009) todos van a querer hacer algo para paliar" la situación, añadió González.

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