Nacional - Economía

Unen a cinco Premios Nóbel críticas contra política económica de México

2009-11-20

Además, el especialista puntualizó que México tuvo una peor respuesta, en...

México, Terra México.- Las voces de los especialistas en economía reconocidos mundialmente con el premio Nóbel causan estruendos e incomodidades en las autoridades locales cada vez que hablan sobre México y su desempeño, ya que la mayoría han coincidido en diferentes momentos que el país tiene una economía débil que no promete un crecimiento significativo y sobre todo, la falta de efectividad de las políticas implementadas por el gobierno para salir de la recesión y especialmente, rechazan el alza en impuestos.

El más reciente en emitir su postura fue Joseph Stiglitz, quien recibió la presea en 2001, y sentenció México ha tenido uno de los peores desempeños en el mundo para abatir la crisis.

"Las estadísticas de crecimiento han sido muy débiles y pesimistas para este país", arremetió al mismo tiempo en que expuso que la recuperación en México es motivo de preocupación, a falta de una reforma fiscal efectiva y la dependencia relacionada con una débil y gradual mejora en EU.

Además, el especialista puntualizó que México tuvo una peor respuesta, en comparación con la reacción de Brasil o Australia, los cuales salieron avante de la crisis debido a las medidas efectivas que se impulsaron.

Otro de los Nobeles que descalificó el desempeño del país fue James J. Heckman, galardonado en el año 2000, el cual sentenció que la economía nacional está sobre regulada, es lenta y con alta dependencia al petróleo, además de que una "política de amiguismo" permitió la proliferación de monopolios que impiden un panorama efectivo de competencia.

En pleno corazón de la ciudad de México, Heckman anotó un gol al gobierno local cuando el pasado 20 de octubre sentenció que las autoridades permitieron la proliferación de ciertos monopolios, los cuales han elevado los costos y retrazado el crecimiento del país.

A su vez, Robert Engle, premio Nóbel de Economía 2003, arremetió contra el alza en los impuestos, ya que consideró que nos es la solución para impulsar el crecimiento, sobre todo en un entorno de crisis.

El pasado 23 de septiembre de este año, Engle ratificó lo que tantos analistas han reclamado desde que se esperaban más impuestos: mientras México implementa una mayor carga tributaria, otros países reducen gravámenes para reactivar la economía.

"Es una solución equivocada, no es el momento indicado para aumentar los impuestos en México, ya que hay muchas cosas que se pueden hacer para impulsar la economía", agregó.

Por otro lado, Edmund Phelps, premiado en 2006, enfatizó, el 25 de septiembre de 2009, que un incremento en el déficit de México provocaría una caída en las inversiones e impactaría en la generación de empleos.

Finalmente, Eric Maskin, Premio Nóbel de Economía 2007, afirmó que el alza en los impuestos de México tendrá "efectos negativos para toda la sociedad", ya que desalienta la inversión y productividad, además de que reduce los ingresos de las personas.

Maskin consideró que este elemento elevaría el número de pobres en el país, por lo que "en tiempos de recesión los impuestos deben de bajar".

Agregó que un incremento en la carga tributaria "tendría que darse hasta que la economía esté estable o en recuperación".



TRO
Utilidades Para Usted de El Periódico de México